'LA SEÑORA SIEMPRE TIENE RAZÓN '

Las tendencias de las intendencias

25/06/2016 - 

El colocón

Si usted está desayunando ahora unas tostadas con margarina, y está mentalmente predispuesto contra ese sucedáneo de la mantequilla de vaca, casi seguramente que la margarina se le indigeste. Si no tiene, en cambio, mayores prejuicios al respecto, la margarina le sentará estupendamente y, lo que es más extraordinario,  enriquecerá su organismo de modo similar al de ingerir una apreciable cantidad de vitamina A.

No les quiero hablar de nutrición sino de psicología, porque acabo de descubrir –o de inventar- cuál es el mayor problema que nos entierra a los valencianos, lo que nos inmoviliza y lo que nos hace volver una y otra vez al punto de partida: los prejuicios.  Y estos se resumen en esa frase tan nuestra que advierte a aquellos que quieren cambiar las cosas: “qui estiga bé, que no se menege”. Es mucho más destructora que “lo óptimo es enemigo de lo bueno”, porque ni siquiera es huir de una búsqueda, sino permanecer en un estado de placidez semejante al de los fumaderos de opio. Vaticino una gran bajada del habitual consumo de drogas en nuestra ciudad, porque está de moda, como explicaré si tengo tiempo en esta crónica, el colocón inmovilista por dentro.

Reapertura del Colegio Mayor de la Seda

Valencia, 17 de junio, carrer del Museu de la Seda. Bajo el arco de descarga ojival, decorado con unos leones rampantes de San Jerónimo troquelados en chapa de hierro envejecido, hay dos modernos men in black que dan paso a los invitados en la reapertura del Colegio del Arte Mayor de la Seda y sus galerías. Dos millones de euros y dos años de duro trabajo ha sido el esfuerzo realizado por la Fundación Hortensia Herrero para salvar de la ruina este emblema del auge de nuestro comercio, olvidado durante tres tristes décadas de historia por nuestra administración. Por encima del muro, saludan incipientes palmeras desde el huerto de moreras y naranjos de la terraza de Espai Seda, un oasis en plena ciudad para refrescarse y tomar algo.

Respaldando el acto de reapertura, Ximo Puig, Vicent Marzà, Joan Ribó, Joan Calabuig, José Mª Chiquillo con casi todos los comisionados del programa de la Ruta de la Seda de la Unesco, el presidente del gremio de apellido adecuadísimo para el cargo, Vicente Genovés; el maestro y último velluter, Vicente Enguídanos; el director de la restauración, el arquitecto que más sabe de las cubiertas, muros de carga y arcos, Fernando Aranda de Bertolín; el cronista Vicente Pérez Puche que hizo de maestro de ceremonias; Annick Thébia Melsan, Consultora Internacional de la UNESCO, responsable de que estemos por fin en el mapa de la ruta de la seda; los hermanos Alejandro y Agnès Noguera con su madre, Agnès Borel Lemonnier; Ignacio Casar Pinazo, periodistas como Elvira Graullera de Europa Press, Carlos Garsán, la discreta bloguera Carla Cristina Lisboa, Natalia Castillo, Vicente Navarro, Inma Mañes de Isedas, Adis Soriano, los emocionados familiares de los presidentes de la cofradía que no pudieron realizar la restauración como Natalia Castilla y, en fin, todo el mundo, incluida la palpable ausencia del restaurador Javier Catalá. En primera fila, Amparo, Hortensia, Juana y Carolina Roig Herrero, con sus respectivas parejas sentadas con mucha seriedad detrás de ellas.

Loa a Hortensia Herrero, filántropa

Por supuesto estaban sus padres, hijos predilectos de la ciudad, el exitoso empresario de aciertos como Mercadona, Juan Roig, y su esposa Hortensia Herrero quien lució para el evento un vestido estampado con los dibujos del pavimento de la Sala de la Fama del propio museo. 

Ya saben que no soy muy de hacer la pelota pero alguien tiene que decir que Hortensia fue la mejor anfitriona que se ha visto en mucho tiempo: estuvo cercana con todo el mundo, su discurso fue una trama de lineas armónicas y sensibles sacadas del corazón; se entregó a ese arte olvidado de la puntualidad hasta el extremo de inaugurar aún con los carpinteros con las manos en la obra; cambió solemnidad por sinceridad y ostentación por saber recibir; no se olvidó de nadie y le dio un trato de cariño tan humano al edificio que ha contagiado ya a cientos de visitantes. Alguien le daría un diez, pero sospecho que a ella no le importa la nota, sino el bienestar de los que van a disfrutar durante muchas generaciones de su mecenazgo. Hortensia dedicó este museo a su marido y en el momento de descubrir la placa conmemorativa sonó una traca lejana como un redoble de tambor.  

