La carta está basada en el producto y la parrilla
El chef valenciano Diego Laso se ha embarcado en un nuevo proyecto gastronómico con la inauguración de Santa en Palma de Mallorca. Se trata de su tercer restaurante, que se une a los exitosos Vandal, también ubicado en la ciudad balear, y Momiji Atelier, en el centro de Valencia. En todos ellos comparte aventura junto a sus socios el chef Bernabé Caravotta y el sumiller Sebastián Pérez.
En Santa encontramos una propuesta basada en el producto, aunque éste seguirá reflejando, al igual que ocurre en los otros dos restaurantes del grupo, los sabores y vivencias internacionales de los propietarios. También las brasas juegan aquí un papel protagonista. Su carta está basada en los 7 pecados capitales, "que te harán arder con el fuego del infierno y elevarte hasta el mismísimo cielo".
Así, la soberbia hace referencia al producto en crudo (soberbia gastronómica en el paladar), la avaricia a los snacks (no querrás compartirlos), la pereza a los bocados cultivados con paciencia, la envidia a la carne (saborear los placeres carnales más generosos) o la lujuria a los postres (imposible no caer en la tentación). Y todo esto regado con una bodega de más de 200 referencias nacionales e internacionales que terminan de configurar la experiencia.
Hay diferentes zonas en el espacio.Al entrar en el restaurante, ubicado en el número 18 de la calle Fàbrica, el cliente contempla en su interiorismo esa dicotomía entre el bien y el mal, la luz y la oscuridad. Una primera zona de cócteles, donde también se puede comer, da paso a un comedor principal dividido en dos partes y una gran terraza en el exterior.
Laso confiesa que Santa es "un paso más en la idea de expansión del grupo” y que con su puesta en marcha “se demuestra la variedad de estilos culinarios que somos capaces de abarcar, siempre centrándonos en un producto, una técnica, una experiencia o un recuerdo y pensando en ofrecer una experiencia diferente al comensal”. De hecho, si Santa basa su propuesta en el producto, Vandal lo hace en el eclecticismo y la fusión.
Por su parte, Momiji Atelier representa la cocina de autor con esencia japonesa.