ANTES DE SU SUBASTA

Investigan desaparición de benlliures y pinazos del Círculo de Bellas Artes

16/10/2020 - 

VALÈNCIA (EFE). La Policía de la Generalitat investiga la supuesta desaparición de alrededor de un centenar de obras de arte de la colección del Círculo de Bellas Artes de València, entre ellas varias piezas de Ignacio Pinazo, José Benlliure, Santiago Rusiñol o Esteve Edo.

Según han informado a EFE fuentes de la Conselleria de Justicia, Interior y Administración Pública, están siendo los agentes especializados en patrimonio los responsables de esta investigación, en coordinación con la Conselleria de Cultura.

El diario Las Provincias publicó que ha sido en el trámite previo a la subasta de sus fondos cuando se ha conocido la ausencia de aproximadamente la mitad de los 200 cuadros que conformaban la colección del Círculo de Bellas Artes.

Los problemas económicos han empujado a esta entidad a un proceso de disolución, que actualmente se tramita en los jugados.

Parte de la deuda de esta entidad es con la Generalitat, que recientemente ha pedido el reintegro de una subvención concedida para la rehabilitación de la sede que ocupó el Círculo de Bellas Artes, según han informado a EFE fuentes de la Conselleria de Cultura.

La Generalitat y la asociación Círculo de Bellas Artes de Valencia firmaron el en octubre de 2001 un convenio de colaboración que tenía como objeto financiar la rehabilitación y la equipación de un edificio adquirido por esta en la ciudad de València para ser usado como centro cultural.

Con este objeto se le concedió inicialmente una subvención de 751.265,13 euros, pero el convenio fue modificado posteriormente, en abril de 2003 y en febrero de 2006 a fin de incrementar la aportación de la Generalitat para financiar las obras, con lo que la subvención quedó finalmente establecida en 1.580.000 euros.

Las mismas fuentes han informado de que el Círculo de Bellas Artes vendió el edificio que había sido rehabilitado con fondos públicos, incumpliendo así el convenio con la Administración, y por este motivo en enero de 2019 la Generalitat solicitó el reintegro de la subvención.

La deuda que acumula con la Generalitat por el incumplimiento del convenio plurianual, contando los intereses, es de 1,8 millones de euros.

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