VALENCIA (EP/VP). El pasado sábado 25 de junio se cumplió un año desde que la Generalitat cambiase el color de su Gobierno, dos décadas después. Desde entonces no se han dejado de publicar análisis sobre un año de gestión, dividido -como ya apuntara en su día la vicepresidenta del Consell Mónica Oltra-, entre "urgencias y emergencias". En materia cultural, el secretario autonómico del ramo, Albert Girona, volvió a insistir ayer en la presentación de una nueva edición de Sagunt a Escena que "el presupuesto de la Conselleria es el que es". En concreto, y tras el último recorte impuesto por el Ministerio de Hacienda, poco más de 80 millones de euros para personal, infraestructuras y líneas de programación e investigación.
Con todo, hay un rasgo distintivo en este primer año de política cultural por parte del conseller Vicent Marzà y su equipo: apuntalar las grandes marcas de la cultura con los posibles y 'apropiarse' su favor con una intencionada presencia institucional. Quizá el caso más paradigmático haya sido el del Palau de les Arts, icono de la gestión cultural del anterior Gobierno, de la búsqueda por una disciplina poco arraigada pero que se conectaba con la idea de los grandes eventos internacionales, y a la que la nueva Conselleria contestó con el incremento de 2,5 millones de euros de presupuesto para 2016. Han visto incrementada su línea de oxígeno económico -en menor medida, pero sin distinción- el IVAM, la Fira de Teatre d'Alcoi, Cinema Jove o Sagunt a Escena. Y son solo algunos ejemplos.
El último de los casos, el del tradicional festival de teatro clásico (y su rama alternativa), presentó ayer su programación. La inyección ha elevado el festival desde los 150.000 euros para programación de 2015 a los 260.000 de la presente. Un montante en el que es imprescindible poner en valor la reaparición, "décadas más tarde", de la Diputación de Valencia a través de su área de teatros (50.000 euros) o la sufrida pero presente aportación de distintas empresas de la comarca del Camp de Morvedre (12.000 euros directos). A partir de esta estructura, el festival ofrece 16 espectáculos de teatro y danza en el romano y 14 propuestas gratuitas en los tres escenarios urbanos del 'Off Romà'.
52 días del calendario, entre el 21 de julio y el 10 de septiembre, de los que más de la mitad tendrán actividad escénica. La intención: "recuperar el relato del festival", según su director, José Vicente Martínez Luciano. Su llegada al certamen fue una decisión directa desde la Conselleria, sin proceso de concurso internacional y -tal y como se explicó desde la Generalitat a Valencia Plaza- con carácter "temporal, para sacar adelante la edición de este año". El discurso ayer de Girona al respecto no fue distinto, pero sí incluía los matices suficientes como para entender que Martínez Luciano será el principal candidato a continuar al frente de Sagunt a Escena: "lo primero, estamos resolviendo una cuestión de justicia con él [referente a su salida del ámbito de la Administración hace una década]", justificó su reconocimiento en el entramado escénico dentro y fuera de la Comunitat Valenciana y ",sin duda, es una persona que conoce bien todo lo que sucede en el Camp de Morvedre".
Si continúa, exista o no un proceso de selección abierto al que el Código de Buenas Prácticas de la Cultura impulsado por Marzá que Girona asegura "afecta solo a cargos de un nivel superior", el festival tendrá un eje temático en sus sucesivas ediciones. El de Sagunt a Escena 2016 será el de "la mujer independiente del hombre", tal y como lo definió de una manera preclara la actriz Vanessa Cano, portavoz del equipo artístico de certamen. La feminidad y el feminismo impregnan cada una de las ideas para el entretenimiento y la reflexión a lo largo de la programación, que se presentó con la presencia también de la vicepresidenta de la Diputación de Valencia, Mª Josep Amigó; y el alcalde de Sagunt, Quico Fernández.
Este último recordó, dentro del capítulo de apoyos institucionales al certamen, que "todavía falta que el Ministerio de Cultura "gire los ojos hacia Sagunt" para que el certamen consiga una mayor repercusión nacional e internacional y se convierta en "eje teatral en el Mediterráneo". "Habíamos puesto muchísima ilusión en recuperar la aportación del Gobierno, pero después de lo del domingo
-elecciones generales- lamentamos que no será así", añadió Girona.
