Una cuenta pendiente llamada Teatre Principal

VALÈNCIA. El Teatre Principal de València se ha convertido en uno de los grandes dolores de cabeza del nuevo equipo de gobierno. La sala, propiedad de la Diputació de València y cogestionada con la Conselleria de Cultura –a través del Institut Valencià de Cultura (IVC)- lleva años esperando una rehabilitación que no llega, una cuenta pendiente a la que se suma la reconfiguración del proyecto artístico impulsado por la Conselleria de Cultura. Pero vayamos por partes. Capítulo 1: el continente. “El edificio se encuentra en una situación complicada”. Así lo expresa la diputada delegada de Teatros, Rocío Gil, durante un desayuno informativo en el que puso sobre la mesa la necesidad de poner en marcha los trabajos de rehabilitación del inmueble, obras que, hasta el momento, no se han abordado y que se llevarán a cabo por fases, aprovechando los meses de inactividad, para evitar así un cierre “sine die”. 

La obra es millonaria -de hecho, preguntada por la cifra total admite que no está cuantificado- y para acometerla la Diputació se ha marcado como objetivo ampliar la implicación del gobierno autonómico en el teatro que cogestionan. “En los últimos años, la relación o el desarrollo del convenio [para cogestionar el Principal] no ha sido el que esperábamos. Debido a esa situación hemos convocado una reunión mixta con la Conselleria de Cultura. Hay que poner fin a esta situación”. Este encuentro, que se celebrará en las próximas semanas, busca sentar las bases de una nueva relación que redefina las responsabilidades por lo que respecta al mantenimiento e inversiones en el edificio. “De esta reunión tenemos que salir con una partida presupuestaria conjunta”. 

Por su parte, la corporación provincial ha ido haciendo camino y, de hecho, los presupuestos de 2024 contemplan una partida “residual” de 60.000 euros para los trabajos, una cantidad muy inferior a la necesaria pero sujeta a modificaciones a la espera de ver “qué tiene que hacer cada uno”. Con la partida creada, en cualquier caso, queda resolver el cuánto y el quién lo paga para poder poner negro sobre blanco un calendario de actuaciones que, por el momento, no está definido. ¿Podría hacerse alguna actuación aprovechando las vacaciones del próximo verano? Sí, pero, de momento, que se ponga en marcha en 2024 es solo una posibilidad a la espera de la reunión entre Diputació y Conselleria. 

Pero, ¿cuáles son los trabajos que hay que acometer? El desarrollo de las actuaciones viene reflejado en el plan director que desde hace algunos años tiene la Diputació sobre la mesa, un documento que señala también qué trabajos son más urgentes. El informe, que no se ha hecho público, se referiría a cuestiones de accesibilidad o relativas al patio de butacas, y no tanto no estructurales, aunque sí son numerosas y cuantiosas, intervenciones que llevarían al espacio a estar cerrado durante meses. “No estamos poniendo en riesgo la seguridad de nadie que vaya al Teatro Principal, hablamos de modernización y actualizaciones que poco a poco se debe ir acometiendo”.   

Dos instituciones, ¿un proyecto artístico?

Las cuentas pendientes no son solo por lo que respecta al continente, también por el contenido. Primero, hagamos una fotografía del presente. Por parte de la Conselleria de Cultura, es el director adjunto de artes escénicas del Institut Valencià de Cultura el encargado de diseñar la programación para el teatro, un cargo hasta ahora ocupado por Roberto García. El dramaturgo asumió el puesto en 2017, un puesto que estos días ha dejado tras la decisión del nuevo gobierno de cesar a los tres directores adjuntos del IVC, a los que el conseller Vicente Barrera acusó de politizar la programación durante estos años. Está en marcha el proceso de selección para ocupar las plazas, una renovación de caras que dará pie a una nueva etapa sobre la que todavía hay pocas pistas con respecto a la ambición cultural para el organismo. 

En estos meses, de hecho, tan solo se ha señalado la intención de ampliar su presencia en el ámbito nacional y de potenciar la programación de teatro clásico español y valenciano, tal y como señaló el director general de Cultura, Sergio Arlandis, durante la presentación de la programación del Principal del presente curso, la última de García. Poco más se sabe del proyecto de la Generalitat para los teatros públicos. Cabe recordar que actualmente el Teatre Principal rige su programación a través de un calendario por el que se reparten las semanas entre el área de Teatros de la Diputació, con el Escalante al frente, y el IVC, una programación que convive sobre las mismas tablas pero que, aparentemente, está falta de comunicación. De hecho, incluso desde el punto de vista mediático, se presentan de manera independiente. Dos proyectos, un espacio. 

“La idea es que exista una programación conjunta. Lo importante es dejar esas diferencias, que parece ser que existían hasta ahora, para que exista una programación del Principal. En eso vamos a trabajar”, expresó la diputada, quien subrayó hasta en dos ocasiones la necesidad de impulsar una programación “coordinada y coherente”. ¿No la había hasta ahora? “Yo creo que no”. Si bien el director general del IVC, Abel Guarinos, se mantiene en el cargo, su proyecto por lo que respecta a escénicas parece estar sujeto a las nuevas directrices de Conselleria y a la llegada del nuevo director adjunto, con quien la Diputació de València espera coordinar una propuesta artística que se presente como una. Esto se hará, explicó Gil, con un aumento de la interlocución, de las reuniones entre una administración y otra, con las que pretende caminar hacia un Principal común.