El próximo viernes 22 de diciembre los Califato invaden el IVAM con un DJ set para amenizar la noche más larga del año, una sesión de electrónica popular enraizada para no dejar de bailar ni un segundo
VALÈNCIA. Hay DJs que no conocen límites, en su mesa de mezclas podrían mezclar el contenido de cualquier iPod adolescente con Rosalía o hasta con melodías barrocas. Artistas que no temen a las caras raras, que son inmunes a los molestos oyentes que piden un cambio de canción y que están muy seguros de lo que hacen. El IVAM acoge a una pareja que sigue un poco esta filosofía: Loren y Sergio, mejor conocidos como los Califato, que el próximo viernes 22 de diciembre proponen un viaje musical inolvidable en el que será uno de sus últimos DJ sets antes de centrarse de pleno en su gira. En este compartirán temas que van desde el folklore y el rumbeo hasta el mundo de la electrónica, jugando con remixes y edits del “universo clubero y breakbetero” que tanto les caracteriza. A su vez aprovechan la calidad de dúo para repartir las ideas y el talento, en un set que Loren asegura que traerá muchas sorpresas y en el que llevarán “algún cacharrito para hacerlo todo más divertido”.
“A nosotros nos cabe todo, nos gusta escarbar entre las profundidades de la música que ya tenemos por aquí y con cosas que son entre cachondas y serias”, explica Loren, “nos encanta la música de club, somos DJs de los de toda la vida y sabemos responder muy bien a la gente que tiene muchas ganas de fiesta y ganas de baile”. Aunque realmente nada que ver con los Djs “de toda la vida”, más allá del concepto de la mezcla musical, lo que proponen es hacer música de club incluyendo todo tipo de elementos de lo más peculiares como pueden ser “sus ramalazos árabes y califales” que según Sergio les dan la nota: “Es nuestra manera de hacer remixes, en nuestras secciones nunca faltan los cuartos de tono árabe. Esto hace que la gente se quede muy loca al principio pero luego lo disfrutan mucho y se quedan bailando, es la magia de esa mezcla de todo lo que hacemos”.
En su mesa de mezclas cabe “música para todas las horas del día” en la que combinan lo bailable con lo electrónico y lo experimental para crear una nueva experiencia dentro del museo, una de “electrónica popular enraizada” y que para Loren refleja la que es su generación: “Creo que “nos enraíza” esta idea de salir y escuchar música, ya sea por la noche o durante los amaneceres. También trabajamos con nuestro ambiente folclórico que en Andalucía es bastante efectivo y lo que hacemos es muy parecido a lo que se puede vivir en un club”. Con todo ello preparan un set en el que se pueden colar todo tipo de sonidos, y que está preparado para retumbar en las cuatro paredes blancas del museo, donde esperan que esta música se combine con las muestras que se pueden ver en el IVAM.
A pesar de que cada uno es “de su padre y de su madre” Sergio confiesa que la clave es ponerse de acuerdo en las cosas que se les van ocurriendo y con elementos con los que abarcan muchos estilos. Ahora les quedan por explorar los espacios abiertos en los que desarrollar esto, aunque ya han conseguido hacerse con el museo buscan colarse en algo “más exterior” de cara a su siguiente gira, la innovación les va más en el dónde y el cuándo, ya que la música la tienen controlada: “Vamos disparados como un cohete a por lo siguiente”, añaden, aunque en este DJ set ya se podrá ver el trabajo de su siguiente disco, confiesa Sergio, “lo mismo ponemos una rumba portuguesa que algo más de folklore, pero pase lo que pase la gente se queda bailando”; y ese al final es el efecto clave de los Califato: generar un viaje musical en el museo en el que nadie pueda soportar la energía de estarse quieto, como pasaría ante una obra.