VALÈNCIA. Un bar histórico para los autores y expertos del cómic valenciano sirve de repisa para un encuentro entre uno de los grandes autores y una de las autoras más incipientes, última (y primera) ganadora del premio València de Novela Gráfica. Núria Tamarit llega en bici, Paco Roca -que no es camionero- ha llegado el primero.
Trazando una vertical con Futurama, templo urbano, el bar Pegaso alumbra un intercambio fluido en el que Roca y Tamarit se cuentan su manera de afrontar el oficio, la soledad del proceso, el vértigo de ser capaz y, finalmente, la esperanza ante un momento fulgurante para el cómic valenciano.
Núria Tamarit, 1993.
Paco Roca, 1969.
Paco Roca: Siempre he estado un poco fuera del mundillo del cómic, pero cuando estaba estudiando, diseño gráfico, sí tenía a amigos muy comiqueros. Aquí, El Pegaso, era el lugar de reunión. Yo no solía hablar del cómic con mucha gente, nunca he sido un gran conocedor… no como la tertulia de los Rafa Fonteriz, Álvaro Pons, Jesús Yugo… yo venía alguna vez. Era los viernes. Iban a Futurama a hacer la compra y luego aquí.
Núria Tamarit: Mis primeros años… bueno, no hace tanto. Leía cómics, pero no era mi máxima afición. Lo que me gustaba era dibujar y leer, ya cuando llegué a la universidad en Bellas Artes coincidí con un grupo en el que todos, menos yo, hacían cómic. Me empecé a animar. Venga, vamos. Juntos ya empezamos a hacer fanzines. Dibujaba a piñón, aunque no hacía narrativa.
Paco Roca: Todos, de alguna manera, lo que queremos es contar historias. Y dibujando quizá es nuestro único medio para hacerlo. Porque con animación es más complicado. El cómic es muy democrático, aporta tanta facilidad que cualquiera puede hacerlo. Es un medio muy libre por lo económico que es, la inversión es casi solo de tiempo y para el editor, comparado con otros medios, es bastante barato. No hay más que ver la cantidad de proyectos basados en cómics que hay ahora.
Núria Tamarit: Al principio era un enfoque de reto. ¡Yo también quiero contar mis movidas! Era muy poco y experimental. Pero antes de ponerme en serio hice un cómic de setenta páginas, hasta al final, para probarme. ¿Cómo me iba a dedicar a esto si no sabía si podía hacerlo? Lo imprimí… aunque no se lo enseñaré a nadie.
Paco Roca: Mi madre me guarda uno de mis primeros cómics, que era sobre Star Wars. Acababa de salir del cine y lo primero que quería era volver a verla. Mi única forma de revivirla era hacer mi propio cómic. Creo que sigo haciendo cómics para revivir momentos especiales. Esa primera motivación sigue siendo la que tengo ahora: guardar inquietudes.
Núria Tamarit: Ahora estoy con el premio este que sabéis que…
… El València de Novela Gràfica
Núria Tamarit: Sí, ése.
Lo dices con modestia…
Paco Roca: Como si nada, eh.
Núria Tamarit: Bueno, bueno, un premio, qué más da. Y para esa obra quería contar mi viaje a Senegal y el impacto entre la información que había recibido en contraposición con lo que viví. Una motivación imagino que social. Cuando me fui ya tenía la idea de recoger detalles, dibujarlo todo. Sin ninguna intención más allá de retener. Pero luego, te presentas al premio…
El premio ese
Núria Tamarit: Y va y lo gano.
Paco Roca: ¿Cómo lo llevas?
Núria Tamarit: Mal, la entrega es en diciembre.
Paco Roca: Ah, estamos igual, entonces.
Núria Tamarit: Podemos llamarnos para llorar.
Vaya, os pillo en buen momento…
Núria Tamarit: Me aburro con facilidad y me gusta hacer varias cosas a la vez, pero con este proyecto, para que me dé tiempo, tengo que estar volcada cien por cien.
Paco Roca: Un autor de cómic tiene que saber hacer muchas cosas, saber contar una historia, saber de color, dibujar, casi que interpretar… pero además algo que es clave es la constancia de estar años dedicado a un proyecto, que no todo el mundo es capaz, porque puedes pensar que todo ese esfuerzo no va a ningún lado.
Núria Tamarit: Lo más complicado es pasar de una fase a otra, hay tantos momentos por el camino en los que puedes rendirte…
Paco Roca: Y estás tú solo, contando lo mismo varias veces. Primero el guión, los bocetos, lo dibujas, lo coloreas, le metes los textos… Es muy repetitivo. La gente que hace cómic de encargo, que imagino que es por motivo económico, tiene mucho mérito, yo no podría. La única motivación para estar tanto tiempo es que quieras contar una historia especial, que sea un reto. En estos momento el reto que me apetece es hacer un tipo de narración distinto al que he hecho hasta ahora, recurrir a otros soluciones gráficas.
¿Qué pasó cuando le dijisteis a los vuestros que os querías dedicar al cómic?
Núria Tamarit: No sé si me lo he planteado, de repente creo que me he visto en esto.