Cerámica y Artes Suntuarias

Otro museo valenciano, el Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias (es decir, de amor y lujo) “González Martí” del palacio del Marqués de Dos Aguas,  presentó el pasado martes la exposición Lugares donde estaré. Más de 110 piezas de cerámica esmaltada, gres y porcelana de la ceramista bucarestina Cristina Bolborea bajo estos evocadores títulos gnósticos: “El ojo de la tormenta”, “Las alfombras de los maestros”, “Llámame turquesa” o “Joyas de la caja negra”. Las obras, apadrinadas por el Instituto Cultural Rumano en Madrid,  comparten espacio con las joyas de la colección del museo y permiten buscar en las técnicas ancestrales de la cerámica las diferentes visiones de sus artistas. Luego se expondrán en la capital del reino, así que si quieren ahorrarse el AVE, ya saben.

Nos acompañaron el accesible director del museo, D. Jaume Coll Conesa, también director de la Asociación Española de Ceramología; la presidenta de la Asociación de Amigos de este museo; Carmen Rodrigo Zarzosa, quien al verme entrar en el ascensor de minusválidos -acaban de operarla de una rodilla- me preguntó: “¿Eres rumano?” lo que dio ocasión a una entrañable conversación sobre sus estudios en Madrid donde conoció a todos los poetas de la generación de la posguerra como José Hierro; también el agente promotor independiente Vicente Navarro, la artista internacional Adis Soriano, o la investigadora de arte Elvira Mas Zurita.

Aunque el museo ofrece los últimos lunes del mes un concierto de música en sus dependencias, ese martes era el Día Mundial de la Música, que supongo que complementa al día de Santa Cecilia, mártir que fue declarada patrona de este arte por una mala traducción de su tormento en latín. En esta ocasión fue un recital de canto y piano, con lieder de Schubert y chansons de Koechlin y Poulenc. La soprano fue la valenciana Mercedes Jorge Serra, que ostenta toda clase de títulos y premios a pesar de su juventud: es profesora de clarinete, grado superior de canto, doctora en Cirugía con calificación de cum laude, asesora médica de Vocal Center, guapa y canta con agradable naturalidad. La acompañó el mahonés Fernando Orfila Abadía, con un expediente académico plagado de máximas calificaciones, y que paralelamente se licenció en Derecho. Escucharles en el salón de baile del museo es un auténtico tripi con levitación, decoración alegórica, porcelana, bronce y cristal que deseo que puedan ustedes disfrutar algún día.

Rayos X en el Casino de Agricultura

Por cierto que me perdí la charla de Dª Fernanda Manglano Trenor sobre Mme. Curie en el Casino de Agricultura a la que se había invitado a todos los socios y distinguidos familiares de la ponente. Es uno de mis casinos favoritos y como el acceso es libre también se puede disfrutar cotilleando en un ambiente distinguido. Espero poder hacerlo en la próxima ocasión y contarles las últimas experiencias de dicha asociación que se está llevando a las mejores personalidades del mundo social valenciano.

Cultura en la Fábrica de Hielo

Sí acudí a una reunión sobre el devenir de la cultura en Valencia que tuvo lugar en La Fábrica de Hielo del Cabanyal. Estaba convocada por un partido político que no puedo nombrar porque hoy es jornada de reflexión, pero como pista les diré que tiene que ver con uno de los Pablo Iglesias históricos y hasta ahí puedo leer para mantener el suspense. Acudió muchísima gente entre participantes y deseosos de saber:  el actor Ferrán Gadea, la artista audiovisual brasileña Bía Santos, el escritor Fernando Delgado, la abogada Carmen Alborch, la escultora Amparo Carbonell, el publicista José Vicente Plaza, Emiliano García de Bodega Montaña, el marqués de Russafart Arístides Rusell, la arquitecta Sonia Rayos, el economista Pau Rausell, la abogada Sandra Gómez, el histórico Vicent Garcés, la escritora Carmen Amoraga con su marido Carlos López Olano, el veterano de la escena valenciana Abel Guarinos, la productora teatral Patricia Pastor, la artista Marisol Solanova, el nieto del pintor Pinazo José Ignacio Casar, el abogado Carlos González Triviño. Daniel González Serisola de Transparència con Ximo Cádiz, el economista Ramón Vilar, la diseñadora Sandra Figuerola, la directora de cine Pilar Pérez Solano, el doctor en Historia Contemporánea Salvador Broseta, la maestra del audiovisual Paqui Méndez, Toni Benavent de Albena, el diseñador Ibán Ramón, Maribel Domenech presidenta de Salvem El Cabanyal, el periodista  Carlos Aimeur con la restauradora Greta García, el alcoyano Paco Molina, los fotógrafos Miguel Lorenzo y el Flaco, el economista Joan Lerma y, por la familia Císcar, don Cipriano, que se ha cortado la rizada melena de antaño. Yo creí que en la charla se nos iba a preguntar qué era para nosotros la cultura, y menos mal que no me lo preguntaron porque para mí la cultura es dudar de todo lo conocido.

