EL CONSELL incrementa las exigencias de seguridad

Más controles en los accesos y la afluencia: estas son las novedades para los festivales de música

8/09/2018 - 

VALÈNCIA. Festivales a tu izquierda, festivales a tu derecha. Festivales hasta donde alcanza la vista. Festivales por doquier. Durante los últimos años, la Comunitat Valenciana ha sido testigo de la proliferación de grandes fechas musicales en su territorio y también del crecimiento exponencial que han experimentado la mayoría de ellos. Edición tras edición, citas como el FIB, el Arenal Sound o el Medusa se han convertido en encuentros indiscutiblemente masivos que reúnen cada verano a miles de personas. ¿A cuántas?  Es difícil saberlo con exactitud, pues muchos macroeventos acostumbran a publicitar cifras confusas y poco exactas respecto a la cantidad de público recibido. En cualquier caso, se trata de mucha gente concentrada en un espacio limitado, con los consiguientes riesgos que esas aglomeraciones pueden suponer. Teniendo en cuenta ese telón de fondo, el Pleno del Consell acordó este viernes, 7 de septiembre, el desarrollo de distintas medidas que suponen un incremento en las exigencias en materia de seguridad para estos acontecimientos celebrados al aire libre. En concreto, la Generalitat apuesta por la incorporación de un servicio específico de admisión y un mayor control del aforo tanto para aumentar la vigilancia en los recintos como para tener constancia “en todo momento” del número de personas que se encuentran en su interior. Según indica la Generalitat en un comunicado, estos protocolos permitirán, además, supervisar el flujo de entradas y salidas a los recintos, medida con la que se podrán prevenir mejor posibles incidentes. 

Estos cambios en la regulación se hacen efectivos a través de la aprobación del decreto por el que se modifican los artículos 133 y 185 del Decreto 143/2015, el mismos mediante el que se desarrolla la Ley 14/2010, de 3 de septiembre, de Espectáculos Públicos, Actividades Recreativas y Establecimientos Públicos. Según indican en la Conselleria de Cultura, desde donde no han desvelado más detalles al respecto, el contenido completo de estas modificaciones se publicará a lo largo de la próxima semana en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana. 

De esta forma, se establecen dos mecanismos de actuación diferentes relacionados tanto con la afluencia a cada festival como con el seguimiento de sus puntos de acceso. Por lo que respecta al artículo 133, a partir de ahora, los eventos y “actividades extraordinarias” celebradas en enclaves al aire libre en los que se supere el aforo de 500 personas deberán incorporar, según informan desde la Generalitat, un servicio específico de admisión. Este procedimiento tendrá que incluir obligatoriamente un sistema de puertas y áreas de acceso concretas “que faciliten y organicen la entrada a los recintos”. En este sentido, cabe destacar que el DOGV de este 7 de septiembre recoge la convocatoria de una prueba evaluadora para acreditar a nuevo personal destinado precisamente a la realización de tareas específicas de admisión en espectáculos públicos y actividades recreativas cuyo aforo supere las 500 personas. En cualquier caso, como indican a Cultur Plaza desde la Agencia de Emergencias, este tipo de legislación no se aplicaría a espacios como las plazas de la ciudad, sino a lugares que ya cuentan con puntos delimitados de ingreso, por ejemplo, los Jardines de Viveros. Por su parte, el control del aforo máximo en los recintos donde se celebren estos eventos constituye el asunto central del Artículo 185. De esta manera, como apuntan en el Consell, cuando la aglomeración prevista supere las 2.000 personas, los controles empezarán a realizarse de manera obligatoria “a través de sistemas de conteo y control de afluencia”.