¡Te has visto!
Núria Tamarit: Toda mi vida la veo como que me gustaba dibujar y de repente estoy dibujando. No soy capaz ni tan siquiera de comprender cómo ha ocurrido. Desde el primer cómic de verdad que hice con Xúlia (Vicente), vimos que lo publicaban... si alguien ha querido que esté en papel, algo habrá. Pero es difícil explicarles lo que haces a gente que no lee cómics o no lee en general. Mucha gente cree que soy novelista. A todo el mundo le cuesta entender que puedes vivir de dibujar.
Paco Roca: De hecho es muy raro.
Núria Tamarit: Me dicen si dibujo héroes… Me sorprende porque hoy en cualquier librería hay al menos cómics de Paco Roca, se ha democratizado bastante. Que todavía estemos con los superhéroes… A veces les digo que sí, que dibujo para Marvel.
Paco Roca: Es normal, hasta hace poco solo era conocido Ibáñez y poco más. Pero cada vez creo que es menos extraño. Últimamente mi círculo tiene mucho que ver con los padres de la guardería a la que llevo a mi hija. Estoy seguro que les había comentado que yo era dibujante de cómics, pero se ve que no había calado. Siempre les decía que me iba de viaje… Hace unos años tenía que entregar un Goya y la hija de uno de los padres de la guardería, viendo la gala, le dice a su padre: papá, papá, mira, es el papá de Sabina, está en la tele. El tipo pensaba que yo era caminero. Ahora ya sabe que soy dibujante de cómics.
Núria Tamarit: ¿No crees, Paco, que antes los niños leían muchos más cómics y ahora ya no?
Paco Roca: Es verdad que nos hemos pasado la vida luchando porque se considerara que eran para adultos… y resulta que ahora son los niños los que no los leen.
Núria Tamarit: Pero soy optimista respecto al futuro del cómic. Cada vez, al menos desde mi trayectoria de cuatro años, veo mucho movimiento, gente atreviéndose, arriesgándose a leer.
Paco Roca: Estamos en el mejor momento del mundo del cómic. Igual no se lee tanto como en otras décadas, pero tenemos un público muy generalista, estamos en todo tipo de librerías, en los museos, tenemos un respeto que antes no teníamos fuera del medio. Pero, a pesar de eso, estamos todavía empezando. Está al caer que un cómic sea un bestseller en España, un acontecimiento. Tenemos una red comercial que hace que sean muy accesibles.
¿Y se puede ganar mejor la vida un autor?
Paco Roca: En general es muy difícil vivir de la cultura. Gente que viva de los royalties de su obra, sean cineastas, músicos o dibujantes, debe haber poquísimos. No te salen las cuentas.
Núria Tamarit: Un buen consejo es jamás calcular tu trabajo por horas. Si no, dedícate a otra cosa.
Paco Roca: Vives, o al menos en mi caso, de todo lo que genera tu obra. Otra pata de la economía es la ilustración. Si no hiciera cómics no me llegarían encargos, charlas… Podría vivir muy justo solo de los royalties, pero si dejara de hacer cómics se me desmoronaría todo lo demás. Cuando empecé nunca hubiera imaginado que podría vivir de esto. Al menos en España no tenía muchos precedentes de hacer un tipo de cómics fuera de la industria. Yo trabajo al ritmo que quiero, con la historias que quiero. Cuando comencé la única opción era estar metido en la industria francesa o de los superhéroes, y en ellas el 90% no tenía su respeto como autor, eran obreros del mundo del cómic. Con el tiempo en España sí se ha creado un terreno cultural en el que caben otro tipo de autores, con contenido más social.
Núria Tamarit: Yo… he llegado hasta aquí. Desde siempre pensaba que sería profesora de Bellas Artes o algo así, no concebía que pudiera ser una profesión dedicarme al cómic. Pero ha pasado. Lo compagino con la ilustración, porque me gusta y porque además, desde que comienzas un proyecto de cómic hasta que te pagan, puede pasar mucho tiempo.
¿Qué pasa con el caso valenciano?
Paco Roca: Siempre ha habido muchos autores, genera comunidad. No creo en esas cosas de que los valencianos, de forma natural, sean más dados para ello. Pero sí imagino que culturalmente va quedando un poso, aumentan las colaboraciones.
Núria Tamarit: En la facultad hay más cómic que en el resto de España, la asociación de ilustradores, Tenderete, lugares como Futurama, Bartleby… Es muy fácil encontrar un entorno, empieza a haber posibilidades. Me acuerdo cuando iba a las charlas de Bartleby, iba allí y decía: mira, es Paco Roca, a ver qué ha hecho este señor.
Paco Roca: O Pepita Lumier. Que haya una galería dedicada a la ilustración…
Núria Tamarit: Falta el el superventas del que habla Paco.
Paco Roca: Una cosa importante sería crear un pasado, rendir un tributo a todos esos autores, como (Miguel) Quesada. Recuperar la memoria, porque si lo hacemos generamos un momento del cómic más respetable.
Núria Tamarit: Ahora parece guay regalar un cómic. Eso es muy importante.