VALÈNCIA. Históricamente el franco suizo (CHF) ha sido uno de los activos refugio por excelencia por tratarse de un país que ha llevado la bandera de la neutralidad en los conflictos bélicos. La divisa helvética se ha reforzado en tiempos turbulentos, tal y como lo viene haciendo en los últimos meses. Basta ver el primer gráfico de YahooFinance para observar como sube más del 6% frente al euro en lo que va de año. Y no solo eso sino que el pasado 23 de agosto establecía una nueva plusmarca histórica al fijar un cambio de 1,043 unidades.
Todo ello pese a que el Swiss National Bank (SNB) o banco central suizo mantiene los tipos de interés en negativo. Concretamente en el -0,25% tras la fuerte subida de medio punto porcentual del 17 de junio del año en curso. Idéntica cuantía elevó el Banco Central Europeo (BCE) la tasa de depósito un mes después, pero, eso sí, hasta dejarlas en el 0%... Y mañana jueves como mínimo endurecerá el precio oficial del dinero en la Eurozona en otro 0,50% para tratar de seguir combatiendo a una inflación disparada.
La pujanza del CHF está impactando directamente sobre no pocas empresas suizas. Y ahí está el caso de Stadler Rail (SRAIL), que el pasado año presentó los mejores resultados desde que lleva cotizando en bolsa (abril 2019) como contó este diario. Pues bien, el vigor de la moneda helvética provocó que el fabricante ferroviario redujera su beneficio semestral en casi un 91%, al pasar de los 27 millones de euros al cambio a casi 2,5 millones.
Pinchar aquí para ver más grande el gráfico del franco suizo/euro (Fuente: YahooFinance)
Tal y como reconoce SRAIL en la nota de prensa, "el resultado del grupo se vio afectado negativamente, en particular, por nuevas pérdidas de tipo de cambio en el resultado financiero". Concretamente los efectos cambiarios, que procedieron principalmente de los pedidos procesados en Suiza y facturados en moneda extranjera, ascendieron a 32,1 millones de francos suizos (casi 33 millones de euros) frente a los 12 millones de francos suizos del mismo periodo del año anterior (12,32 millones de euros).
La firma advierte que "se debieron principalmente a los efectos de valoración a la fecha de presentación asociados con la fuerte apreciación del franco suizo, tras la subida de los tipos de interés poco antes de los estados financieros semestrales, especialmente frente al euro". Sin embargo, la empresa fundada por Ernst Stadler en 1942 presentó un crecimiento de igual tamaño (+91,3%) en lo que a entrada de pedidos se refiere, que ascendieron hasta los 6.135 millones. De este modo, el total de pedidos que tiene en cartera alcanza los 22.310 millones en lo que es una nueva plusmarca histórica.
"Me complace decir que hemos tenido una fuerte entrada de pedidos en la primera mitad de 2022, a pesar de las condiciones económicas extremadamente desafiantes con una combinación de inflación, problemas en la cadena de suministro, distorsiones monetarias y tensiones geopolíticas. En los últimos dos años, hemos hecho nuestra tarea fijando el rumbo para un desarrollo corporativo exitoso con una mayor rentabilidad", comenta Peter Spuhler, presidente ejecutivo en la nota de prensa remitida por la multinacional.
Principales magnitudes de la cuenta de resultados (Fuente: Stadler)
El grupo verá incrementada su cartera tras haber ganado su primera licitación de metro en Taiwán, es decir, entrar por primera vez en dicho segmento en el mercado metropolitano asiático. Lo ha hecho a través de un consorcio formado por la firma singapurense ST Engineering, la alemana Siemens Mobility y la propia helvética. De momento cuenta con un pedido de 25 trenes totalmente automáticos, que saldrán de su factoría alemana de St. Margrethen.
SRAIL también presentó números ascendentes en lo que a ingresos se refiere, dado que crecieron casi un 4% hasta los 1.511 millones de euros al cambio; así como el resultado bruto de explotación o Ebitda, que mejoró en casi un 23% hasta rozar los 121 millones. Para el conjunto del año prevé una entrada de pedidos de unos 7.200 millones. Todo ello siempre que "no haya un mayor deterioro deterioro de las condiciones económicas actuales, que se caracterizan por una combinación de distorsiones monetarias e inflación, con aumento de los precios de los salarios y materiales, así como tensiones geopolíticas".
