VALÈNCIA. ¿Puede un accidente cambiar la vida de las personas? O ¿podemos usar un accidente para cambiar nuestra vida? El ciclista utópico despertaba estas preguntas en el director argentino Yayo Cáceres, quien ha llevado a escena este texto de Alberto de Casso.
Así, tras recorrer otras ciudades de España, el 19 de octubre llega a Valencia para quedarse hasta el domingo 22. Considerada como comedia negra, está protagonizada por los actores Fran Perea y Fernando Soto, y producida por el Teatro Calderón, Emilia Yagüe Producciones y Feelgood Teatro.
La historia versa entorno a la vida de Manuel (Fran Perea), un maestro rural que vive feliz y apaciblemente con su mujer y sus tres hijas menores de edad. Y Acebal (Fernando Soto), un hombre rústico, cerril, reaccionario, exaltado y aparentemente ingenuo que diseña en su ilusoria cabeza una serie de máquinas utópicas que faciliten las relaciones humanas. El destino los une un día en que, cegado por el sol, Manuel atropella en un cruce al ciclista Acebal y destroza su bicicleta. El ciclista se muestra muy apenado por este hecho y despierta la compasión de Manuel. A partir de aquí surge una problemática relación de amistad entre ambos, debido a que Acebal se infiltrará cada vez má́s en la vida familiar y laboral de Manuel hasta convertir su existencia en un tormento y al final hará que su presencia resulte tan sofocante como necesaria, y todo llegue a un punto de no retorno.
El ciclista utópico habla de los límites que muchas veces las amistades atraviesan en nuestro espacio privado. “Es bueno a veces decir que no. Porque sino hasta dónde permitimos que otras personas entren en nuestras vidas”, explica Fran Perea.
El actor ha resaltado además cómo los espectadores se van identificando con un personaje u otro a lo largo de la función. Y explica también que el carácter “thiller” de la obra hace que la gente se ria pero “mientras que a la vez están sufriendo”.
La escenografía, a cargo de Carolina González, considerada como “conceptual” está formada por un suelo pintado a mano y una pieza a la que se le va dando diferentes usos a lo largo de la representación.
Durante la rueda de prensa en el Teatro Talia, Fran Perea ha querido también agradecer la labor de los teatros privados que “hacen un esfuerzo enorme por llevar programación a su ciudad” en unos años en los que “se ha puesto muy difícil ir a taquilla.”