VALÈNCIA (EP). El Guerrer de Moixent regresa a la Diputación de Valencia, la que fue su casa durante más de 30 años antes de instalarse en la Beneficència, para capitanear la exposición que conmemora los 90 años de su hallazgo en la Bastida de les Alcusses, cuando Vicente Espí desenterró la escultura del siglo IV antes de Cristo durante las excavaciones del Servicio de Investigación Prehistórica de la Diputación. La pequeña pieza de bronce fundido, de poco más de siete centímetros de altura, es la protagonista de la muestra 'Arqueología de un icono. El Guerrer de Moixent en el tiempo', organizada por el Museo de Prehistoria y la Oficina Técnica de Restauración del Patrimonio (OFITEC) de la institución provincial.
Podrá visitarse en el Saló de Respecte del Palau dels Scala, en plaza Manises de València, los fines de semana y festivos, de 10 a 14 y de 16 a 19 horas, hasta el 9 de enero y con entrada libre. Coincidiendo con la apertura en el fin de semana del 9 d'Octubre, los horarios serán de 16 a 20 horas el viernes y de 10 a 14 y de 16 a 20 horas el sábado y domingo, según ha detallado la Diputación en un comunicado. La muestra está compuesta por 44 piezas, incluyendo materiales arqueológicos, documentos y objetos contemporáneos particulares, y cuenta con un refuerzo audiovisual para un formato interactivo.
Entre el contenido, destaca la réplica de Pinazo de la Dama d'Elx, en escayola pintada, y el diario de excavación de la Bastida con la carta remitida por el responsable de los trabajos en el momento del hallazgo del Guerrer de Moixent que, armado con falcata en la mano diestra, escudo redondo en la extremidad izquierda y protegido con un casco coronado por un gran plumaje, es el principal reclamo de la exposición.
El comisario de la muestra y director del proyecto arqueológico de La Bastida, Jaime Vives-Ferrándiz, ha explicado que el viaje en el tiempo junto al Guerrer de Moixent contiene cuatro módulos interactivos pensados para alumnos de Primaria, ESO y Bachillerato y público familiar, que ayudan a entender la relevancia del personaje en las élites de una cultura contemporánea de griegos, etruscos, púnicos y romanos, pero con una organización social, ritos, creencias y manifestaciones artísticas propias que se evidencian en los hallazgos de la Bastida de les Alcusses.
El primero de los módulos presenta la Bastida de les Alcusses de Moixent como la nueva Pompeya. Una maqueta de la antigua ciudad ibérica sitúa a los visitantes sobre la superficie del poblado, donde deberán situar el punto exacto en el que se hallaron distintos objetos arqueológicos siguiendo las pistas que ayudan a descubrir la información sobre los habitantes y su forma de vida.
El Servicio de Investigación Prehistórica de la Diputación lleva casi cien años trabajando en las excavaciones del yacimiento, que desde finales de siglo se convirtió en un espacio visitable que se encuentra en proceso de ampliación para mejorar la experiencia histórica y divulgativa.
El segundo módulo explica los elementos empleados para convertir el guerrero a caballo en una representación icónica, y lo hace a través de un puzzle imantado que deben montar los asistentes.
El protagonismo del Guerrer se mantiene en el siguiente módulo interactivo, que propone calcar en un banco retroiluminado las distintas armas utilizadas por los guerreros ibéricos en cada período. El recorrido finaliza con una última interacción que plantea al público reflexionar sobre lo que ha visto y depositar en un buzón su percepción sobre el Guerrer.
Más allá de la belleza y el valor artístico de la escultura, el Guerrer de Moixent nos acerca a la historia de los asentamientos íberos en la provincia, que actualmente podemos visitar en municipios como Moixent, Olocau, Llíria, Caudete de las Fuentes, Moncada, Gátova, Aras de los Olmos, Sagunto, Camporrobles y Villar del Arzobispo.
La ruta de los íberos es fruto del trabajo de recuperación y conservación que realiza la Diputación, a través del área de Cultura y el Museo de Prehistoria, en colaboración con los ayuntamientos de estos municipios en la organización de rutas senderistas, visitas guiadas y talleres didácticos, entre otras actividades que incluyen la gastronomía.
La exposición aborda todos los detalles que rodean la figura del Guerrer, que pudo formar parte de la coronación de un símbolo personal o familiar o quizás fue esculpido para transmitir los valores del uso de las armas en la intimidad de la casa, en este caso de la Bastida de les Alcusses, uno de los yacimientos de la red íbera que custodia y conserva la Diputació de València.
La Bastida de les Alcusses fue un importante asentamiento fortificado del siglo IV a.C. que controlaba las comunicaciones y los recursos económicos en la actual comarca de La Costera.
Las excavaciones de los técnicos del Servicio de Investigación Prehistórica han proporcionado datos para entender cómo era la sociedad que habitaba esta zona, con la jerarquía de sus moradores, el cultivo de la tierra y el comercio con recursos agrarios, metales y tejidos, innovaciones tecnológicas como la plantación de árboles frutales y el desarrollo del trabajo del hierro, la elevada consideración de las mujeres como transmisoras del poder familiar y el uso de las armas, reservado a una minoría cualificada de la que forma parte el Guerrer.
El presidente de la corporación, Toni Gaspar, ha dado la bienvenida al Guerrer durante la presentación de la muestra y ha destacado que "la trascendencia del hallazgo de este guerrero a caballo, pequeño en tamaño pero enorme en valor histórico y simbolismo, se demuestra con el uso que de la imagen han hecho y siguen haciendo instituciones públicas y privadas de cualquier ámbito".
Por su parte, la directora del Museo de Prehistoria, Mª Jesús de Pedro, ha señalado que es "la primera vez que se trata de manera monográfica el importante hallazgo del Guerrer de Moixent y su influencia en la sociedad valenciana incluyendo diferentes puntos de vista, desde el contexto arqueológico hasta los usos contemporáneos que nos permiten explorar las relaciones entre la arqueología y la sociedad".
El presidente y la directora del Museo de Prehistoria han avanzado al alcalde de Moixent, Guillermo Jorques, que la cuna del Guerrer será el primer municipio que acogerá la exposición tras su puesta en escena en la Diputación.