Edu Galán y Darío Adanti tensan al máximo los límites del humor y lo políticamente correcto con 'La Biblia Negra de Mongolia', no apta para mentes sensibles ni ofendiditos vocacionales
VALÈNCIA.- Edu Galán y Dario Adanti se mueven como pez en el agua entre la sátira y el humor —no confundir— mientras les caen capones de la derecha más cavernícola por no respetar ni lo más sagrado y de la izquierda más plúmbea por no tragar con su discurso pacato disfrazado de moralidad trendy. Con La Biblia Negra de Mongolia (100% atea), editada por Reservoir Books, han querido explorar los límites del humor y lo han hecho: los han desbordado por todos lados.
Por su parte, se ha hecho de rogar, pero por fin Alicia Alegre, la hija del jefe, empieza su sección de cultura paranormal. En esta ocasión nos trae la última maravilla de Shigeru Mizuki: Dentro de los yokais (Astiberri). Además, adelanta las últimas novedades sobre The Walking Dead, que anuncia nuevo spin off.
Puedes suscribirte para recibir cada nuevo episodio a través de WhatsApp enviando un mensaje con las palabras MÁS ALLÁ al 605 66 36 70. Si estás en un smartphone, puedes hacerlo pinchando aquí. Recuerda que debes guardar el número en la agenda de tu móvil.
Asumimos el compromiso de:
- No llamarte ni ceder tu número a terceros.
- No enviarte nunca nada distinto al podcast al que te has suscrito.
- Darte de baja inmediatamente cuando lo solicites mediante un mensaje con la palabra ‘BAJA’.
Escucha todos los episodios ’Más Allá (pero no tanto)’ en Plaza Radio o suscríbete en sus canales en Apple Podcasts o iVoox
Twitter:
Reparto:
Javier Cavanilles. Presentador
Alicia Alegre. Herself
Marina Gironés. Keli
Pepi Alapont. Voz en off
Música:
Mercedes Benz (Janis Joplin)
Spider-man (Ramones)
Esto se acaba. La Iglesia católica se apaga como un cirio en una parroquia de barrio. La fe parece ser cosa de nuestros abuelos. Ir a misa es de sujetos extravagantes. La mayoría de los jóvenes pasan de la religión. Bastante tienen con el opio de sus pantallitas
Más de un cuarto de siglo ha pasado desde que Oliver Stone firmó JFK, uno de los mejores thrillers políticos de la historia. Ahora, el director celebra la efeméride con un documental vibrante sobre el asesinato de Kennedy en el que insiste —con escaso éxito— en la teoría de la conspiración.