VALÈNCIA (VP/EP). La nueva temporada expositiva del Centre Cultural La Nau de la Universitat de València arranca este jueves con el proyecto de Pedro G. RomeroHabitación. El Archivo F.X., las Chekas psicotécnicas de Alphonse Laurencic y la función del arte, una muestra que presenta elementos de arte y diseño modernos que sirvieron como herramienta de "tortura psicotécnica" durante la Guerra Civil Española y que invita a reflexionar sobre el "uso perverso" que se puede llegar a hacer con la creación. Así lo ha manifestado el artista durante la presentación de la exposición, junto a los comisarios Ángel Calvo Ulloa y Nuria Enguita, y el vicerrector de Cultura de la Universitat de València, Antonio Ariño.
La exposición presenta los trabajos en torno a las chekas realizadas por el Archivo F.X, -un proyecto en el que Pedro. G Romero (Aracena, Huelva, 1964) trabaja desde 1999-, sobre la iconoclastia, profanación y blasfemia en relación a las prácticas radicales del arte y la estética moderna y contemporánea. El núcleo central es así la reconstrucción a escala real de tres de las chekas psicotécnicas de Barcelona y Valencia, y a su alrededor hay todo tipo de trabajos documentales, fotografías, filmes, piezas de arte, fondo bibliográfico y diseños arquitectónicos.
Las chekas -con K y no con C, "para singularizar estas construcciones frente al mito de la checa, centros de detención ilegal que proliferaron durante la Guerra Civil en uno y otro bando"- fueron diseñadas por Alfonso Laurencic en el convento de Santa Úrsula de Valencia y en las iglesias de las calles Vallmajor y Zaragoza de Barcelona entre 1937 y 1939. Estas construcciones utilizaban elementos del arte moderno, especialmente de los años Bauhaus de Wassily Kandinsky, para realizar torturas, llamadas psicotécnicas, sobre los penados.
Más allá de su eficacia, Pedro G. Romero quiere llamar la atención sobre "la paradoja de cómo el arte moderno, que se presentaba como herramienta para ensanchar la conciencia y emanciparnos, sirve sin embargo como elementos punitivos y de sujeción". El artista ha instado así a estar "alerta" sobre el uso que se le da a las cosas en general y al arte en particular.
Junto a Romero colaboran los artistas Lola Lasurt, Patricia Gómez, María Jesús González y Álvaro Perdices, a quienes ha agradecido su trabajo por aportar "otras visiones" sobre el Archivo FX. En efecto esta obra trabaja sobre las chekas psicotécnicas construidas para el Servicio de Información Militar del Ejército republicano español, entre 1937 y 1939, en templos y conventos incautados a la Iglesia Católica. Los campos de sentido antagonista que operan en el Archivo F.X. se encuentran aquí naturalizados: "estética, conocimiento y violencia dados a la vez como arte experimental y como profanación religiosa", ha explicado Romero.
La muestra se estructura en torno a la reconstrucción de tres chekas psicotécnicas: Décor, de la Iglesia de Vallmajor de Barcelona; Notes on sculpture, del Convento de San Juanistas de la calle Zaragoza, también en Barcelona; y Barracão, en el convento de Santa Úrsula de Valencia.
Décor toma la instalación homónima que el artista belga Marcel Broodthaers realizó en 1975 para el Institute of Contemporary Art de Londres y cuya idea central era "la relación entre guerra y confort". A partir de ella, los textos que acompañan esta entrada, se presentan en relación con fragmentos discursivos dados en torno a la propuesta de Broodthaers. Junto a Notes on Sculpture se presentan una serie de fragmentos que analizan el trabajo y las aportaciones del estadounidense Robert Morris al desarrollo teórico y práctico de la escultura, para relacionarlos con documentos relativos a la construcción de esta cheka. Y Barracão parte de las experiencias de Hélio Oiticica sobre el habitar y sobre sus experiencias de convivencia. Junto con los textos de Oiticica, se reproducen una serie de fragmentos sobre la cheka estableciendo una serie de paralelismos que provocan relaciones y enfrentamientos entre textos y experiencias.
Además, el núcleo del Archivo F.X. incluye otras entradas bajo los títulos Office Baroque, Carl Andre, Centro de Cálculo, Carl Schmitt, Sol LeWitt, School nº6, Pabellón suspendido, Trisha Brown o Suprematistic games, que se relacionan con documentos surgidos a partir de las chekas. Se recopilan también materiales documentales como cerámicas, mezclas musicales, proyecciones cinematográficas y apuntes.
Fotos Roberto Ruiz
Organizada y coproducida por el Centre Cultural La Nau de la UV, el CA2M, Centro de Arte Dos de Mayo de Madrid y el Museu Nacional d'Art de Catalunya, la muestra propone una revisión de las vanguardias a partir de la radicalización estética que supusieron, vinculada a la radicalización política. Imágenes y obras constituyen un testimonio y una elegía sobre la iconoclastia política acaecida en el Estado español abriéndolas al debate crítico.
"A través de una experiencia histórica concreta, recupera la memoria" para reflexionar sobre el uso del arte en la tortura y la "ambivalencia" de la cultura y la modernidad. "¿A quién sirve la cultura?. La respuesta: a todos los amos", ha apuntado Antonio Ariño.
De Paula a Bonet a Ana Juan, las ilustradoras tejen la próxima temporada
Entre los grandes proyectos para este trimestre, el responsable de exposiciones del vicerrectorado de Cultura, Norberto Piqueras, ha avanzado que para el 19 de octubre La Nau contará con Ocultes i il·lustrades, un proyecto que reúne los trabajos de 35 ilustradoras de la Comunitat Valenciana como Paula Bonet o Ana Juan, entre otras. La muestra, comisariada por Cristina Chumillas, MacDiego y Melanie Lleonart, reconoce el éxito de las ilustradoras más actuales, al tiempo que rescata el papel de generaciones anteriores.
Con motivo del 70 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el 28 de noviembre La Nau acogerá una exposición sobre El diseño valenciano por la defensa de los derechos humanos organizada por Amnistía Internacional y el Vicerrectorado de Cultura y Deporte de la UV, con Boke Bazán como comisario. La muestra presentará el trabajo de 30 diseñadores y diseñadoras valencianos a partir del articulado de la Declaración de los Derechos Humanos.
Y ya cerca de la Navidad, por el 250 aniversario de la creación de la Academia de Bellas Artes de San Carlos, -cuya primera sede estuvo ubicada en el Centre Cultural La Nau, ha recordado Piqueras-, habrá una exposición conmemorativa con obras de académicos y académicas que han formado parte de la institución a lo largo de sus más de dos siglos de vida. El presidente y vicepresidente de la Academia, Manuel Muñoz y Román de la Calle, ejercen comisarian la muestra.
Fotos: La Nau
