De romper con la "maldición" de las óperas primas a crearse un nombre propio: los retos de la mujer en el audiovisual

CASTELLÓ. La Universitat Jaume I de Castelló celebrará del 27 al 29 de noviembre el I Congreso Internacional de Creadoras en el Audiovisual. Un congreso también llamado por las profesionales que lo han puesto en pie como 'Una habitación propia: un nombre propio'. Cuando Virginia Woolf hablaba en Una habitación propia de la firma autoral, retrataba lo complicado que era para las mujeres escribir; primero por depender de sus padres y después de sus maridos, no contando nunca con un cuarto propio desde el que crear. Pero es que si lo conseguían, publicaban bajo un nombre masculino, lo que provocó que los estantes de las librerías nunca se llenaran de obras escritas por mujeres. Hoy, la situación es distinta, pero ¿hasta qué punto es mucho mejor?

"Puede decirse que las mujeres han superado esa anonimia o borrado. Las cineastas españolas han roto la maldición de las óperas primas y ya están teniendo su segunda o tercera obra. Además, las showrunners se consolidan entre los catálogos de plataformas de streaming. Algo está ocurriendo y puede que las redes que se están generando sean la clave", señalan Jéssica Izquierdo y Shaila García, ambas doctoras en Ciencias de la Comunicación por la UJI. Traer esas voces a Castelló es pues el objetivo principal de este proyecto. Más aún, porque todavía falta trabajo por hacer. Las mujeres firman únicamente el 24% de las dirección cinematográficas y el 19% de las direcciones para plataformas SVoD, según datos de 2023. 

Un nombre propio

¿Y por qué es tan necesario hablar de un nombre propio? Uno de los compromisos del congreso es rastrear cómo ellas heredan y construyen una identidad propia en la historiografía y encaran su futuro en la industria. Pero para hablar de referentes es también necesario hablar de un nombre propio y Shaila García explica el porqué: 

"Siempre se había entendido el cine de autor como aquel que es capaz de tener una voz a pesar de la industria. Es decir, aquel al que las consignas del género y de la industria no le han borrado ese discurso genuino que quiere plantear. Pero hoy en día es muy difícil que el autor no se mueva por la industria y en la industria también es fundamental tener un nombre. Ahora cuando se hace una serie, esta puede contar con un creador, un showrunner y alguien que dirija los episodios. Y esto funciona por una cuestión de nombre propio. Muchas directoras están dirigiendo episodios de series como, por ejemplo, Pilar Palomero o Belén Funes. Son productos alimenticios que les permite luego hacer películas más personales. Un nombre propio te permite tener voz, pero también hacer películas para a veces poder fracasar. Cómo dice Jéssica, ¿qué pasa si una película dirigida por una mujer es mala? No pasa nada, tienen el derecho a fracasar. Igual que tienen el derecho a dudar. Pueden hacer esto, como pueden también conseguir financiación para películas o series muy personales. O hacerse un nombre propio rodando videoclips. En realidad, todos heredamos un nombre, pero hay que saberlo sostener y construir. Ahí está la responsabilidad de cada una de las directoras también para hacerse un lugar en la industria por muy hostil que esta sea". 

Una habitación propia

En este sentido, el congreso de la UJI no solamente se dedicará a estudiar cómo las mujeres son representadas, sino a analizar sus obras. "Sus voces merecen ser escuchadas una por una. Pero ocurre mucho que en las entrevistas no dejan de atender preguntas sobre el género y la presunta mirada femenina. Responden amablemente, pero ellas quieren hablar también de su trabajo, que es inesperado, heterogéneo y dispar."

Cuentan sus impulsoras que el encuentro surge, de hecho, por la confluencia de diferentes grupos de investigación en la UJI que nunca antes habían trabajado juntos. Por un lado, existe un grupo de mujeres que están trabajando desde el grado de Publicidad cuestiones relacionadas con la mujer y la vejez. En su caso, Jéssica Izquierdo se encarga de coordinar el grupo de investigación OBCOP, dedicado a las mujeres y su relación con las plataformas digitales. Y por su parte, Shaila García dirige un proyecto sobre voces femeninas en el cine español.

"De algún modo tiene algo de movimiento femenino. Es una rareza, porque la universidad tiende más a parcelizar grupos de trabajos, pero nosotras hemos querido cruzar diferentes puntos de vista y metodologías, porque en esas diferencias pueden aparecer cruces muy ricos. Quizás seamos, además, el único congreso que intenta mezclar estudios culturales con análisis fílmico e industria, porque hay congresos centrados en estas cuestiones, pero suelen parcelar mucho en metodologías."

Barbara Zecchi o Jaiore Camborda, primeras confirmadas

Por lo que hace a la programación, todavía está en desarrollo, pero tienen claro sus impulsoras que quieren combinar diferentes formatos. Desde conferencias dedicadas al análisis fílmico; en este caso, avanzan que será la profesora de la Universidad de Valladolid Tecla González quien analice en profundidad el film Creatura (Elena Martín, 2023). Hasta, mesas de diálogo con directoras, centradas o bien en documentales o en el nuevo cine español firmado por mujeres. En este sentido, avanzan a Castellón Plaza que ya han confirmado su asistencia las directoras de cine Jaione Camborda, autora de O Corno y Arima, y Laura García, autora de Domingo, domingo. Además, cerrará el congreso a través de una videoconferencia la prestigiosa ensayista Barbara Zecchi, autora de la teoría de género 'gynocine'.

En paralelo, el congreso ha hecho un llamamiento a la comunidad académica para que envíen sus trabajos sobre directoras y guionistas españolas, showrunners, creadoras de publicidad, de videoclips, de videojuegos o de podcasts. También se abren a investigaciones sobre la representación de la violencia sexual, el movimiento 'me too', la ira y la indignación, o los legados transgeneracionales y la memoria de las mujeres en el audiovisual. 

Con todo, el congreso coincidirá con una nueva edición de las Jornadas de Cine LGTBI+ de la UJI, que organiza el Vicerrectorado de Igualdad y Política Lingüística, y también se generará alguna vinculación con este encuentro. 

"En resumen, queremos generar espacios. Darles un lugar. Son muy pocas las directoras de fotografías que logran tener una oportunidad, o las directoras, guionistas y sonidistas que lo consiguen. Queremos que entre ellas busquen ese lugar y ese nombre".