VALÈNCIA. Este lunes prosiguió el goteo de discrepancias entre el PP y Vox en la ciudad de Valencia. Un nuevo episodio de la constante tensión que se vive entre ambas formaciones pese a que la lógica indica que debería existir la posibilidad de que gobernaran conjuntamente en el consistorio.
La alcaldesa de València, María José Catalá, ha comenzado su mandato en solitario. De hecho, Vox decidió apoyar a su candidato, Juan Manuel Badenas, el pasado mes de junio y que la candidata popular saliera adelante por ser la más votada en los comicios. Una circunstancia que evidenció el malestar de Vox por no haber sido invitado a formar parte del nuevo gobierno.
Tras unas semanas de tregua por parte del partido de Santiago Abascal, Vox regresó en septiembre con un giro de actitud que está poniendo al PP en situaciones difíciles en la capital. Haciendo un breve repaso de lo sucedido en apenas cuatro semanas, queda claro que la consigna en Vox es no pasar ni una a Catalá, lo que convierte el escenario en preocupante para los populares, especialmente cuando empieza a acercarse la fecha para presentar los primeros presupuestos del mandato.