Las mujeres cineastas se reivindican con un ciclo itinerante

VALENCIA. Bajo el lema ‘Cuatro directoras valencianas que tienen mucho que mostrar’, la Junta Municipal de Ruzafa ha puesto en marcha una iniciativa con la que pretende dar visibilidad al trabajo de cuatro directoras valencianas o afincadas en Valencia, un ciclo itinerante que entre octubre y noviembre pasará por cuatro sedes. Ana Victoria Pérez ‘Bebé’, Susi Gozalvo, María Trénor y Claudia Pinto son las protagonistas de un proyecto que, además de las proyecciones, contará con debates y charlas en torno a las mismas. "El cine es una herramienta magnífica que posibilita la creación de discursos alternativos en relación a los estereotipos de género actuales, a las formas de relación amorosa o a los comportamientos socialmente aceptables", explica la concejala de Igualdad y presidenta de la Junta Municipal de Ruzafa, Isabel Lozano, que con este ciclo busca "dinamizar los barrios y los pueblos del distrito de Russafa y abrir  a la ciudadanía la reflexión sobre las mujeres y su representación en el séptimo arte".

Será el próximo 4 de noviembre, en la sede de alcaldía de Horno de Alcedo (C/ Guadalaviar, 15), cuando tenga lugar el encuentro con la obra de Ana Victoria Pérez ‘Bebé’, una cineasta cubana radicada en Valencia desde 2005. Formada como actriz en La Habana donde protagonizó series de televisión desde los 16 años, formó parte de la compañía de teatro El Público dirigida por Carlos Díaz. En Valencia consolida su trayectoria como directora, generando cinco cortometrajes de ficción, un largometraje documental y dos proyectos transmedia. Algunos de sus trabajos más destacados son Ánima, cortometraje protagonizado por Ana de Armas, y Néixer, su primer largometraje, un documental sobre el parto.

La valenciana Susi Gozalvo ha convertido los barrios de Ruzafa y el Cabanyal en platós para sus proyectos, proyectos que se presentarán el próximo 11 de noviembre a las 19 horas en la sede de alcaldía de El Palmar (C/Caudete, 15). En el primero ha rodado su último cortometraje Yogur y chocolate, la segunda entrega de la trilogía Miradas de barrio y en el que aporta una visión poética y nostálgica de la vida, cinta por la que recibió el premio al mejor guión en el concurso para cortos 'Quartmetratges'. El proyecto se inició con la cinta Pedazos de mi, sobre El Cabanyal, un trabajo con el que pretende "fotografiar la situación actual de los diferentes barrios de Valencia".

Gozalvo se inspiró en directores orientales como Wong Kar-wai o Kim Ki-duk para el rodaje de esta propuesta, cuya idea surge tras una noticia sobre la crisis mundial publicada en un periódico japonés. El cortometraje trata sobre un hombre que se separa de su mujer y lleva una vida tranquila en su apartamento de Ruzafa. Sabe cada jornada lo que tiene que hacer porque hace diariamente lo mismo dependiendo del día de la semana, un rutina que cada viernes lo lleva al supermercado hasta que un día olvida los yogures.

Actualmente inmersa en un proyecto de cortometraje de animación, cuyo tema central es la violencia de género, fue con ¿Con qué la lavaré? que María Trénor aterrizó en el Festival de Berlín. El alma de la cinta es una pieza musical interpretada por Jordi Savall que procede del Cancionero del Duque de Calabria, pieza que en el siglo XVl sólo podían cantar niños castrados, estando prohibido que fuera interpretada por mujeres. La directora y su hermana Clara fotografiaron algunas zonas del barrio y con base en estas imágenes dibujaron las escenas exteriores. Dedicaron siete meses a pintar un recuadro tras otro para, después, someter estas imágenes a un proceso de animación digital. De esta forma, Trénor pretende unir dos épocas: la del Renacimiento y la de la España de los años inmediatamente posteriores al franquismo, cuya estética está muy presente en ¿Con qué la lavaré?, que presentará el 18 de noviembre a las 19 horas en la Casa de la Demanà de El Saler (C/ Embarcadero, 28).

El ciclo se inició el pasado viernes de la mano de Claudia Pinto, venezolana afincada en Valencia que desarrolló su carrera principalmente en la extinta Canal 9, en proyectos como Les Moreres, Negocis de Familia o L’Alqueria Blanca. Su primer largometraje, La distancia más larga, logró el Premio Platino a la mejor ópera prima de ficción iberoamericana y fue nominada al premio Goya, habiendo conseguido numerosas distinciones en festivales internacionales, como el de Montreal, Cleveland o Trieste.