Tras la sonada dimisión de Nuria Enguita, que enfrentó a la institución con los sectores profesionales, o el reciente cierre de su sede en Alcoy se suma la suspensión del concurso de director artístico por un recurso
VALÈNCIA. El Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) eterniza un periodo de transición que, ya sin ambages, se puede calificar de crisis. Fue hace apenas unas semanas cuando se puso en marcha el proceso de selección del nuevo director artístico, tras la sonada dimisión de Nuria Enguita, un concurso que parecía dirigir al centro cultural a la esperada calma tras los meses de revuelo. Sin embargo, la polémica persigue al centro y ha sido el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) el que ha acordado la suspensión del concurso tras recibir una denuncia por supuestas irregularidades en el proceso.
La Sala ha acordado la medida cautelarísima de suspensión de la resolución por la que se daba publicidad a las bases, firmada por el entonces vicepresidente primero y conseller de Cultura, Vicente Barrera, cartera que desde la salida del gobierno autonómico de Vox asume dentro de Educación el conseller José Antonio Rovira. El TSJCV no entra a valorar el fondo del asunto, sino que adopta una cautelar por la inmediatez en la ejecución y para evitar los perjuicios derivados de su no adopción, debido a que el plazo de presentación de candidaturas es de veinte días, lo que abarcaría parte del mes de agosto, que es hábil en vía administrativa pero no en el orden jurisdiccional contencioso-administrativo.
Este nuevo revés complica las cosas para un museo que en los últimos meses ha sido uno de los focos de la polémica, aunque no el único, desde que Vox asumiera la Conselleria de Cultura. Fue el pasado mes de febrero cuando Nuria Enguita anunció su dimisión al frente del IVAM ante la falta de "apoyo", tal y como expresó ella misma, de la Generalitat ante las críticas y posterior remisión a Fiscalía sobre su proceso de selección, cuestión que en apenas unas semanas fue archivada. Su salida no solo dejaba al museo sin líder sino también con una imagen tocada, siendo cuestionado por los sectores profesionales de todo el país, lo que no deja el mejor escenario para atraer talento al concurso de dirección.
Cabe recordar que un buen número de asociaciones profesionales se posicionaron contra la gestión de la Generalitat Valenciana y en apoyo a Enguita, que actualmente dirige el museo de arte contemporáneo MAC/CCB de Lisboa alejada de la polémica. Entre las reacciones, destaca el duro comunicado que emitió la Asociación Directoras y Directores de Arte Contemporáneo de España (ADACE), un texto en el que exigían una “disculpa pública” por parte de la Generalitat a la exdirectora y al jurado que la eligió. Este telón de fondo ha marcado, sin duda, un proceso de selección que ahora se complica más si cabe con la suspensión cautelar ordenada por el TSJCV. Por lo pronto, en el plano de lo urgente, desde Cultura explican que los servicios jurídicos están analizando el recurso presentado para estudiar la presentación de alegaciones, para lo que tienen un plazo de tres días.
Y, entre una cosa y otra, ¿qué pasa en el museo? Tras meses de vacío y un proceso de selección también complejo, con una primera convocatoria que quedó desierta, el pasado mes de marzo se ocupó finalmente el puesto de gerente con la selección de María Ayuso para el cargo, lo que garantiza que la institución funcione -o haya vuelto a funcionar- con normalidad desde el punto de vista administrativo. En el plano artístico, la cosa marcha con una mirada más a corto plazo a la espera de un proyecto de futuro. Es por el momento Sonia Martínez, directora adjunta del museo, quien ha tomado las riendas del centro cultural, asumiendo su representación, aunque no deja de ser una circunstancia puntual.
Cabe recordar que la programación del presente curso ya había sido diseñada por Enguita y su equipo, de hecho se presentó a finales de 2023, antes de su dimisión, con lo que su salida del museo no ha frenado la programación prevista salvo, de momento, en un caso, el de la exposición Escena II, comisariada precisamente por Sonia Martínez y Nuria Enguita, que se ha suspendido sin fecha y ha sido sustituida por la muestra Un contínuum común indefinidamente liso. Proyecciones sobre la contemporaneidad en la colección del IVAM, que se vio entre 2022 y 2023 en la sede de Alcoy.
El resto de propuestas se mantienen tal y como habían sido diseñadas, aunque con un reloj que continúa avanzando y agotando las propuestas confeccionadas durante la etapa de Nuria Enguita, unas propuestas que, aunque van más allá de 2024, no son infinitas. En este sentido, y pese al funcionamiento de los trabajadores del centro para sacar adelante la programación, lo cierto es que la gran incógnita sobre el futuro del IVAM, una de las principales instituciones artísticas de la Comunitat, no se resolverá hasta la selección de un nuevo director artístico y, con su llegada, el despliegue de un proyecto que marcará las líneas a seguir, unas líneas todavía por dibujar.
Pero no es este el único dolor de cabeza del museo. Nadie sabe nada. Este es el resumen que se podría hacer del futuro de la subsede proyectada hace años para IVAM, cuya apertura estaba prevista en un primer momento para el año 2023 y que hoy no está claro siquiera si se va a poner en marcha. Fue en noviembre de 2020 cuando se anunció la nueva sede del museo, que se levantaría en una de las naves del Parque Central, transformada en un “grandísimo espacio expositivo y de agitación cultural”, subrayó el entonces conseller de Cultura, Vicent Marzà. La maquinaria se puso en marcha y, con el objetivo de abrir sus puertas en 2023, el Ayuntamiento de València cedió el espacio a la Generalitat, con carácter gratuito y por un plazo de 75 años, para su conversión en museo.
Años después del anuncio, y más allá de la cesión, hay pocas novedades al respecto. Ni se ha convertido en subsede del IVAM ni se ha llevado a cabo ninguno de los trabajos de adecuación previstos en la nave. Tampoco en este año la Conselleria de Cultura ha llegado a aclarar cuál era su plan para el IVAM a este respecto.“Habrá que ponerlo en marcha, pero las cosas de palacio van despacio. Nos hemos encontrado con una situación económica calamitosa”, declaró en noviembre Vicente Barrera, en una entrevista con Culturplaza. Desde entonces, ninguna novedad.
Cabe recordar, además, que las bases para el proceso de selección del nuevo director artístico del museo no hacen ni una mención a la subsede. Esto es especialmente relevante si se tiene en cuenta que en el proceso que dio la dirección a Nuria Enguita en 2020 se especificaba que los aspirantes debían diseñar un proyecto para un “nuevo espacio” independiente de la sede central en Guillem de Castro, un espacio con un concepto expositivo “más próximo a un espacio del siglo XXI” y que completaría la oferta del museo.
A esta cuestión, además, se suma la reciente clausura de su sede el Alcoy -que comparte con la Fundación Mediterráneo y el Ayuntamiento de la localidad- tras un fallo en el sistema de climatización del edificio, que ha obligado a retirar las obras de arte de Josep Renau allí expuestas para evitar daños, "hasta que se garanticen las condiciones ambientales adecuadas de la sala, ante la falta de soluciones por parte del Ayuntamiento de Alcoy, que es el encargado del mantenimiento de esta sala”, expresaron desde la Generalitat. Con todo, por el momento no hay fecha para la reapertura del espacio y el regreso de las exposiciones del IVAM a Alcoy.