Motivos para no faltar a CLEC: la pasarela intergeneracional que une moda, música y gastronomía

VALÈNCIA. Entre Dolores Cortés y Anaïs Vauxcelles, finalista del premio Mercedes-Benz Fashion Talent, hay casi medio siglo de diferencia. De edad, que no de talento. Entre Francis Montesinos, Ágatha Ruiz de la Prada, Dominnico y Visori media un abanico de orientaciones, identidades y estilos, pero los iguala la calidad en sus oficios. Si algo une a los diseñadores que participan en CLEC Fashion Festival es la diversidad y la excelencia. Lo demás, como los estilismos de cada uno y una, es opinable. Diferentes pero únicos.

Diferente es también la pasarela que han montado en el Hemisfèric, con sillas de diseño de Andreu World y en forma de círculo. Ayer me tomé una biodramina porque puedo ser la primera persona que vomita en un desfile por el mareo. Como hay que comprar entrada para el Festival, en esta pasarela no hay tanta petarda invitada pavoneándose en la primera fila. Aquí el ‘front row’ lo organiza el relaciones públicas Jota que, cuál artesano de la interacción humana, siempre te ofrece un mojito. 

El viernes, día de inauguración, la primera fila estuvo copada por la secretaria autonómica de Economía Sostenible, Rebeca Torró; concejales como Marta Torrado o Paula Llobet, los regidores del Ayuntamiento Rocío Gil, Pilar Bernabé, Fernando Giner y Amparo Picó; los diputados Carlos Pablo, Ruth Merino, Mª del Carmen Peris y Pedro Ruiz; y Mª José Catalá, del PP. 

También abunda el entusiasmo, los modernos, merodeadores variopintos e influencers, empezando por Nuel Puig, Enol Blasco, Patri Folgado, Gio Pellicer y Marta Handrich, en uniforme de trabajo. O sea, de punta en negro. A veces te tienen que contar qué significan las cosas (¿las chanclas con calcetines?¿el pelo azul?) A veces no. 

Abrió la tarde del viernes el desfile de Dolores Cortés y aquí el espectáculo estaba asegurado. El buen gusto, también. Y eso que se trata de enseñar baño. De ver señoritas en deshabillé. Chicas, al salón. Eso sí, el deshabillé fue de lo más exquisito. Luego llegó el turno de Yvan Andreu, el diseñador alicantino ganador del reciente premio de moda Samsung EGO Innovation Project. A continuación, el dúo Siamo Studio nos trasladó a aquellos maravillosos años 80. Isabel Sanchís mostró un desfile lleno de guiños fascinantes y detalles femeninos. Pocos pueden rivalizar con Sanchís en lo que a confección se refiere. Cerró la jornada Anaïs Vauxcelles, fundadora de 404 Studio, que tras triunfar en la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid puede presumir de ser una de las mayores representantes del crochet.

Entre desfile y desfile se pueden hacer muchas cosas. CLEC es moda, pero también diseño, fotografía, música, cine. Y gastronomía. El chef valenciano Alejandro del Toro ha creado una tapa a base de naranja y azafrán inspirada en Francis Montesinos. Nicolás Román homenajea a Miquel Suay con ostras. También se pueden ver diferentes show cookings de los cocineros Bernd Knöller (Riff), María José Martínez (Lienzo), Miguel Ángel Mayor (Sucede), Miriam de Andrés (La Sucursal), Nacho Romero (Kaymus), Luis Valls (El Poblet) y Vicente Patiño (Saiti). De la moda al plato.

También puedes participar en un shooting de moda con fotógrafos como Josep Alfaro, Gerardo Ortiz, Amparito Sebastiá o Francisco Hernandez Marzal, disfrutar de un fashion film de Victor Claramunt (director que ha ganado los premios más importantes del género) y bailar al ritmo de los djs Pepino Marino y The Basement. Pero lo más animado siguen siendo las barras donde se puede empinar el codo con cócteles de ginebra desde bien tempranito. 

CLEC Fashion Festival continúa hoy sábado con los desfiles de Visori, Dominnico, Miquel Suay, Ágatha Ruiz de la Prada y Francis Montesinos. El festival, impulsado por Miquel Suay, ha abierto posibilidades que parecían imposibles hace unas temporadas. Ha logrado que circule un necesario aire nuevo en el mundo de la moda. Espero que repitan con nuevas ediciones y que estos ojitos que está destrozando la pantalla del ordenador lo vean.