MADRID. En 1998, el yacimiento del Tossal de Manises, más conocido como Lucentum, se abrió al público. ¿Pero cómo se ha llegó hasta esa apertura? ¿Cómo pasó de ser un solar al yacimiento que hoy respira al aire libre? Esa historia es la que centra la nueva exposición itinerante que inaugurará el Museo Arqueológico de Alicante (MARQ) el viernes 20 de diciembre hasta mayo, bajo el título Ciudades de Luz. Ákra Leuké, Lucentum, Laqant. La muestra se ha presentado este jueves 5 de diciembre en el Museo Arqueológico Nacional (MAN), en una rueda de prensa a la que han asistido Toni Pérez, presidente de la Diputación de Alicante; Isabel Izquierdo, directora del MAN; Manuel Olcina, director MARQ y uno de los cuatro comisarios de la exposición, y Rafael Pérez, director del área de Arquitectura de la Diputación de Alicante y comisario.
El trabajo está comisariado, además de por Olcina y Pérez, por Eva Tendero y Antonio Gilabert, y el diseño corre a cargo de quien ya ha trabajado en otras exposiciones del MARQ, Ángel Rocamora y su equipo. Son más de 1.200 metros cuadrados de exposición y se ha invertido un presupuesto de más de 600.000 euros en la ejecución de la producción. Entre las 661 piezas que la componen hay vasos cerámicos, monedas, inscripciones, joyas, armas o restos carbonizados de 27 museos distintos, con tres archivos con documentos hasta ahora no expuestos, ha dado a conocer Olcina, quien ha apuntado que la mayoría de objetos provienen del Tossal de les Manises. Y son 47 los autores que han colaborado en el catálogo, el cual actualiza la historia de Alicante, "que no se renovaba desde 1990".
El director del MARQ también ha recordado que fue en 1932 cuando la Diputación de Alicante dio amparo y protección al yacimiento, que empezó siendo "un solar abandonado y sin nombre" y cuyas excavaciones dieron como resultado la apertura de "un panorama fascinante". Además, ha explicado que Lucentum significa en latín brillante o luminosa y que esta palabra se relacionaba con Ákra Leuké, que quiere decir cabo brillante. "Y existe: el Cabo de las Huertas", ha enlazado. Y ha defendido el papel de "difundir conocimiento riguroso y ciencia" que debe desempeñar un museo.
Una característica con la que se ha mostrado de acuerdo el presidente de la Diputación, calificando esta voz pedagógica como "fundamental". "Esta exposición es el canto coral de la investigación para que ahora todos conozcamos mejor nuestra historia". Y ha ensalzado el papel de la Diputación de Alicante al impulsar este yacimiento y cuya exposición "va a acercar a esas ciudades de luz que fueron Ákra Leuké, Lucentum, Laqant y a nuestra historia". Lo hará en un recorrido de dos milenios por el Tossal de Manises, que ha sido "objeto de deseo para cuidar, respetar y explorar".
La exposición no solo va a mostrar los resultados de la investigación en el Tossal de Manises, también se va a expresar mediante imágenes y materiales "el proceso largo pero vertiginoso de cómo ha llegado ese territorio a nosotros y los restos constructivos que subyacen en ese solar", ha enunciado el director del área de Arquitectura. Son cuatro los hitos que marcan la "euforia" y "recuperación" de este enclave arqueológico.
El primero lo marca, en 1933, el anteproyecto ganador del arquitecto Pedro Muguruza, un concurso impulsado por el Ministerio de Obras Públicas. Le sigue, en 1949, el encargo el proyecto de urbanización de la Playa de San Juan por parte del Ayuntamiento de Alicante al mismo arquitecto. En 1973 el Estado adquiere los terrenos (cinco hectáreas), en una superficie menor de la que se había declarado en 1961 como Monumento Histórico Artístico (20 hectáreas). Y, por último, en 1998 el yacimiento se abre al público hasta la actualidad tras varios años de obras.
"El MARQ y el MAN trabajan juntos y colaboran en proyectos", ha asegurado la directora del Museo Arqueológico Nacional. En la exposición que se inaugurará en Alicante en quince días, el MAN ha cedido algunas piezas, la más destacable un conjunto monedas de plata, bronce y cobre hispano-cartaginesas, romanas e íberas, "quizás las mas bellas de toda la historia monetaria del mundo antiguo", ha señalado Izquierdo. Y no ha querido dejar pasar la oportunidad para reivindicar la importancia de las exposiciones temporales en los museos, "porque activan toda una programación alrededor de ellas".
La Sala I se centrará en la primera ciudad documentada en el Tossal de Manises, de época cartaginesa, correspondiente a la Ákra Leuké. Se repasarán los antecedentes históricos de La Albufereta enmarcados en la Contestania ibérica, con especial énfasis en los yacimientos ibéricos dispuestos en los alrededores inmediatos del Tossal de Manises. La segunda sala se abordará la Lucentum romana, el municipio de derecho latino citado por Plinio el Viejo que, tras un largo periplo historiográfico, ha vuelto a situarse en el Tossal de Manises. Aquí se abordará la faceta más pública de esta cultura, especialmente su sociedad, su religión y el poder.
Al comienzo de la tercera sala se podrán observar las facetas más cotidianas de la ciudad romana. Esta sala estará presidida por el cementerio islámico excavado en el Tossal de Manises y coetáneo a la Laqant. Para llegar hasta el ábside, el visitante transitará por el abandono de la ciudad romana de Lucentum, por las villas bajoimperiales de La Albufereta, la ocupación del barrio de Benalúa, del Benacantil y de Fontcalent y la cristianización del entorno del Tossal de Manises, con el gran cementerio del Tossal de les Basses.
El pasillo de salida se dedica en exclusividad a la conformación del paisaje de la Huerta de Alicante, que perduró hasta el arranque del siglo XX. Y la biblioteca se destinará a ilustrar el proceso de recuperación, restauración y puesta en valor de un yacimiento devuelto a la ciudadanía, permanentemente protegido, mantenido y con su información actualizada, labor que desde hace décadas recae en la Diputación de Alicante a través del Área de Arquitectura, el MARQ y la Fundación C.V. MARQ.