Así pues, habrá un marcado tono feminista en obras como Reina Juana, que atraerá hasta el festival a la habitual del clásico Concha Velasco. La popular actriz se meterá en el piel de la reina Juana de Castilla, una mujer "destrozada emocionalmente por su rebeldía, desequilibrio afectivo y las contradicciones de una fuerte personalidad" en un personaje que "parece hecho a su medida". Subirá al escenario del Teatro Romano de Sagunt el fin de semana del 12 y 13 de agosto. La pieza tendrá su réplica en el montaje de danza Juana el viernes 29 de julio, que mostrará como la monarca que "pudo ser la mujer más poderosa del mundo" se ve atrapada en una encrucijada de intrigas de poder en una historia de "pasión, dolor, muerte y locura".
También como ejemplo del hilo conductor femenino, Estrella Morente protagonizará el 19 y 20 de agosto el espectáculo La guerra de las mujeres que fusiona flamenco con el clásico griego Lisístrata, una obra que enfrenta a hombres y mujeres en un "mundo al revés" donde las segundas consiguen implantar una huelga sexual. Las propuestas de Velasco y Morente irán acompañadas por un amplia programación con las mujeres como cabezas de cartel: Madre coraje el 24 de julio en una metáfora del "sometimiento de los más débiles", Sónnica y Acteón el fin de semana del 5, 6 y 7 de agosto protagonizada por una prostituta-cortesana de la Grecia clásica, el "grito de libertad" de Las Bacantes el 10 de agosto, una revisión de la tragedia Fedra una semana más tarde que aborda el incesto madre-hijo en un montaje "espectacular", la Medea de Eurípides en forma de danza el 23 de agosto, y Les dones canten a la Mediterrània dos días después a cargo de la cantante Maria del Mar Bonet.
Otra de las obras de corte feminista será La hostalera de Carlo Goldoni protagonizada el 31 de julio por la actriz Vanessa Cano, que ha destacado que se trata de una propuesta "inédita y simbólica" al poner a una criada al frente de "las ganas de continuar la lucha feminista" contra los estamentos del siglo XVIII. Se trata de una pieza en clave de comedia que "aunque puede sonar muy político, mira con una sonrisa a la vida de una mujer en contra del abuso sexual" que asegura que "jamás estará por debajo de los hombres", ha resaltado la intérprete, que cree que esta reivindicación "hoy sigue siendo muy necesaria".
Ya se puede consultar la programación completa en la web del festival. Las entradas del festival también pueden adquirirse hasta el 28 de julio, anticipadas una semana antes, tanto en el Ayuntamiento de Sagunto como en los teatros Rialto y Principal de Valencia
Por su parte, el director del certamen ha destacado que en su XXXIII edición volverá a fusionar "dos conceptos de teatro" en el foro romano saguntino y la programación 'Off-Romà', que ofrecerá 14 espectáculos en la calle gratuitos y dirigidos a un público familiar en el castillo del municipio, frente al centro cívico del puerto y en la glorieta del Ayuntamiento.
Esta sección paralela se compone de propuestas circenses, espectáculos de cabaret, canto y danza clásica junto a arte a partir de arena, todo ello para iniciar una "nueva etapa" de Sagunt a Escena con mayor proyección y colaboración con empresas de la comarca del Camp de Morvedre -cuatro de las obras están patrocinadas por firmas locales-.
Una de las propuestas más interesantes en lo estrictamente profesional de las artes escénicas, llegará hacia el cierre de la edición, el fin de semana del 2 y el 3 de septiembre. Durante esos días se celebrará un encuentro de directores de diferentes festivales de la Comunitat, Cataluña y Baleares con la intención de "trabajar en conjunto y dar un nuevo sentido" a Sagunt a Escena.
Dicho encuentro puede generar sinergias de distinto tipo, per Martínez Luciano aproximó a este diario que buena parte de esas variables han de pasar necesariamente por "provocar la coproducción de obras". Es una estrategia de win-win para el ámbito escénico porque, además de poder compartir costes como es obvio, genera un circuito de base que por distancias entre administraciones -y a menudo con la Llengua como caballo de batalla- no se ha puesto en práctica desde hace muchos años.
Luchiano apuntó en la presentación de la programación que, de cara a próximas ediciones, "es tiempo de pensar en la producción propia" para que los actores, bailarines y cantantes locales "den el callo" en la ciudad que "ha visto nacer el teatro".
