VALÈNCIA (VP/EP). La sexta edición de VLC Negra ha cerrado sus puertas con un incremento de participación del 23% respecto al año pasado, hasta alcanzar un total de 10.814 asistentes en las 115 actividades que se han celebrado en el certamen. Durante los diez días de festival, la media diaria de espectadores se ha situado en un total de 1.081 personas. En 2017, fueron 8.779 asistentes para una media diaria de 877, según detalla la organización en un comunicado.
Los 26 encuentros con autores son el apartado del programa que más público ha atraído, un total de 4.237 personas para una media por evento de 162 asistentes. El crecimiento con respecto a la pasada edición es del 6% con respecto a la cifra global y del 20% con respecto a la media por evento.
Tanto Benjamin Black como Donna Leon, los cabezas de cartel, consiguieron llenar los auditorios en los que comparecieron. Black, las 344 butacas del salón de actos de la Fundación Bancaixa y Donna Leon, las 380 del Teatre Talía. En este último caso, una cincuentena de personas no pudieron entrar por falta de espacio.
Los once clubes de lectura programados han reunido a 223 lectores en torno a sus autores favoritos, con una media de 20 personas por club, lo que representa un incremento del 65% con respecto a 2017, cuando fueron 135 los asistentes a clubes de lectura.
En cuanto a los votos emitidos para escoger las novelas ganadoras, han sido 4.114 entre las tres categorías: Mejor Novela, Millor Novel.la y Best Novel. En comparación con la edición de 2017, cuando se recibieron 3.984 sufragios, ha habido un crecimiento del 4%.
Un total de 809 personas han asistido a las seis proyecciones del ciclo sobre el cineasta Fritz Lang que se han programado durante los días del festival. Además, otras dos proyecciones están previstas para los días 16 y 17 de mayo. Haciendo una extrapolación atendiendo a la asistencia registrada, la cifra de asistentes con que previsiblemente se cerrará el ciclo es de 1078 personas.
Algo similar ocurre con el teatro y la representación de Un crimen perfecto, ya que solo se han representado cuatro funciones entre el 4 y el 13 de mayo, pero están previstas ocho más hasta final de mes. Se estima que el número final de asistentes se situará en las 1.500 personas (468 durante las primera semana, que es tradicionalmente la que menos público atrae). Además, 175 personas han asistido a las siete proyecciones programadas en diferentes sedes del festival.
Asimismo, un total de 595 alumnos de segundo ciclo de la ESO y de primero de Bachillerato de nueve centros escolares de Valencia y otros municipios han recibido autores en sus clases tras haber leído la novela correspondiente, que se ha introducido como lectura obligatoria en la tercera evaluación.
La participación de los mismos ha sido "sorprendente", según la organización, ya que cada grupo de alumnos ha formulado una media de veinte preguntas por sesión. En algunos centros, un solo grupo ha llegado a formular 35 preguntas en una hora. Se trata de un actividad que el festival quiere potenciar para próximas ediciones.
Por otra parte, 195 niños y adolescentes han participado en los nueve talleres que se han impartido, algunos de ellos concertados y otros con entrada libre.
Este año, cinco salas han programado un total de 28 conciertos, en un circuito musical "muy consolidado". La asistencia se ha cifrado en 2.700 personas, lo que arroja una media de más de un centenar de personas por concierto. En cuanto a los encuentros gastronómicos, las dos ofertas propuestas por el festival han conseguido despachar medio centenar de menús.
El director del festival, Jordi Llobregat, ha mostrado su satisfacción por estos números. "A pesar de todas las dificultades, todas las preocupaciones, nervios y esfuerzo, todo el trabajo de prácticamente un año se ve recompensado por la misma gente a la que dedicamos este festival: los espectadores. Sentimos una enorme felicidad. Cargados de ilusión para empezar a preparar la próxima edición", ha concluido.