VALÈNCIA (EP). La escultura 'Gigante de sal' de los valencianos Coderch y Malavia se ha trasladado de la plaza Saint Etienne de Toulouse (Francia) a otra zona emblemática de la ciudad por orden de su Ayuntamiento, tras las quejas de los feligreses de la catedral.
Ante la polémica, el dúo artístico agradece al Ayuntamiento de Touluse su invitación de instalar la pieza y recuerda que el "verdadero significado" de la escultura está basado en la resiliencia humana ante grandes desgracias como la pandemia.
"Queremos ser respetuosos con todos y, aunque el mensaje de nuestra obra solo expresa la fortaleza del ser humano, lo positivo es que los vecinos de Toulouse van a poder verla", manifiestan los creadores afincados en València a través de un comunicado.
El 'Gigante de sal', que también está expuesto en la Marina de València y en uno de los hoteles más lujosos de Capri (Italia), ha "pillado por sorpresa" a los artistas, que se encontraban en la ciudad con motivo de la inauguración de su exposición monográfica en la Galería Alain Daudet.
En Valencia, el 'Gigante de Sal' fue el protagonista de celebraciones como el Día de la Danza y de homenajes como el 76 aniversario de la bomba en Hiroshima.
Se trata de una escultura monumental que nació el año pasado de manos de Coderch y Malavia tras inspirarse en la obra del bailarín Fred Herrera. En su espectáculo, con el mismo título, recrea la danza Butoh, un baile japonés de movimientos erráticos que homenajea a las víctimas de las bombas nucleares tras la II Guerra Mundial.
En 2021, el gigante es un símbolo de la fortaleza y fuerza de la humanidad para recuperarse de desgracias colectivas como las pérdidas a causa de la pandemia.
Además de la exposición monográfica de 16 obras de los artistas, Coderch y Malavia culminan el año con su participación en las fechas más señaladas del arte internacional, como la Feria de Arte Pan de Amsterdam o su próxima exhibición el 30 de noviembre para la novena edición del Context Art Miami.