Premios Tendencias y otras entretelas

¡Y por fin, una gala de moda y lujo como se merece esta ciudad y esta sección de sociedad! En el recién reestrenado -en Valencia no paramos de reestrenar- edificio de Veles i Vents hubo el pasado miércoles premios y cena solidaria de la Revista Tendencias Moda o Fashion según se mire. La ONG beneficiaria de la recaudación obtenida fue la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) en Valencia, una agrupación con más de 30 años de experiencia cuya misión es defender y promover los Derechos Humanos y el desarrollo integral de las personas refugiadas, apátridas y migrantes con necesidad de protección internacional o en riesgo de exclusión social. 

Había tanta gente guapa, trajes a medida y joyas rutilantes que el glamour casi eclipsa el propósito de concienciar a la gente del infierno humanitario más grande desde la Segunda Guerra Mundial que están viviendo los refugiados sirios, de los que por cierto han llegado hasta ahora unos doscientos acogidos en por el Gobierno en funciones. El coodinador de CEAR Jaume Durá y Alba Soler, del departamento de Desarrollo de la ONG, subieron al estrado a agradecer la colaboración de los invitados y la iniciativa a la directora de la revista y anfitriona Ángela Pla, una de las mujeres que mejor saber congregar a todo el conjunto de la sociedad valenciana, que no es moco de pavo, acompañada por su marido, el periodista y editor Juan Lagardera.

Javier de Andrés, director de la sala La Sucursal, estuvo atento a todos los detalles de la cena, impecablemente enfundado en un traje azul cobalto. Yo estuve sentado en una mesa muy entretenida, con el misterioso egiptólogo Osman Korkar o la soprano Amparo Navarro; concretamente me senté entre el periodista y DJ Vicente Gallart, que me contó toda su vida con una gran capacidad de síntesis, y Amparo Doñate, creadora de joyas y fundadora de la mítica tienda Murmur. Más allá, en mesas con brisa marina, estaba la ex mujer del llorado ex presidente Alberto Fabra, Cristina Fortanet; Begoña Marfil y su marido Bruno Rubio de Joyería Marfil; los joyeros Rafael Torres, Argimiro Aguilar y Salomé Corell; el asesor Alfonso Manglano Beneyto; su madre, Mayrén Beneyto, de UNICEF, que vino con un precioso traje de estampado inspirado en los ricos brocados de los sofás de Versalles; Elvira Murcia de la Plataforma de Defensa de la Ley de Dependencia; el flemático, Luis Sáez, presidente del Club Náutico, que nos contó cómo se evitó hace poco un atraco en sus instalaciones, ¿o era un atraque? Carmen de Rosa del Ateneo, vestida con una clásica grande robe noire de fond d´armoire; Joan Calabuig, del Ayuntamiento; el simpático periodista y popular presentador Ximo Rovira con Laura Grande y Ferrán Cano, periodistas; la sociable Merche Vaquer, de EVANS eventos; Rosa Pérez Retes; Jaime Serradillo; Ana García Ribera; la presentadora, modelo, actriz y siempre alegre Paloma Lago; Rafael Alcón, presidente de la Fundación Bancaja, que no para un momento, con su jovencísima hija Paula; Ricardo Mascarell; Iñaki Fresdague; Rocío Bacharach; el estilista compañero de Cabanyal Zombi, Tono Sanmartín;  el artista Jarr; Enrique Senís; Lú Gorritz; Alina Giorgeta, empresaria; Paloma Madrid; Rafa Cervera; la presentadora, modelo y actriz Arantxa del Sol; la siempre interesante de leer y de ver Minerva Portillo, modelo; Josep Lozano; el elegante Marc Insanally (según mis notas, Ijternasli, tengo que ir al otorrino) creador del Café de las Horas del Carmen; el restaurador Tomás Brandez; la cullerense Elvira Ferrer, presidenta del Rotary Club de Valencia; el pintor Enrique Senís-Oliver; Elvira Selva Catalá -de la sedera Catalá que hizo el tejido del traje a Letizia- y su marido Jorge Casanueva Tomás; el experto en las cavidades valencianas Alberto Sendra; los galardonados arquitectos del proyecto del Cabanyal, Arturo Sanz con Carmel Gradolí, quien recogió su premio diciendo: “como arquitecto, mi cliente es la sociedad y la eternidad; por eso se construye en materiales como el granito, la piedra, el ladrillo. Pero como el material de la moda es la mamella, y la mamella no dura, la moda es pasajera, a no ser que sea la mamella de la Venus de Milo...” y en ese momento Carmen Alcayde le dio las gracias y le invitó a ceder el micro a los siguientes premiados.

