El sueño de todos los amantes del vino, para beber y para comprar
Una puerta roja corredera en la calle Poeta Guimerà de Castellón es lo que separa el mundo de un universo vitivinícola. Tras esta puerta nos recibe Paco Cerón, un joven que ha creado el sueño de los amantes del vino. Le Clos abre con una bodega personal, intensa, diferente y variada. Esta tienda con alma de vinos, así la define Paco, es una apuesta por acercar la cultura del vino a la ciudad de Castellón. Y casi de rebote, porque aunque Paco vivía en Vila-real, su intención inicial era la de crear este espacio en la ciudad de Alicante. Una llamada advirtiéndole de un local en el centro de la ciudad de la Plana Alta, le desvió de su rumbo para suerte de los castellonenses.
Quedar para tomar algo o para cenar, no es lo mismo que salir a beber vino. Cuando Paco Cerón salía a tomar vinos no sabía bien dónde acudir, todos los que amamos el vino hemos sido Paco. ¿Dónde encontramos los vinos de los famosos vignerons? Entendemos este concepto francés como vinos de autor, facilitados por la pasión de vitivinicultores, los que dialogan con el entorno para elabora vinos que reflejan el terruño, de sus propias parcelas. Este término colectivo nació en representación de un sector que trabaja cuidando el paisaje y del que ocasiona vinos con una personalidad única. Recurría a restaurantes como Le Vin Rouge pero le faltaba esa vinoteca, el Le Bar à Vin de Castellón. Comenzó divulgando el vino como aficionado en redes sociales y aconsejando a los amigos que se lo pedían; de sus viajes enológicos ha escrito dos libros y ahora se materializa su sueño y el de muchos amantes del vino con un lema: “Experimentar la cultura del vino”.
Darle vida al centro, apostar por la ciudad y crear una oferta de calidad son las bases de Le Clos. “Una vinoteca con vinos que reflejen el terruño y te hagan viajar hasta donde han sido creados”. Priorato, Bierzo, Rioja, Borgoña, Jura, Alemania, Chile, “un variado de lo más emblemático de cada zona, siempre son pequeñas producciones (10 mil botellas a 80 mil botellas como mucho) con una filosofía natural, biodinámica, ecológica”. El vino como protagonista y la vinoteca como corazón de Le Clos, acristalada sobre un suelo de piedra. Aquí se custodian vinos desde los 16 euros hasta los 650 euros. Con 160 referencias y 300 vinos entre los que se encuentran proyectos novedosos como Elena Cortana de Rioja, lo exclusivo de Viña Tondonia, Toni Bornard de Jura o Dominio de Rodeno de Castellón. Los rosados tendrán atención especial, por ser Paco un gran amante de este tipo de vinos, no faltarán Clos Cibonne de la Provence o Viña Sastre de Ribera del Duero.
Con un ambiente sobrio a la vista queda el vino. En un espacio tranquilo, íntimo, sencillo nada despista y el protagonismo lo acapara la copa, Spieguelau en este caso. Al levantar la mirada, se contemplan las creatividades de Verónica de Espacio Vegetal, quien le está ayudando con la decoración. Al fondo, una mesa larga con capacidad para 12 personas, un espacio dedicado al encuentro entre amantes del vino y los vignerons con catas íntimas y seleccionadas. Y entre botella y botella, tablas de quesos, embutidos, patés y anchoas
En horario de 10h a 13.30h y de 17h a 22h de lunes a sábado este espacio promete ser único en Castellón. Esteban Martinavarro (@devinosporelmundo), gran conocedor de la cultura del vino, lo tiene claro: “es un proyecto único en Castellón por la intensidad de carta de vinos, abre con una carta en la que quitando seis restaurantes, nadie tiene”. E insiste, “tenemos ansia de que abra porque es único: un sitio donde nos podamos juntar y compartir las botellas que tendrá”. En este sentido, Carlos de Le Vin Rouge aporta que “va a ser un proyecto muy interesante por sus referencias variopintas de diferentes zonas y naciones. Paco es un valiente y creo que será una casa diferenciadora y elegante, donde habrá una carta de vinos muy bien estructurada y equilibrada. El día que nos adelantó algunos productores de los que podremos disfrutar se nos lleno la cara de felicidad”.