La centenaria entidad de reinventa con salas audiovisuales a la espera de que en septiembre se resuelva su litigio con Bankia
VALENCIA. El Círculo de Bellas Artes de Valencia anunció ayer uno de los cambios más significativos que ha llevado a cabo la entidad en sus más de cien años de vida. Un plan de reactivación y actualización de su programación que, además, contempla la creación de dos salas audiovisuales. Estas medidas suponen el último intento de la nueva dirección para reactivar el Círculo, inmerso en una crisis financiera que amenaza con su desaparición. Habrá que esperar a septiembre para responder a la pregunta sobre si ha sido o no demasiado tarde, pues será en algo más de seis meses cuando se resuelva el litigio que mantienen con Bankia.
El Círculo tiene una deuda aproximada de 1,5 millones de euros que recae sustancialmente en el edificio hipotecado de su sede, a la que no pueden hacer frente ante la imposibilidad de recibir subvenciones mientras estén pendientes las deudas con la Seguridad Social e IBI. Es por ello que su presidente, Gerardo Stübing, ha mantenido encuentros con el Ayuntamiento de Valencia y la Conselleria de Cultura. Aunque citas "cordiales" no ocultó su "decepción", pues demanda la implación de los actores políticos para frenar su estado "catatónico".
Lo que plantea la entidad es la cancelación de las deudas institucionales que impiden acceder a subvenciones y la cesión de un espacio de propiedad pública para que se puedan trasladar una vez de ejecute la hipoteca o se venda su histórica sede, ubicada en la calle Cadirers. Sobre el futuro del inmueble el presidente lamentó que desconocen "cuál será el resultado", ya que la resolución de la hipoteca "sería por subasta y algún fondo buitre podría hacerse con el edificio y el patrimonio". "Tendremos que ir a vender los más de 200 cuadros que tenemos a la plaza del Ayuntamiento", ironizó.
"La culpa es de quien manda pero también de los artistas, ¿dónde están los valencianos de Ruzafa y Tapinería?", afirmó Nassio Bayarri, vicepresidente de la institución, que afeó que "en Valencia creemos que el arte no es necesario para vivir pero estamos equivocados". Tras criticar el "desierto mental" de la sociedad valenciana respecto al arte, el vicepresidente insistió en la "falta de consideración" a los artistas y las entidades culturales: "Aunque aquí no se le quiera, el escultor Santiago Calatrava es un genio".
El pasado mes de diciembre Stübing, artista plástico y profesor de Botánica en la Universidad de Valencia, se puso al frente de la entidad con el objetivo de enderezar un rumbo perdido en los últimos años, sin embargo, la respuesta a corto plazo no ha sido la que esperaban. "Decepcionados" con la llamada, en este tiempo sólo han conseguido aumentar en ocho el número de socios, que ronda los dos centenares, de los cuales cuatro han fallecido. La edad media es de 60 años.
Descartada la reconversión en hotel, dado que el actual emplazamiento del organismo solo puede usarse con fines culturales por sus condiciones de explotación, la directiva incidió en que "hay compradores con intereses firmes, pero si no se negocian las condiciones de salida no podemos vender".
A pesar de la delicada situación financiera, desde la junta directiva no han querido esperar un minuto a iniciar el proceso de actualización de la entidad, que pasa por potenciar colaboraciones, crear nuevos espacios y ampliar su programación. En este sentido, se ha anunciado la colaboración con el Patronato Martínez Guerricabeitia en la realización de un homenaje a Michavila, con la entrega de la medalla de oro del Círculo y la realización de una mesa redonda el próximo 23 de abril.
También se plantea la cesión de espacios para las actividades de asociaciones como Clave, de críticos literarios; Culturarte, que realizarán tertulias artísticas; la integración en el circuito de Valencia Ciutat Oberta o la creación del Premio de pintura Círculo de Bellas Artes. En esta nueva etapa que arranca se abrirá al público dos nuevos espacios que hermanarán a la institución con las nuevas tecnologías: 'Espaillum' y 'Espaiimatge'. En el primero, situado en el sótano de la sede, la luz será usada en tanto que elemento de creación; el segundo, por su parte, estará dedicado íntegramente a producciones audiovisuales actuales.
En marzo se inaugurará la exposición 'Retraro contra retrato', un diálogo colectivo donde el siglo XIX se enfrentará a los creadores del XX y XXI. El objetivo de la institución es reconvertirse en un espacio cultural con una mayor integración en el entramado sociocultural de la ciudad que, respetando y manteniendo las actividades tradicionales como talleres o subastas, potencie nuevas iniciativas. De esta forma, también se plantean conceder premios en el ámbito fallero, a la mejor falla tradicional e innovadora.
El Círculo de Bellas Artes de Valencia es una entidad cultural privada sin ánimo de lucro, creada por un grupo de artistas en 1893 con el objetivo principal de dinamizar la vida cultural y artística de la ciudad a través de sus múltiples actividades. Actualmente atesora una colección de una 200 obras de arte firmadas por Sorolla, Pinazo, Benlliure o Tuset.
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