El interiorista Tomás Alía, recibió el suyo después de una intervención de Ángela Pla donde citó hasta al poeta Paul Valéry y a Serrat. Ahora dudo si citó a Paul Claudel, pero no creo porque Claudel es un poeta muy pelma. Luego les cuento más de la gala porque estaban en la cena el  diseñador Jaime Sanahuja; Malala Vega Olmos; la paternera Anne de Vicente, de la superguardería; la mujer del presentador Pepe Navarro, Ashley Lack, del Cambridge House Community College from Rocafort; el broker Mario Olivares; la familia Senchermés; el sexy odontólogo Primitivo Roig y su hermana Ángela; la abogada Mar Miravet; Jesús Barrachina hijo, al que siempre gusta uno de encontrar en Bimbi; Pere Fuset  del ayuntamiento; la secretaria autonómica Maria José Mira, para algunos Macu y Maco para otras; Modelos como Laura Sánchez, Madeleine Hjört; el imperturbable Francis Montesinos vestido con un traje hueso como el la última escena de Muerte en Venecia; Amparo Chordá o José Besó.

Acompañada por su marido Eduardo Primo, la guapísima presentadora Carmen Alcayde, llevaba, además de unos pendientes de esmeraldas, jades y diamantes de Marfil, un precioso escote rodeado por un no menos maravilloso traje del diseñador Alejandro Resta, quien dedicó cariñosamente su premio a su pareja Óscar y a su madre entre las ovaciones de sus seguidores. Al público le encantó la presentación de Carmen, con ese candor y sencillez innata que le abre todas las puertas. Hubo un divertido momento en que confundió a Arancha del Sol, sentada en su mesa, con Paloma Lago y todos nos reímos mucho con el lápsus porque es imposible confundirlas.

Los amigos y mucho más de la Editorial Pretextos, Manuel Ramírez, Manuel Borrás y Silvia Pratdesaba, recibieron su galardón y anunciaron el reciente Premio Gerardo Diego del joven investigador literario alicantino Manuel Valero, por un ensayo sobre Gil-Albert; como los premios estaban realizados en papel por los maravillosos Empaperart, Manuel exclamó “¡Por fin un premio que no pesa!” y además en papel, que seguramente es su material favorito. El premio se lo entregó el poeta Vicente Gallego.

La coolhunter y bloguera de LifeStyle María León recibió el premio a la Comunicación. El periodista y hombre de moda Josep Lozano junto a Minerva Portillo entregaron el premio a la joven modelo Marta Ortíz, que agradeció su vestido al diseñador Jorge Vázquez, la confianza de El Corté Inglés, dedicó el premio a su madre y lanzó un beso a su representante por lo duro de la profesión. El diseñador Jorge Vázquez dedicó el premio a la Trayectoria en el Diseño a su equipo y a Coco Chanel y Balenciaga: en septiembre le veremos en Cibeles. Y ya me fui al bar a empinar el codo, porque acababa el acto y el bastón me impide moverme entre multitudes, pero sin perder de ojo los últimos premios que fueron: Mejor Iniciativa Empresarial para el Club Moddos, el de Empresa de Moda para la diseñadora Laura Sánchez por Bloomers&Bikini, y el premio Empresa Salud y Belleza a Alfredo Bataller de la clínica Sha Welness de Alfàs del Pí (“sin salud nada es nada”) y el de Diseño de Producto a los fabricantes de colchones Munhar, Enrique Duart y su hija Mónica, 50 años fabricando colchones. “Hay que estar muy orgullosos de ser valencianos”, sentenció la presentadora, y yo ya estaba dormitando en el asiento de cuero en la parte de atrás de un lujoso Jeep mientras repetía el eco las últimas sílabas. Lo del inmovilismo, para la semana que viene, que ya estamos en verano y hay tiempo para todo.

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