restorán de la semana

Casa Enrique

Lo peor de Casa Enrique es también lo mejor: no cambia su propuesta así caigan chuzos de punta. Y me parece bien.

| 19/01/2018 | 51 seg

La vida va muy rápido así que es un consuelo que nos queden casas como la de Enrique; aquí el tiempo pasa lento y “lo nuevo” pasa por la puerta sin hacer mucha bulla.

Desde 1987 en Plaça de l’Actor Enrique Rambal, sito en el Blasco Ibáñez más ajeno al ruido universitario y a la altura de esa tierra de nadie que sigue siendo Algirós y la València colindante als poblats marítims

“Cocina de mercado” (del Mercado del Cabanyal) sin muchas pretensiones; Enrique es de los que recuerda tu nombre y los platos que te gustaron en la última visita (vieja escuela) y su casa un refugio ante tanta tontería: tomate valenciano con ventresca, boquerones fritos o ensaladilla “versión Enrique”. Buenos arroces y mi plato favorito: chuletillas con ajos tiernos y patatas fritas.

Qué bien.

Comenta este artículo en
next