"Sigo convencido de que se puede lograr un margen EBIT de entre el 8% y el 9% en condiciones económicas estables. Gracias a nuestro enfoque estratégico, cartera de productos innovadores y orientados al cliente y el excelente número de pedidos seguimos siendo ambiciosos", añade Spuhler. Además aferrándose a su política de dividendos que pasa por un 'pay out' -porcentaje del beneficio que se utiliza para remunerar a los accionistas- de cerca del 60%.
Mientras tanto, el gigante mundial en la fabricación ferroviaria ha anunciado que a partir del próximo uno de enero llevará las riendas Markus Bernsteiner, que asumirá el cargo de nuevo consejero delegado y abandonará el de director general adjunto actual. "Tiene todo lo que se necesita para llevar a Stadler al éxito, incluso en estos tiempos de inestabilidad. Se trata de un profesional extremadamente capaz, con un carácter emprendedor y que está preparado para asumir su nuevo cargo", alaba Peter Spuhler la figura del nuevo consejero delegado.
"Tiene muchos años de amplia experiencia profesional en la fabricación de vehículos ferroviarios, en los últimos también inició con éxito el proceso de transformación para optimizar aún más nuestro rendimiento operativo. Estoy convencido de que las habilidades de liderazgo de Markus Bernsteiner -y su amplia experiencia en el sector- nos colocan en la mejor posición posible para abordar con éxito el futuro y aumentar la rentabilidad de la empresa", añadía el presidente.
Sin embargo, el mercado lejos de poner en valor la 'megacartera' de pedidos y el nuevo cambio al frente de la dirección del grupo sigue castigando a SRAIL. De hecho se deja casi una cuarta parte de su valor en lo que va de ejercicio bursátil. Y no solo eso sino que el pasado 22 de agosto marcaba mínimos históricos, tal y como se aprecia en el gráfico superior. Así se explica que su capitalización haya descendido hasta poco más de 3.100 millones de euros al cambio, que aplicado al Ibex 35 vendría a ser lo que vale Fluidra.
Por su parte, la filial española de la compañía, con sede en la localidad valenciana de Albuixech, sigue imparable tanto a nivel de pedidos como en cuanto a sus buenos resultados anuales. Así, cerró 2021 con una facturación de 492,28 millones de euros, un 36% más, y un beneficio de 28,7 millones, también un aumentó del 41% respecto del ejercicio anterior. Como colofón duplicó su cartera de pedidos hasta los 3.343,37 millones de euros, consecuencia del buen pellizco que se adjudicó del 'megacontrato' de Renfe, valorado en 2.726 millones de euros, para la adquisición de 211 nuevos trenes de Cercanías, y del que Stadler Valencia se llevó la fabricación de 59 convoyes por 998 millones de euros.
Un hito que permite a la fábrica aumentar su porfolio y diversificar su negocio en España, ya que hasta el momento se centraba en locomotoras y trenes de transporte urbano e interurbano, como metros y tranvías. Además, la planta prevé crear más de 500 puestos de trabajo directos, así como hasta 4.000 indirectos en la Comunitat.
Un éxito que quieren repetir en Portugal. Para ello, Stadler Valencia ha presentado oferta para la licitación que Comboios de Portugal (CP), homóloga de Renfe en España, ha sacado, por 819 millones de euros, para la adquisición de 62 unidades de Cercanías y otras 55 para los servicios regionales de pasajeros. Una adjudicación a la que se presentaron otras cinco ofertas: la Alstom junto con Bombarier Portugal; la histórica cotizada Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF); Hitachi Rail Italia; la madrileña también cotizada Talgo en consorcio con Siemens; y CRRC Tangshan.
Pero, además, la planta valenciana está a la espera de conocer si recibirá algún pedido del 'megacontrato', que se llevó la matriz por valor de 4.000 millones de euros para la fabricación de 504 trenes para un consorcio de seis operadores alemanes y austriacos. Este pedido establece que la compañía ferroviaria fabricará 246 vehículos Citylink durante los próximos diez años por un volumen aproximado de 1.700 millones de euros, y la opción de adquirir hasta 258 vehículos adicionales.
Se trata de un modelo de trenes desarrollado por ingenieros valencianos en la planta de Albuixech, que se encargará de las labores de ingeniería. Sobre su producción, la compañía todavía no se ha pronunciado, pero hay confianza en el know how valenciano.
Además, este 2022 también lograba un nuevo pedido para el mercado británico. La compañía ha firmado su primer contrato con la empresa de leasing Beacon Rail y el operador ferroviario GBRF para el suministro de 30 locomotoras duales Class 99 y sus correspondientes piezas de repuesto.