Dansa València explora la periferia a través de tres montajes 

VALÈNCIA. (EFE) El festival Dansa València continúa con la cuarta jornada del certamen en diferentes espacios de la ciudad, en un día protagonizado por tres montajes de artes vivas que huyen de las etiquetas convencionales, con las artistas Santiago Ribelles Zorita, Núria Guiu y Antes Collado.

Esta edición del festival se ha abierto a las artes vivas, un territorio transversal que "huye de las etiquetas" y que quiere generar preguntas alrededor de la creación contemporánea más heterodoxa, ha señalado la organización en un comunicado.

La cuarta jornada del festival, que tendrá lugar este viernes, estará protagonizada por Fucking Stage, de Santiago Ribelles Zorita; Likes, de Núria Guiu; y Crisálida (o la venganza de Leteo), de Antes Collado.

Fucking Stage, que comenzará a las 18.00 horas en la sala Matilde Salvador de La Nau, es una propuesta del coreógrafo y director escénico Santiago Ribelles, que indaga en los convencionalismos del teatro y la danza, y en la relación entre la pieza artística que se representa y el espectador que la contempla.

La manera de interpretar o de leer lo que hay sobre el escenario es la idea general que preside Fucking Stage, que interactúa con los espectadores a través de diferentes mensajes escritos en una pantalla, a la vez que se recurre a lugares comunes en los discursos sobre danza, teatro, arte o política.

Por otra parte, la bailarina barcelonesa Núria Guiu presenta su nueva performance en la sala Carme Teatre a las 20.00 horas, en una reivindicación del cuerpo a cuerpo frente a la intoxicación de Internet. La performance tiene base antropológica y movimientos extraídos de vídeos populares de YouTube, donde el espectador tendrá que sacar sus propias conclusiones.

Asimismo, el último proyecto de la compañía Antes Collado gira en torno a la noción de cuerpo marginal y a la creación de mundos escénicos metafóricos. Crisálida (o la venganza de Leteo), que se representará a las 20.00 horas en La Mutant, busca recuperar la potencia de la naturaleza más perversa y propone la restitución de viejas formas olvidadas que, paradójicamente, son capaces de generar nuevas maneras de vivir.