ALICANTE. El momento en el que Sol Picó debía recoger su premio, como mejor dirección coreográfica por su trabajo en la obra Animal de sèquia, ha sido uno de los instantes en los que la política entraba en escena. En una noche en la que los políticos brillaron por su ausencia —incluso el conseller Vicent Marzà tuvo que permanecer en València por sentirse indispuesto—, el punto político recayó precisamente en la artista de Alcoy.
Sol Picó, que no pudo acudir a la gala al haber quedado atrapada en el aeropuerto de El Prat de Barcelona a causa de los disturbios ocasionados en respuesta a la sentencia del Procés, hablaba a través de un audio que era reproducido en los micrófonos y en el que lamentaba el momento "triste" que, en su opinión, está viviendo la democracia.
El edil de Cultura en el Ayuntamiento de Alicante, Antonio Manresa, de Ciudadanos (Cs), abandonó incluso la gala tras los aplausos del público. Una decisión que fue secundada por el concejal del Partido Popular Manuel Villar y las diputadas autonómicas Yaneth Giraldo y Rosa Sánchez, de Cs. Como ya ocurriera el pasado año en los Premios del Audiovisual Valenciano, la gala se celebró con la ausencia del alcalde de Alicante, Luis Barcala, así como del presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón.
Posteriormente, también volvió a ocurrir lo mismo cuando quien debía recoger el premio era Lorenza di Calogero, galardonada como mejor bailarina, que también quedó atrapada en El Prat, aunque en ningún caso mencionó el proceso judicial, sino que únicamente subió un representante suyo para agradecer el premio.