Carles Puigdemont a poco que se esfuerce ya no va a tener quien le escriba, ni siquiera los propios. Su desahogo vía mensajería encriptada reconociendo el fracaso del procés le ha dejado fuera de juego. Curioso el papel desempeñado en esta película por Toni Comín, el ex conseller de ERC que ha servido de instrumento útil para conocer los últimos e íntimos pensamientos del ex President.
La economista de Pictet observa una escasa reacción de los mercados, sin razón para cambiar una previsión de crecimiento del PIB de España del 2,5% para este año