VALENCIA. El pasado 2 de abril la página en Facebook Valencia Antigua publicaba la imagen que se reproduce sobre estas líneas. Esta plataforma, la más numerosa en la principal red online sobre cuestiones de patrimonio e historia de la ciudad de Valencia, registraba a partir de ese momento un impacto sin precedentes: más de medio millón de personas (513.267 a la fecha de redacción del artículo) han visto la imagen y ha generado 40.995 reacciones (me gustas, comentarios, etcétera; datos contrastados por este diario).
El hito se encierra dentro de una iniciativa "sin ánimo de lucro, que surgió casi de casualidad" tal y como asegura a Valencia Plaza Carlos Carbellido (en la imagen lateral). No es la primera vez que este diario hace referencia a la página, aunque hace dos años y medio de aquella ocasión, cuando 'la torta de Goerlich en la Plaza del Ayuntamiento' se hizo viral.Sin embargo, los registros no tienen parangón con la capacidad con la que esta iniciativa, "una comunidad" según su creador, es capaz de difundir conocimientos históricos a partir de la fotografía.
Carbellido se dedica al marketing online y, de hecho, recuerda vagamente que fue otra fotografía nostálgica la que precedió a la página. Este consultor, que actualmente maneja una decena de fanpages a través de su propia empresa, no tiene "la menor vinculación con la Historia de la ciudad, además de mi afición a la fotografía y al conocimiento de la ciudad". Y él mismo admite que "lo que funciona en esta página es una experiencia para mí, pero sobre todo sirve para experimentar sin la menor indicación de un cliente. En ese sentido, es interesante poder manejar tal cantidad de impactos".
Esos clientes pertenecen eminentemente a los sectores de la alimentación, el ocio y la salud. "Nunca he hecho ostentación de ser el gestor de la página para captar clientes. Es algo que tengo totalmente separado y que se va a mantener para siempre sin el menor ánimo de lucro". Carbellido asegura que la página se ha convertido en su "afición" y que lo más interesante sucedió hace tiempo, cuando cientos de usuarios anónimos empezaron a enviarle sus propias fotos, auténticos archivos privados nunca antes revelados, al correo que utiliza como contacto ([email protected]).
Él mismo asegura que nunca ha tenido el menor problema frente a derechos protegidos de colecciones y autores: "si publicamos algo es con una consulta previa y las citas correspondientes, si el caso lo requiere". E insiste en que nunca hay detrás un fin comercial.
-Pero, ¿cuáles son los greates hits dentro de la página?
-"Sobre todo, los espacios públicos reconocibles por un mayor número de vecinos. La Plaza del Ayuntamiento, las Torres de Serranos y de Quart serían el top 3".
Precisamente, las Torres de Serranos han acaparado la última de esas atenciones: "no ha habido una imagen con los mismos precedentes y si exploras el detalle, la práctica totalidad de las interacciones son de Valencia ciudad y su área metropolitana. Medio millón de impactos... ¡debe ser prácticamente toda la población de ese área con Facebook!".
La nostalgia es uno de los filones de viralidad más contrastados de internet, algo que no entiende de territorios ni de plataformas. Carbellido, experto en comunicación online, destaca que "la nostalgia en época de crisis es posible que funcione todavía más. Detrás está la idea de que cualquier tiempo pasado fue mejor, sobre todo por la idea de la memoria selectiva y los recuerdos en positivo. Pero el caso de Valencia Antigua no es único. También hay otros como Yo fui a EGB cuyo éxito es paradigmático (más de un millón de seguidores; sus autores han publicado tres libros y lanzado un juego de mesa).
Las estadísticas de la página que Carbellido comparte con este diario hablan de un perfil prácticamente paritario entre sus seguidores, en el que las principales franjas de edad oscilan entre los 25 y los 54 años. "Lo más emocionante que ha sucedido en la página es que alguien se haya reencontrado en una foto. Por mi parte, la satisfacción cotidiana es la de reconocer que hay gente que descubre que la ciudad tenía una muralla árabe, que la Plaza del Ayuntamiento albergó una estación de trenes o cualquier otra curiosidad de la Historia o el urbanismo".
Carbellido apunta a que, además de las zonas céntricas y comunes, "los Poblados Marítimos son posiblemente el barrio con mayor documentación gráfica. Es mucho más complicado encontrar recursos, por ejemplo, de barrios como Benicalap". Él mismo, con sus 67.000 seguidores en el momento de la publicación de este artículo, apunta a otros grupos que rescatan información fotográfica de la ciudad, histórica y patrimonial, como Valencia Antigua Historia Gráfica. Otros, durante los últimos meses, han crecido exponencialmente, como Vora mar, La Valencia marítima, aunque no dedicados en exclusiva a la nostalgia fotográfica.