"Le he dicho a la cara a Climent que, si no nos paga, o es adrede o es incompetencia"

VALENCIA. Paco Molina lidera CC OO-PV, la organización que aglutina el 39% de los delegados sindicales elegidos en los centros de trabajo de la Comunitat. "Esto quiere decir votos, representación, democracia. Estamos presentes en más del 80% de las mesas de la negociación colectiva y tenemos a más de 350 personas representando intereses generales en todo tipo de ámbitos de participación institucional", subraya.

Con esta mochila en las espaldas el dirigente no duda en sacar las uñas ante las dudas sembradas por el Consell sobre la representatividad de los sindicatos mayoritarios, todo a cuenta de las ayudas previstas en la Ley de Participación Institucional.

-El adelanto de los pagos previstos en la Ley de Participación Institucional, como informó este diario, se ha retrasado por enésima vez...

-La verdad es que, para empezar, hablar en el mes de diciembre de ‘anticipo’ ya es grave...

-¿Hay motivos para que se cuestione el reparto de las ayudas previstas entre CC OO-PV, UGT-PV y Cierval?

-De forma honesta: el País Valencià tiene una muy buena Ley de Participación Institucional. La participación institucional se deriva del acto más democrático que hay, que es el voto, y el voto sitúa a las organizaciones que ostentan esta representación, que en estos momentos son sólo CC OO y UGT. La ley no está hecha para nosotros, nos otorga esa representación por los votos que recibimos, no puede haber nada más democrático. Pero si uno ostenta el 39%, otro el 38% y alguno arma mucho ruido con el 1,7%...

-¿Insinúa que ese ‘alguno’ -Intersindical, afín a Compromís- está detrás del retraso en el adelanto de las ayudas?

-Tuve la ocasión hace pocos días de manifestarle a la cara al conseller de Economía, Rafael Climent, una reflexión, y es una reflexión que no es personal -que también- sino que está instalándose en nuestra organización, lo cual nos preocupa: o hay una clara intencionalidad política en retrasar esta circunstancia o hay una manifiesta incompetencia para sacar un reglamento adelante.

-¿Qué le respondió a esto el conseller?

-Supongo que no le gustó nada. De hecho no le gustó nada...

-A usted tampoco se le nota contento...

-No sólo es que no nos guste la actitud del conseller de Economía. Lo que no nos gusta es que haya silencios clamorosos. Un gobierno que habla e imparte doctrina de la necesidad de lograr un crecimiento diferente, de alcanzar un nuevo sistema productivo, nunca lo va a lograr si no es de la mano de las trabajadoras y trabajadores y sus representantes. Si el Consell cree que esto es un mero impuesto económico, mejor que suspenda esta aportación.

-¿Cree que el Consell lo entiende así?

-Sólo sé que no es de justicia que la labor de la primera organización sindical del País Valencià, que representa el 40% de la expresión de los trabajadores en las empresas, que cuenta con personas identificadas que están quitándole tiempo a su familia para defender intereses generales desde Vinaroz hasta Orihuela, tenga que ser asumida únicamente de la cuota de us afiliados. Éramos una de las pocas comunidades autónomas que no teníamos una Ley de Participación Institucional.

-Se enfadó mucho con la propuesta de Intersindical de destinar los 5,3 millones a los refugiados...

-Nosotros no nos estamos llevando nada crudo, y hay quien lo está vendiendo así. Aquellos que lanzan sombras de dudas y difamaciones, o interpretaciones como que ese dinero tendría que ser para los refugiados… eso es demagogia de la peor especie. Cuando nosotros negociamos un convenio o un acuerdo de carácter institucional con algún ayuntamiento o administración autonómica no lo negociamos en beneficio de Comisiones Obreras, lo negociamos para todo el mundo. Parece que esto no lo entienden o no lo quieren entender.

-¿El anterior conseller del PP, Máximo Buch, tenía clara esta filosofía de la Ley de Participación Institucional?

"BUCH LO TENÍA CLARÍSIMO. ES QUE ES ALGO EVIDENTE. ¿O LOS PARTIDOS POLÍTICOS NO PERCIBEN UNA CANTIDAD EN FUNCIÓN DE LOS VOTOS?"