 

Desde el  Asociación de Promotores Musicales de la Comunidad Valenciana (MusicaProCV)  afirman ver "con buenos ojos" cualquier mejora en el control a los accesos. Una buena gestión de la seguridad siempre repercute positivamente en toda la cadena de producción de un evento de este tipo, desde los organizadores al público. Cuanto más seguros estemos, mejor”, apuntan. Respecto a las novedades legislativas que afectan al conteo, la entidad se muestra cauta “hasta que se conozca en profundidad” qué tipo de sistema se quiere impulsar. En esta línea, recuerdan que ellos ya cuentan con sistemas electrónicos que realizan estas funciones. De hecho, desde septiembre de 2016 los festivales de música y espectáculos similares cuyo aforo exceda las 2.000 personas están obligados a realizar un recuento telemático de la audiencia recibida “que computen con exactitud el número de personas que acceden y se hallan” en dicho espacio, según rezaba el Artículo 285 correspondiente al decreto autonómico 43/2015. Hasta ese momento muchos eventos optaban por el conteo manual, es decir por un miembro de la plantilla que fuera sumando asistentes en un dispositivo. 

A la espera de conocer más detalles sobre la normativa, desde la institución esperan que los cambios producidos rebajen los requisitos técnicos exigidos actualmente en el conteo y puedan reintroducir el proceso mediante PDA, tal y como el que algunos eventos utilizaban hace años. “Es posible que haya promotores que hinchen las cifras, pero eso es una cuestión de responsabilidad de la empresa organizadora. Nosotros entendemos que la mayoría dan cifras reales”, defienden desde la asociación, que espera que con un mayor control de los accesos se logre “redimensionar en su justa medida” el volumen de afluencia de esos grandes eventos”. Por su parte, desde la Agencia Valenciana de Turismo -responsable de la marca MediterranewFest bajo la que se engloban muchos de los grandes festivales autonómicos- se muestran optimistas ante la decisión del Consell y señalan que "todo lo que sea garantizar la seguridad de los participantes es algo positivo". 

 

La asistencia real a los festivales, esa gran incógnita

Esta nueva disposición del Consell se suma a la reformulación el pasado junio de la Ley de Espectáculos mediante la que se obligaba a que los grandes festivales facilitaran sus datos de afluencia a la Generalitat. Un dato no menor teniendo en cuenta que estas cifras son un factor clave para los macroeventos a la hora de recibir subvenciones. De hecho, la Diputación de Castellón reparte cada año 440.000 euros entre los festivales que se celebran en la provincia. Sin embargo, estas cifras aparecen a menudo pervertidas mediante operaciones tan sencillas como multiplicar los asistentes de cada día como si se tratara siempre de usuarios nuevos. En este mismo año el Arenal Sound aseguraba haber recibido a 300.000 asistentes; el Rototom Sunsplash se atribuía 208.000 y la cantidad mostrada por el FIB era de unos 150.000. De hecho, dos de las principales compañías promotoras de la Comunitat reconocieron hace meses a este diario que "no conviene mostrar unas cifras distintas a las fórmulas o tramos que muestran otros festivales del Estado". 

En esa línea, la AVT defiende que desde este año han introducido un requisito en la concesión de sus ayudas que obliga a los festivales a presentar "datos de impacto real, tanto de asistentes como de impacto económico e internacional". "El año que viene reforzaremos esta área ya que queremos que los organizadores nos presenten esos estudios con cifras reales", resaltan, además de admitir que en ocasiones se han presentado números tergiversados. "Entendemos que se tiene que mejorar esa forma de contabilizar para que la información que nos llegue sea real, deben poner medidas que les permitan mostrar más exactitud respecto al impacto que tienen", resaltan. 

Centrándonos en los temas de seguridad, las modificaciones en la regulación podrán operar como una forma de prevenir situaciones de riesgo que ya se han producido en los últimos años en distintos festivales del territorio valenciano. Por ejemplo, durante este último verano se registraron colapsos en los accesos para recoger las pulseras de los festivales MarenostrumXperience y Valencia Music Experience, donde la gran aglomeración no controlada por los organizadores acabó provocando la intervención de la policía tras varias llamadas de emergencia al 112  por parte de los asistentes. También se produjo un intento de entrada masiva al Arenal por un lugar no autorizado, según recogió Europa Press el pasado 21 de agosto. Preguntados al respecto, desde la AVT concluyen que "cuanto más regulado esté el funcionamiento de los festivales y más garantías existan de que todo va a transcurrir con normalidad, mejor imagen tendrán estos eventos". Finalizada ya la temporada de las grandes citas veraniegas con la música, habrá que esperar al año que viene para comprobar cómo se adaptan estas disposiciones al día a día en los macroeventos de la Comunitat.