VALÈNCIA (VP/EP). El Centre del Carme se ha adelantado a las comisiones de la ciudad y ya ha 'plantado' el primer monumento fallero de la ciudad. Se trata de la escultura-falla 'Los Desastres de la Guerra. Caballo de Troya', una obra del artista Daniel García Andújar que busca "modernizar" la línea que habitualmente siguen las fallas a través de un "lenguaje contemporáneo". Así lo han anunciado este viernes a los pies de esta falla-instalación el director del Consorci de Museus, José Luis Pérez Pont, junto al creador alicantino Daniel García Andújar y el artista fallero Manolo Martín, que ha colaborado en la elaboración de esta obra.
'Los Desastres de la Guerra' ha viajado desde la Documenta de Kassel (Alemania) al Centre del Carme, donde permanecerá hasta el 9 de abril, con una reflexión sobre "el arte que se salvó de las llamas". Así, el artista alicantino dedica un homenaje a la Junta del Tesoro Artístico que en la Guerra Civil rescató el patrimonio artístico español depositándolo en gran parte en València. El Centre del Carme "desarrolla y amplía" este proyecto para València, donde se gestó, "tejiendo nuevas redes entre el arte más actual y la tradición fallera". La pieza 'Los Desastres de la Guerra' sobre "el valor y el respeto por nuestro patrimonio", es un anticipo a la exposición 'Sistema Operativo' que ofrecerá el artista en el Centre del Carme el próximo mes de octubre.
El proyecto fue una propuesta visual contra todo tipo de violencia y una actualización de la representación de "la guerra como conflicto socio-político y económico, pero también de dominación cultural". Este "anti-monumento" fue quemado cerca de la medianoche durante el solsticio del 23 de junio de 2017 en un parque público de la ciudad de Kassel como parte del evento de documenta14 Burning the Canon. El artista, junto al taller de Manolo Martín, ha vuelto a reconstruir el conjunto escultórico añadiendo algunos elementos que hacen alusión directamente al contexto de València.
El evento de Kassel era conmemorativo de los juegos de guerra nocturnos realizados durante el Heldengedenktag, la conmemoración nacional-socialista del día de los veteranos de guerra del 4 de Junio de 1939. Una "significativa exaltación nazi" a la guerra con presencia en Kassel de la plana mayor del nazismo, incluyendo a Adolf Hitler y "aliados fascistas" como Queipo de Llano, en representación de Franco, o el General Rossi, en representación de la Italia de Mussolini.
En esta ocasión, el proyecto quiere rendir un tributo a la memoria de los miembros de la Junta del Tesoro Artístico durante la Guerra Civil y a sus colaboradores, quienes desempeñaron un papel relevante en el salvamento del Tesoro Artístico español. Según ha explicado García Andújar, "su dedicación preservó gran parte de nuestro patrimonio de los bombardeos y los desastres de la guerra. Muchos de estos tesoros fueron trasladados a València, a los depósitos habilitados para las obras en las Torres de Serranos y en el Colegio del Patriarca". Así, en torno a este "anti-monumento", el artista exhibe algunas fotografías procedentes del Archivo Nacional que conectan la pieza con el momento histórico, además de reproducir a tamaño real dos de los cuadros más representativos de ese Tesoro Artístico como son 'El 3 de mayo' de Francisco de Goya, quien da título también al proyecto con su serie de grabados sobre los 'Desastres de la Guerra' y 'Las meninas' de Velázquez.
El artista alicantino ha destacado que el proyecto sobre los desastres de la Guerra "conecta por un lado con la idea de emergencia -la creación del Junta del Tesoro Artístico donde se reunieron historiadores de todos los colores para salvar el patrimonio- y por otro propone una reflexión sobre el canon artístico, porque se hacía necesario configurar una jerarquía en las piezas a rescatar". "Un hecho histórico donde tienen también su origen de los protocolos de la logística del arte que hasta el momento no existían", ha explicado Pérez Pont. Además, según Andújar, "hay una teoría que defiende que todo aquel que ha intentado cambiar el canon artístico a lo largo de la historia es porque quería imponer el suyo, como pasó con el arte fascista".
"Sería inviable llevarlo a una comisión"
El director del Consorci de Museus ha afirmado que esta obra emplea "lenguajes contemporáneos" en el mundo fallero y logra, de este modo, "modernizar el lenguaje de las fallas", con lo que significa "una herramienta para trasladar contenidos más allá de la crítica superficial a la sociedad".
Ante la cuestión de si el mundo de las fallas ha perdido parte de la crítica que tradicionalmente había ido ligada a los monumentos, el artista fallero Manolo Martín ha opinado que esta obra "sería inviable llevarla a una comisión y que la premiaran" porque, ha bromeado, "nos dirían que no está acabada", dado el aspecto que presenta el monumento.