VALÈNCIA. El Institut Valencià de Cultura (IVC) quiere afianzar entre 2019 y 2020 su papel en tanto que programadores de música contemporánea valenciana, un espacio que ocuparán una vez se efectúe la transferencia del certamen Sona la Dipu y, antes, con el nuevo programa Sonorama, un circuito de conciertos protagonizados por los ganadores y algunos de los nominados de los Premios Carlos Santos de la Música Valenciana. Con este proyecto se busca dar continuidad a los galardones, creados en 2018 y sin dotación económica, un ciclo de recitales que se desarrollará entre noviembre de 2019 y febrero de 2020 con el objetivo de “desestacionalizar” la oferta musical. Así lo explicó el director general del IVC, Abel Guarinos, y la directora adjunta de Música y Cultura Popular, Marga Landete, durante la presentación del programa, en la que estuvieron acompañados por Pablo Rosell de Els Jóvens, grandes triunfadores de la primera edición de los premios.
Con un presupuesto de en torno a los 200.000 euros, la administración provincial busca generar un circuito que, por una parte, sirva como premio para los vencedores en los Carles Santos y, por otra, sirva como apoyo a la programación musical de la Comunitat en 'temporada baja', durante los meses de invierno. Grupos y solistas participarán en un circuito que contará con un concierto inaugural el próximo 10 de mayo en Vilafranca, recientemente seleccionada como Capital Cultural Valenciana junto a Altea, recital protagonizado por el grupo Els Jóvens, ganadores en las categorías de Mejor Disco, Mejor Canción y Grupo Revelación.
Los músicos confirmados para la presente edición de Sonora son Frida, Prozak Soup, Jazzwoman, Eva Olivencia, Santero y los Muchachos, Junior McKenzie, Júlia, Clara Andrés, Carles Pastor, Vera Green, Carles Dénia, Jonatan Penalba, Rascanya, Pep Gimeno ‘Botifarra’, Canta Canalla, Trobadorets, June's Kaleidoskope, Johnny B. Zero, Novembre Elèctric, Fru Katinka, Pau Alabajos, Óscar Briz, Dani Miquel y Borriana Big Band. El programa nace para llevar propuestas musicales a espacios donde la programación es menor, una selección de municipios que en esta primera cita ha dado con un listado de localidades no tan pequeñas, como Castelló o Alicante, a las que se suman Sagunt, Altea, Elx o Peñíscola, Pedreguer, Silla y la Pobla de Vallbona. A este respecto, Landete apuntó que intentarán "jugar con los espacios y la lengua", por lo que los grupos tendrán la oportunidad de actuar en los lugares donde no tengan proyección.
Con la presentación de Sonora es imposible no preguntarse por el ‘caso Sona la Dipu’, el certamen de bandas noveles impulsado por la Diputación de València que, a partir de 2020, pasará a gestionar el IVC, que transformará el concurso en un evento autonómico. “Son proyectos muy diferentes”, explicó Landete al respecto de la complementariedad de ambos proyectos, puesto que uno está dirigido a nuevas bandas y el otro a proyectos musicales afianzados. “Podrían ser los teloneros”, apuntó la directora adjunta, aunque lo cierto es que, tal y como especificó, todavía no hay un plan concreto sobre el futuro de un Sona la Dipu, que pronto cambiará de nombre. “En mi opinión, tendría que servir para impulsar realmente sus carreras profesionales, a través de formación, como enseñar cómo se factura, y con una serie de conciertos que veríamos cómo se articularían”, añadió.
“Sería prudente esperar a que se configurara la nueva realidad en la Diputación, también por respeto”, explicó Guarinos, que apuntó al cierre de los últimos compromisos adquiridos por la Diputación y a las elecciones del próximo 26 de mayo como punto para empezar a trabajar en la transferencia. Pero no es solo esta la cuestión pendiente, también la deuda que actualmente la administración provincial mantiene con algunas de las bandas participantes del certamen, aglutinadas en la plataforma ‘Debe la Dipu’, creada expresamente para denunciar los impagos. A pesar de fijar en 2018 un calendario de pagos, una vez cumplida la fecha límite, sigue pendiente parte del montante, lo que provocó que hace apenas unos días los grupos enviaran un nuevo comunicado denunciado la situación, así como la “nefasta” comunicación con la administración. Por su parte, Guarinos ya verbalizó tras anunciarse la transferencia que debía recibir un Sona la Dipu sin “lastre”.