-Lo tenía clarísimo. Es que es algo evidente. Es que nosotros estamos absolutamente legitimados para recibir un compromiso público. ¿O es que los partidos políticos no perciben una cantidad en función de los votos? ¿Por qué hay unanimidad cuando se tratan estas cosas en Les Corts? Que yo sepa, todos los partidos que participan en las elecciones no lo hacen de la misma manera, quien se queda fuera, se queda fuera, y no entra a participar de la institucionalidad y de la responsabilidad adosada a esta.

-¿Qué consecuencias está teniendo para ustedes el retraso del adelanto?

-Hemos tenido serios problemas de liquidez. Nosotros, como cualquier organización, tenemos previstos una serie de ingresos, y si no llegan te generan un desajuste. Ayer, sin ir más lejos, nuestro financiero tuvo que firmar un ‘confirming’ al 4,5% de interés. Nos está costando dinero de nuestro bolsillo, porque, pese a la situación, no hemos dejado de pagar a nadie.

-¿Están de acuerdo con el plan del Ayuntamiento y el Consell para acabar con la libertad horaria en el gran comercio?

"NO SÓLO ESTAMOS DE ACUERDO EN RESTRINGIR LA APERTURA EN DOMINGO, ES QUE ENTENDEMOS QUE HAY UNA ACTITUD MODERADA"

-No sólo estamos de acuerdo, es que entendemos que hay una actitud socialmente moderada respecto a determinadas prácticas. No por abrir más se vende más ni se genera más ocupación ni se registran más beneficios. Hay grandes cadenas que se han aproximado a cifras de decenas de miles de puestos de trabajo destruidos.Y, por otra parte, yo creo que hay que educar en el consumo responsable, en los valores, no en el consumismo.

-En Consell mantiene una cruzada contra Puerto Mediterráneo, que promete miles de puestos de trabajo ¿Coinciden ustedes en que es un proyecto nocivo para la Comunitat?

-Sobre Puerto Mediterráneo he de decir en primer lugar que, pese a que no representan el modelo de trabajo que nosotros defendemos, han sido muy serios desde el principio. El manager general de Intu-Eurofund, Ian Sandford, vino en persona a plantearnos el proyecto. Puede que haya puestos de trabajo directamente en juego si no se hiciera el macrocentro comercial, pero también es cierto que los que se crean por un lado acaban perdiéndose por otro lado, en los comercios tradicionales. Si son capaces de demostrarnos que estamos equivocados nos replantearemos nuestro punto de vista, pero hasta la fecha no ha sido así.

-CC OO inició una campaña en Ford para transformar a temporales en indefinidos ¿abusa la factoría del empleo temporal?

-Lo primero que hay que señalar es el buen ritmo que lleva la factoría. Es una suerte tener a Ford. Pero pensamos que ese buen ritmo tendría que repercutir también en quienes lo hacen posible, que son los trabajadores. Es lo razonable. Es la factoría más productiva de Europa, está dando un gran rendimiento, y ahora se trata de redistribuirlo. Si han entrado 2.000 y pico personas, entiendo yo que hay margen para hacer a alguien fijo. Creo que es una muy buena iniciativa de nuestra sección sindical. A lo mejor hay quien pasa por ser más simpático, pero nosotros creemos que es lo que toca defender ahora.

-Ustedes son mayoritarios en Vossloh, futura Stadler ¿temen por sus 900 empleados con el cambio de dueño?

-Miedo no hay porque es una factoría altamente consolidada y tiene un producto altamente valioso. Ello no quita que los cambios siempre generen una incertidumbre razonable y natural. Quien crea que tras un cambio tan importante todo va a continuar igual, pues probablemente se equivoca.

-¿En qué situación se encuentra CC OO-PV?

-Nos gustaría estar mejor, no cabe duda. Tenemos cerca de 100.000 afiliados y afiliadas. No son todos los que queremos. Ahí nos hemos debilitado. Hemos perdido afiliación y, por lo tanto, recursos. Además estamos experimentando una transformación radical, de una organización configurada para la acción sindical con una prestación de servicio con carácter finalista público. Esta situación nos ha provocado desajustes serios que nos han llevado a escenarios que no le deseo a nadie. Un ERE en un sindicato es todavía más doloroso… Esto lo estamos superando. Hemos recorrido un camino repleto de decisiones desagradables. Pero todo este proceso esperamos dejarlo bien encarado. Lo bueno es que ahora el coste estructural del sindicato se cubre en más de un 80% con recursos propios, de afiliadas y afiliados. Dejaremos la organización más pequeña, pero también más saneada. Estamos moderadamente satisfechos.