El batería de Depressing Claim, Juan Peris, da el toque local a este proyecto que -gestado entre Madrid y Castellón- nace con la única pretensión de hacer versiones de punk rock mientras dure la cuarentena
CASTELLÓ. Es poco probable que Quarantineers tenga vida más allá de las cuatro paredes en las que están metidos ahora mismo sus miembros. La música les ha tocado a cada uno de ellos de bien cerca en diferentes momentos de su vida, pero todos llevaban un tiempo sin dedicarse a esto profesionalmente. Y no, no es ahora, ni así, el momento en el que van a regresar. La de ahora es una banda, como ellos mismos definen, "remota y confinada", que han creado sin más pretensión que divertirse. "Durante la cuarentena mucha gente ha echado mano de su creatividad para hacer el momento más llevadero: muchos se han puesto a hacer pan, otros a pintar... en nuestro caso hemos querido poner forma a esos momentos en los que tocamos individualmente, para colaborar", explican.
El rock y la estética punk de los 70 es el eje de su inspiración. De hecho, Quarantineers no crea sus propios temas, se nutre de la música de Charlie Rich, Iggy & The Stooges, The Clash o Kim Wilde para hacer sus propias versiones. Eso sí, al 'Kids in America', de esta última cantante, le han cambiado hasta su letra para hablar de la actualidad. Una adaptación que han titulado 'Kids in the quarantine' y que habla del delirio, la furia y la soledad en las que muchas ocasiones veces se ve abocada una sociedad en plena transición.
¿Y cuáles son las almas que hay detrás de este singular proyecto? La batería la lleva Juan Peris, miembro de una de las bandas castellonenses con más proyección a nivel nacional durante los 90, Depressing Claim. Fue en el Red Pier Fest de 2018 cuando, tras 25 años desde su primera aparición, la banda se despidió de los escenarios después de poner en circulación una reedición de Radio Surf, el LP que los dio a conocer. En cuanto a la voz y las letras, estas corren a cargo de Paty Critter, vocalista de Pantones, una agrupación madrileña que ahora mismo se encuentra en stand by. Y junto a ellos, completan el grupo, Nacho en la guitarra y Nahúm García también en las voces, el teclado y la guitarra acústica.
En cuanto a sus intenciones, como decíamos antes, únicamente está grabar versiones y lanzarlas en online. Ni tan siquiera Quarantineers se plantea hacer conciertos en streaming. Sería el primer encuentro que sus componentes tendrían, ya que nunca antes han tocado juntos, y ante la complejidad de tocar cada uno un instrumento por su lado, y en un mismo plano, han preferido dedicarse simplemente a los covers. "Montar Quarantineers nos ha permitido salir de la rutina y centrar nuestras energías en un proyecto divertido que, sin duda, nos ha aportado un poco de paz mental en estos días que tanta falta hace. Es difícil hacerse a la idea de cómo será el mundo al que saldremos cuando esto pase y probablemente tardaremos mucho en volver a disfrutar de la música como lo hacíamos, en salas abarrotadas de gente o festivales multitudinarios, pero la industria musical es un sector que está siendo constantemente obligados a reinventarse y si algo no les falta es creatividad. Los músicos seguirán haciendo música, ya sea sobre un escenario o en un directo de Instagram", aseguran sus integrantes.
Quarantineers se dio a conocer el pasado 24 de abril y ya han lanzado cuatro temas, aunque tienen preparados otros cuatros más. ¿Cuándo los veremos? Ya vendrán. Como dice la banda, la cuarentena ha supuesto "pisar totalmente el freno". No sabemos la fecha de caducidad de la crisis que estamos viviendo, tampoco ellos lo saben de su proyecto. "Aunque no nos dedicamos profesionalmente a la música en estos momentos, tenemos cerca a músicos amigos, salas de conciertos que no lo están pasando nada bien y todos tienen que enfrentarse a un futuro incierto en el que nadie sabe qué va a pasar. Para ellos, como para tanta gente cuyo sustento y modo de vida ha puesto en juego esta situación, lo que pase después de la cuarentena no va a ser nada fácil".