VALÈNCIA. La Cabina – Festival Internacional de Mediometrajes de València, con motivo de su décimo aniversario, expondrá una retrospectiva de todos los carteles que han sido imagen del festival desde su primera edición. Gracias a la colaboración del Centre Cultural La Nau de la Universitat de València, la exposición abrirá sus puertas el día 8 de noviembre y estará hasta el 10 de diciembre en la Sala Oberta del Centre Cultural La Nau. En ella podrán verse los trabajos de diseñadores e ilustradores de la talla de Paula Bonet, Carla Fuentes (Littleisdrawing), Luis Demano, Escif, Jorge Lawerta, Julia Valencia, Estudio Menta, Gloria Vilches, Mireia Pérez y Cachete Jack, diseñadoras estas últimas del actual cartel.
La exposición “La Cabina: 10 anys, 10 cartells” albergará los 10 carteles que han sido imagen del festival de mediometrajes y la utilización de esa imagen en los diferentes soportes de comunicación. Además, también podremos ver el proceso por el que los artistas pasaron hasta llegar al resultado final.
Ilustración, diseño, lettering, collage… son algunas de las técnicas empleadas por los artistas que pusieron la imagen a cada una de las ediciones de La Cabina. Mireia Pérez fue la primera ilustradora en realizar el cartel de La Cabina; en su cartel utilizó la cabina de la famosa película de Antonio Mercero que más tarde se convertiría en logotipo del festival. En la segunda edición, Julia Valencia utilizó una imagen en espejo de un hombre mirando a través de una mano que simulaba el objetivo de una cámara. Por su parte, Gloria Vilches empleó el collage e introdujo el reloj en la tercera edición, uno de los elementos más repetidos en posteriores carteles. Al año siguiente, Estudio Menta utilizó el lettering para plasmar la idea de que un mediometraje es “El tiempo justo para atrapar a un asesino”, por ejemplo. Carla Fuentes, en el quinto año de La Cabina, volvió al reloj para transmitir la importancia del tiempo, que define la existencia del mediometraje.
En 2013, Paula Bonet y su Alicia en el País de las Maravillas causó furor entre los seguidores de la artista y el festival: muchos de ellos arrancaban sus carteles en las calles para llevárselos a sus casas. Luis Demano, con su estilo inconfundible, plasmó una cabina-edificio en el que vivían personajes cinematográficos que formaban parte de su imaginario. Con Escif, ya en 2015, llegó el minimalismo y un estilo más conceptual con el poni como metáfora del mediometraje: pequeño en tamaño en comparación a un caballo, pero un animal con entidad propia. Al año siguiente, Lawerta representó su visión particular de La Cabina de Mercero, mostrando a un José Luis López Vázquez feliz de estar encerrado en ella. Este año, en el décimo aniversario de La Cabina, las Cachete Jack han querido homenajear, con una explosión particular de colores, a todos los profesionales que hacen posible que el mundo del cine siga funcionando.
Además, en la exposición de los carteles de La Cabina también estarán expuestos los dos trofeos realizados por Raquel Rodrigo (Arquicostura) que se entregarán, por primera vez en la historia el festival, a los ganadores de los premios al Mejor Mediometraje de Sección Oficial y de Amalgama.
La X edición de La Cabina – Festival Internacional de Mediometrajes de València está organizada por el Vicerectorat de Cultura i Igualtat de la Universitat de València, el Institut Valencià de Cultura, Conselleria de Cultura a través de la Direcció general de Cultura i Patrimoni, el Consorci de Museus de la Generalitat Valenciana y la Direcció General de Política Lingüística i Gestió del Multilingüisme. Cuenta asimismo con la colaboración del Ayuntamiento de València, Palau de la Música y el patrocinio oficial de Cerveza Turia y Caixa Popular.