VALÈNCIA (VP/EP). El Instituto Cervantes y la Fundación Caja del Mediterráneo realizarán actividades conjuntas para promocionar y difundir la cultura en todas sus expresiones, según contempla el acuerdo de colaboración suscrito entre el director del Cervantes, Luis García Montero, y el presidente de la Fundación, Luis Boyer Cantó. La firma del Protocolo General de Actuación tuvo lugar el martes en la Casa Museo de Azorín, en la localidad de Monòver (Alicante) en el marco de la Reunión Anual de Directores del Instituto Cervantes que comenzó el lunes en Orihuela.
Para el director del Instituto Cervantes fue "toda una emoción" estar en la casa natal del prolífico escritor de la Generación del 98 y articulista (1873-1967), cuya obra ha enseñado y leído García Montero a sus alumnos de literatura "en innumerables ocasiones". García Montero ha agradecido a la Fundación su disposición a colaborar en iniciativas que permitan cumplir su mandato de "divulgar la cultura en español", y dar a conocer la obra literaria de grandes autores, entre ellos Azorín, Miguel Hernández y Gabriel Miró, los tres de la Comunitat valenciana, y de otros muchos de toda España.
Por su parte, el presidente la Fundación Caja del Mediterráneo ofreció al Cervantes la posibilidad de exponer y difundir los ricos fondos bibliográficos que posee, algunos de ellos digitalizados, y todos conservados. "Queremos que los conozca todo el público", manifestó Luis Boyer, "con nosotros pueden contar para lo que quieran".
El alcalde de Monòver, Ignacio Hidalgo, a quien García Montero definió como "amigo y poeta", deseó públicamente al nuevo director del Instituto "mucha fortuna" y que "el arranque de esta nueva etapa del Cervantes ligada a Alicante y Orihuela sea sinónimo de éxito".
Tras la firma del acuerdo, que tendrá una vigencia de cuatro años prorrogables, los más de 70 directivos del Cervantes reunidos realizaron una visita guiada a la que fue residencia de Azorín y su familia. José Martínez Ruiz -ese era su nombre real- vivió en esa casa desde la edad de tres años hasta que se trasladó a Madrid (si bien estudió el bachillerato en un internado en Yecla).
La Casa Museo atesora la memoria del autor de Las confesiones de un pequeño filósofo en todo tipo de objetos: mobiliario de aquella época, libros, fotografías, cartas, ajuar doméstico, vestimenta, efectos personales. En definitiva, toda una herencia que el escritor quiso que perdurase y que, 76 años después de su muerte, se ha mantenido unida. Destacan la biblioteca familiar, con 4.000 volúmenes, y la biblioteca del autor, con otros 10.000 libros.
Este pequeño homenaje a Azorín se suma al recuerdo del también escritor alicantino Miguel Hernández, en cuya localidad natal, Orihuela, se han desarrollado las sesiones del lunes y de ayer martes (en el Colegio Santo Domingo) gracias al patrocinio del Ayuntamiento oriolano y de la Diputación Provincial.
La cumbre cervantina se ha trasladado a la ciudad de Alicante, que acoge los trabajos en la sede de Casa Mediterráneo (también patrocinadora de la Reunión Anual), donde se celebra la segunda parte del cónclave directivo del Cervantes.
