Aseguran que existen "numerosos errores detectados" en el informe presentado hace apenas unos días
VALENCIA. Los sindicatos han dado una respuesta clara a la auditoría sobre el personal administrativo (el no artístico) del Palau de la Música. El informe presentado de manera parcial, pero al que ya han tenido acceso los representantes sindicales, muestra según los mismos "numerosos errores". Así lo han asegurado durante los últimos días a este diario diversas fuentes de representación de distinto signo sindical, pero la reunión entre estos ha ido un paso más allá.
Este martes, y después de la pasada reunión de la Comisión negociadora, "la totalidad de los sindicatos con representación en el Comité de empresa, y tras estudiar el documento Diagnóstico organizativo del Palau de la Música", han solicitado "a la Dirección la retirada del mismo".
La posición contraria a la creación de este informe se suma a la reacción que ya tuvo el fin de semana el grupo político Esquerra Unida, quien quiso alarmar sobre el contenido del que había tenido conocimiento. Sin embargo, la posición de los sindicatos es de mayor calado porque, tal y como aseguran a este diario "después de haber pasado un año a la espera de conocer cuáles eran las conclusiones del estudio, ahora debemos de esperar un tiempo indefinido para saber cuáles serán sus consecuencias".
Los sindicatos advierten que la auditoría, "al ser externa", no compromete legalmente ninguna decisión por parte de la dirección o presidencia del auditorio. Pero no quieren esperar a que existan dichas conclusiones, se avanzan y piden la retirada. "No teníamos la obligación de participar en el diagnóstico, lo advertimos y aún así lo hicimos de forma voluntaria. La respuesta que nos hemos encontrado es que se habla de externalizar servicios y no se deja claro que no habrá despidos", añaden, además de incidir en "cuantiosos errores en el análisis".
El informe ha tenido un coste para las arcas públicas de 19.100 euros, tal y como aclararon en su presentación la presidenta del Palau y delegada del Área de Cultura, Glòria Tello, el director del Palau, Vicent Ros, el jefe de Recursos Humanos, Ignacio Rosat, y el subdirector de Gestión del centro, José Manuel García. Del mismo se desprenden "puestos carentes de contenido" y la "sobredimensión de departamentos" ya citada, pero también la necesidad de elaborar un nuevo manual de funciones y responsabilidades, ya que el actual está “incompleto, obsoleto, es ambiguo y no se aplica”, una definición de tareas que pasará forzosamente por la reestructuración.
Con respecto a la idea de que "el estudio considera que existen algunos puestos carentes de contenido y que algún departamento es innecesario, por lo tanto propone la amortización de determinados puestos de trabajo tras la jubilación y otros efectúan una relación de puestos trabajos excedentarios por no considerarse necesarios en la actual estructura del Palau de la Música", según explicó el jefe de Recursos Humanos, fuentes sindicales matizan que "si desde hace décadas el Palau hace exposiciones y se decide que se dejan de hacer exposiciones, parece obvio que las personas encargadas de esas tareas no sigan cumpliendo con esa función. Lo que no está claro es que por esa decisión que se toma arbitrariamente, esos trabajadores tengan que ser despedidos".
El ejemplo sirve para que desde las fuentes sindicales se hable de "recolocación" dentro del Palau y para llamar la atención de que el Organismo Autónomo no haya hecho "como ha sucedido en el mismo Ayuntamiento" una auditoría interna, "sin necesidad de generar un gasto para un informe que finalmente tiene numerosos errores". Además de esos errores, siempre según las fuentes consultadas por este diario, habría también problemas con el documento que infringiría la Ley Orgánica de Protección de Datos vigente. Otra fuente sindical precisa que "hay personas que trabajan en el Palau, con responsabilidades importantes, que no pertenecen al cuerpo de trabajadores que ha sido objeto de la auditoría. En ese sentido, cabe preguntarse a quién se trata de auditar o con qué objeto final".
Cabe destacar que los responsables del Palau ya advirtieron en su presentación que las soluciones pasarían por mover fichas dentro del propio ente y no de la salida y entrada de empleados. Tello explicó que el informe refleja "la nefasta gestión que en los últimos años ha habido en el Palau de la Música" y subrayó que "la intención de este equipo es intentar aprovechar al máximo los recursos de los que disponemos". "Probablemente mucha gente cambiará de departamento para poder hacer su labor", apostilló.Con todo y con ello, el director lamentó que, tras leerse cada una de las fichas de los trabajadores "todavía no sé a quién le corresponde hacer ciertas cosas”. Esa percepción se mantiene desde los gestores del Palau, aunque los trabajadores ya han dado respuesta a la auditoría a través del citado comunicado.
Por su parte, fuentes del auditorio han respondido a Europa Press que "no es posible retirar un diagnóstico que ya se ha hecho" y han agregado que lo que hay que hacer es "valorarlo y trabajar conjuntamente para adaptar l Palau al siglo XXI".
Las mismas fuentes han apuntado que "las auditorías, y en este caso el diagnóstico, lo hacen empresas externas como garantía de objetividad".