Haber cursado la EGB es motivo de orgullo para millones de españoles. Su inventor fue el valenciano José Luis Villar Palasí. Aquella enseñanza obligatoria, de seis a catorce años, sirvió para abrirnos paso en la vida.
La enfermedad, aunque se trate de un simple catarro, invita a la reflexión. Te apartas del mundo y en silencio dialogas contigo mismo. ¡Qué sería de los enfermos sin una cama donde soportar sus males!
Más allá de los rankings, lo que muestran los datos es el continuo deterioro en la formación de nuestros hijos.