El TEM se convierte en "un País de Nunca Jamás cabanyaler"

VALÈNCIA (EP). La compañía La Mecànica pondrá en escena, el próximo 7 de noviembre en el Teatre El Musical de València (TEM), el espectáculo Las pequeñas cosas, una propuesta para toda la familia que convertirá la sala en "una especie de País de Nunca Jamás cabanyaler". El montaje, que se estrena en la Comunitat Valenciana, une diversión, reflexión e inclusión, ya que los más pequeños participan del proceso de creación.

Por qué llega un momento en el que, sin razón aparente más allá del paso del tiempo, los adultos dejamos de jugar o por qué nos empeñamos en ver las cosas a través de la experiencia (o supuesta experiencia) y no desde la inocencia infantil son algunas de las preguntas que plante la pieza. La compañía mallorquina La Mecànica concibe un espectáculo "desde una perspectiva a la altura de las rodillas, el punto de vista de los niños era un desafío que requería dar rienda suelta al Peter Pan que todos llevamos dentro".

Así surgió Las pequeñas cosas, estrenada a principios de 2021 en el Teatre Principal de Palma. A partir de la dramaturgia y la dirección de Pau Bachero, cuatro intérpretes adultos se suben al escenario para, a través de los objetos-títeres, la danza, el teatro físico y la música, desmitificar la absurda lucha de los adultos por ser buenos modelos para sus pequeños y confrontar esta "pose" con la maravillosa ingenuidad de la infancia.

En su periplo, contarán con la complicidad de los jóvenes espectadores, a quienes se les ofrece la oportunidad de formar parte del espectáculo, ensayando con la compañía, aportando ideas y apareciendo de manera inesperada durante la función. En el caso del TEM, los niños y niñas del barrio podrán participar gracias a la colaboración con la asociación Brufol y el colegio Santiago Apóstol.

"Vendaval de creatividad infantil"

Este "vendaval de creatividad infantil" en escena da pie a un montaje divertido, descarado y enérgico, capaz de ofrecer un diálogo entre generaciones y de extraer distintas lecturas de su planteamiento. "La participación de los más pequeños es uno de los puntos más mimados del proyecto, es aquello que le da sentido. Esta experiencia vivencial entre compañía, teatro y comunidad nos aporta una fuente inagotable de inspiración y desarrollo colectivo", señalan sus responsables, para quienes la realización de un espectáculo plenamente inclusivo fue siempre un objetivo innegociable. "Queremos que sea una experiencia accesible a toda la infancia, sin discriminación por clase, sexo, raza, religión o diversidad funcional, ya sea intelectual, motora o sensorial", concluyen.