Foto: EFE/A.Carrasco RagelVALÈNCIA. “Mi piel no es mi frontera, sino lo que me permite dialogar con el otro”. Esta es una de las líneas de diálogo que se escucharán en Les Veus de la Frontera, la obra que se estrena hoy en el Palau de la Música escrita y dirigida por Manuel Molins, Premio de Honor de las Artes Escénicas de la Generalitat 2018. Un proyecto que empezó el 17 de junio del año pasado, cuando el Aquarius llegaba a las costas valencianas y España respondió al drama de los refugiados.
11 meses después, el Palau de la Música acoge este jueves el estreno de un montaje que, bajo el formato de la cantata, dramatiza la historia de un grupo de migrantes en la frontera con Europa. Un chico que quiere ser músico, otro ganarse la vida en Alemania, una madre con su hijo… Cada persona con su historia a cuestas, frente a las fuerzas de seguridad europeas que les impiden el paso. “El teatro quiere ser empático pero sin caer en el maniqueísmo. Tiene una carga política, pero de ninguna manera partidista”, asevera Molins. Lo responde cuando se le pone de relieve que esta historia, que resume uno de los grandes conflictos políticos europeos, se estrena la semana en la que se celebran elecciones a su parlamento: “Europa ha acabado siendo, en muchos aspectos, algo errática, y es una bonita casualidad que el montaje sirva para hacer reflexionar sobre la importancia de que la Unión Europea vuelva a los valores que la fundaron”, explica.
En efecto, en la llegada del Aquarius, Europa ya sufría una crisis de criterios a la hora de entender el drama migratorio, más aún con la llegada de la ultraderecha a los parlamentos de varios países como Italia. En España, si bien la acogida del barco de rescate se entendió como un hito, en los meses siguientes ha trascendido el ninguneo de los refugiados por parte del gobierno español y las trabas que este pone para que la flota de las ONGs salgan de los puertos españolas para seguir su misión.
La obra busca hablar del drama migratorio mirando también al pasado, a los exiliados y a la clase obrera trabajadora que no tuvo oportunidad en la España de la segunda mitad del siglo XX. Pero también quiere mirar al futuro, ¿y si nos tocara ser una de las voces de nuevas fronteras?
Pero “más allá de la política, la obra tiene poética”, y Molins quiere hablar de ella. Pues a ello. En lo formal, la obra adopta el formato de cantata, una decisión de ninguna manera casual: “es un género muy utilizado en centroeuropa y más novedoso aquí, así que, queriendo trasladar una reflexión sobre Europa, lo veía acertado”, explica Molins. Así, se combinan el verso libre y la métrica habitual. Esto provoca también que el elenco, más acostumbrado a la ópera, “tenga que hacer el esfuerzo de no impostar la voz, para hacer una interpretación más cercana y cálida”.
El texto y la dirección de Molins lo completan la música de Arcadi Valiente interpretada por el Orfeón de Valencia dirigido por Josep Lluís Valldecabres y con la participación de los solistas Vicent Antequera (barítono), Miguel A. Ariza (barítono), Óscar Navarré (tenor), Tere Núñez (mezzo), Elma Sambeat (soprano), Joan Valldecabres (barítono) y Amparo Zafra (mezzo). Por otra parte, los actores Esther Valles, Luis Meliá, Abel Soriano y Helena de Luis interpretan a varios de los personajes de la obra. Jesus Debón (piano de continuidad), Joan E. Broseta (Oboé), Luís Martínez (Violonchelo), y el propio Arcadi Valiente (Piano) serán los responsables de colorear la cantata. Además, la obra contará con la participación final de La nova Muixeranga d’Algemesi. Un elenco all-star en el que ha primado poner un grano de arena altruistamente para poder destinar todos los beneficios de la obra a Open Arms, Cruz Roja y CEAR.
