La casa de Miri —dicho para que suene como aquí— es justamente eso, una casa de comida afgana, una taberna que es casa, como si nuestros vecinos nos ofrecieran sus mejores platos.
Najib Miri se marchó a pie y obligado de Kabul en 2008 sin imaginar que 8.000 mil kilómetros después abriría un restaurante en València, ni siquiera lo imaginaba mientras estuvo trabajando en varios restaurantes de comida italiana en Roma antes de llegar a nuestra ciudad en 2019.
Cuando la idea de abrir un restaurante afgano empezó a tomar forma en la cabeza de Najib, tuvo clara una cosa: que ofrecería un kebab de calidad. A Najib le encanta el kebab. Para ello realizó un recorrido por numerosos establecimientos de València, “puede que exista algún lugar bueno, pero yo no lo encontré”, dice. Y Ca Miri es eso, kebab y comida casera afgana. Lo de “casera” cumple a rajatabla su significado: la cocina que su madre preparaba en casa es la que él cocina ahora.
La carta contiene siete u ocho platos fijos. Destacan el kebab de pollo, la espada de ternera y el falafel. El listón está muy alto, porque cocinar bien lo sencillo es complicado y Najib lo consigue.
Para los amantes de la carne, la espada de ternera es simplemente espectacular. Sí, se hace a la plancha con una espada, y se sirve acompañada de salsa de yogur casera, pepino, tomate, cebolla morada y lechuga… Tiene el sabor de los kebabs en nuestros sueños. Para quienes aman lo veggie, está el falafel. Todos sabemos lo que es un falafel, pero este puede que sea el mejor que vayamos a probar en València, y con una textura crocante de esas que te preguntas, ¿cómo lo consigue?
Y más ejemplos de recetas afganas elaboradas por Najim: el kufta (albóndigas caseras de ternera, con salsa y especias), y el bolon (empanadas caseras rellenas de patata, acompañada, generalmente, por salsa picante).
Al final, se puede decir que cualquiera de estos platos tiene todas las papeletas para convertirse en imprescindible.
Mi recomendación es que vayan (sin dudarlo) y pidan uno de cada. Por los sabores, por lo a gusto que estarán, porque Najib (y Mish) son encantadores.
La puerta de la casa afgana de Najib, donde cocinaba su madre, está abierta.
Ca Miri l’afganes
c/Músico Hipólito Martínez, 8 (Benimaclet)
Abre de lunes a sábado, de 19h a 1 h.