El casco de bici plegable 'Closca Fuga' se pondrá a la venta en el museo americano
VALENCIA. ¿Qué hace un casco de bici es un sitio como el MoMA? El diseño valenciano ha encontrado su hueco en la boutique del museo de arte moderno americano gracias al ‘Closca Fuga’, un casco plegable que ha llevado la ‘marca España’ a la MoMA Design Store.
Con el primer pedido empaquetado y ya de camino a Nueva York esta es, además, la primera incursión en el competitivo mercado americano de la ‘start up’ Closca Design, junto con el apoyo de la Universitat Politècnica de València y la agencia CuldeSac, desarrolladores del producto. Aunque sí se hacían envíos a través de pedidos online, esta será la primera tienda física que contará con el casco, ganador del Red Dot Award 2015, uno de los premios de diseño más importantes del mundo.
Pero, ¿qué tiene este casco para pasar las fronteras de uno de los museos más importantes del planeta? Pues bien, como se imaginan, no es un protector al uso. Con el auge del uso de la bicicleta en ámbito urbano, la 'start up' Closca quiso dar respuesta al 'después' del trayecto, una vez la bici está aparcada. El planteamiento era simple: si existe la bicicleta plegable, ¿por qué no hacer lo propio con el casco?
Como todo, la idea, aparentemente sencilla, ha sido tremendamente complicada de poner en marcha. La pieza se compone de tres anillos móviles que permiten su plegado, reduciendo considerablemente su volumen, y pesa menos de 300 gramos. El reto de los creadores era aunar tecnología, seguridad y diseño sin que nada de eso comprometiera su estética. "Lo fácil habría sido hacer visible la tecnología, pero la hemos ocultado", explica Pepe García, socio fundador de CuldeSac y director del área de retail y producto.
La empresa fue fundada en 2013 por Carlos Ferrando con el respaldo de la Politènica y de la consultora creativa CuldeSac, encargada del rediseño de la segunda generación de cascos plegables. Que su primera incursión en Estados Unidos sea en la tienda del MoMa le hace plantearse a uno quién es el comprador potencial de 'fuga'. Ellos lo tienen claro. "En la ciudad la gente no hace ciclismo en ruta, son trayectos cortos. Lo que ha conseguido este casco es aunar dos mundos seguridad y estilo", añade García.
Conscientes de que 'fuga' está "trascendiendo el mundo del ciclismo" su red de distribución ya ha dejado de limitarse a tiendas especializadas, logrando ocupar un hueco en el olimpo del arte moderno. Este hito contrasta con unos inicios que, como en muchas pequeñas empresas, estuvieron cargados de baches. "Detrás de este proyecto no hay una multinacional, está una persona que tiene un sueño".
Impulsado por Carlos Ferrando, el nuevo casco ha sido el resultado de casi dos años de trabajo e inversión en I+D+i. Fue gracias a la plataforma de microfinanciación Kickstaster que logró los 45.000 euros necesarios para dar salida a un proyecto que, años después, les ha reportado premios y un impacto global.
Otros de los galardonados en los Red Dot Design Awards fueron prototipos de firmas tan exitosas como Apple, Adidas, Siemens, BMW, Sony, Mercedes, Nokia o Bose. La marca Closca, además, ha aparecido mencionada en algunas de las publicaciones más prestigiosas del momento, como el suplemento del New York Times, la revista de tendencias Wallpaper y la británica The Week