Nacida en Argentina hace 28 años, Denise Kupervaser pasó su infancia en México. Su interés por la nutrición y la dietética surgió durante esos años. Comenzó su carrera en el mundo de la hostelería y el turismo en el país azteca, primero desde un proyecto familiar dedicado a la formación en el sector, hasta que se enamoró del universo del vino y la sumillería. Denise se incorporó a Casa Montaña en 2018 como directora de calidad y sostenibilidad. Hace pocas semanas fue reconocida en la lista ‘100 Jóvenes Talentos de la Gastronomía’ que realiza Basque Culinary Center.
1. ¿Qué preparas en casa cuando tienes invitados?
A ver, la segunda parte bien – la de tener invitados, me refiero – siempre me ha gustado ser anfitriona y hospitalaria y recibir a gente en casa; pero lo de cocinar lo llevo peor… no sé, ¡siento que no se me da bien! Generalmente suelo ser la primera en proponer una salida antes que una reunión en casa.
2. Darte un homenaje para ti significa…
Me remito a lo que contestó Alejandro (mi marido) en su día: irnos los dos juntos, mano a mano, a una buena barra de producto. Nou Manolin, Central Bar de Ricard Camarena o una visita a Nozomi son sinónimo de felicidad. También, acompañar producto con vistas maravillosas, como sería en El Pegolí puede ser una de mis experiencias favoritas. Otra opción que nunca falla es escaparnos a Madrid y disfrutar el día completo de su gastronomía.
3. Tu último descubrimiento gastronómico
Sin duda, los productos de mar me han conquistado. En Corrientes, Argentina (mi ciudad natal), tenemos acceso a escaso pescado (de río) y nada de marisco fresco. Al principio me costó disfrutarlo, pero ahora son parte fundamental de mis alegrías del fin de semana. Aunque si debo ser más reciente, entonces mi respuesta sería la interminable ruta de pintxos que puedes hacer por Donosti. Este es mi gran descubrimiento gastronómico del último año.
4. Tu última cena consistiría en…
Aquella que me saque muchas risas. No hay nada más divertido que compartir con tus amigos/as y hasta creo que me puede dar igual lo que terminemos cenando. Lo que sí tengo claro es que yo me encargaría del vino.
5. ¿A qué le tienes miedo?
A no contar con mis referentes. Aunque supongo que lo iré mejorando con los años, siento la necesidad de hacer mi camino siempre de la mano y con ayuda de mis seres queridos. Me cuesta dar pasos de forma independiente.
6. ¿Qué guiso o plato familiar forma parte de ti?
Definitivamente, la pasta que preparaba mi abuela los domingos para comer. Era una tradición que había heredado de su padre siciliano, y que mi madre y yo disfrutábamos todos los domingos sin falta. Es algo que sigo echando mucho de menos…
7. Para combatir la resaca lo mejor es…
DORMIR. En mi caso, el sueño y el descanso lo cura todo. Estar en la cama y mirar una serie (si es a oscuras, mejor) picando algo e hidratándome. Nada más simple que eso.
8. Lo que menos me interesa de la gastronomía es…
La facilidad con la que se le puede criticar, sin tener en cuenta todo lo que probablemente haya detrás. No tiene por qué gustarnos a todos lo mismo, y es el arte que cada uno interpreta y expresa de una manera. Nos puede hacer más o menos felices, pero a veces se olvida muy rápidamente el esfuerzo, las horas dedicadas y el factor humano. El respeto por toda la cadena de valor es fundamental para hacer la gastronomía del futuro.
9. La cocina del futuro debería ser…
SOSTENIBLE. Sostenible en todos los sentidos y con el origen y el pasado muy presentes.
10. ¿Por qué te gustaría que te recordaran?
Profesionalmente, por una persona que se entrega al máximo en lo que hace y que está en constante evolución aprendiendo de todo lo que le rodea. Personalmente, por una buena persona...
11. Última vez que pediste comida en Glovo y ¿qué fue?
Cada vez pedimos menos, pero algún domingo al mes suele caer. Aunque la calidad no es la misma, disfrutar tranquilamente en casa con tu pareja, no tiene precio. Creo que fue tailandés… soy fan de la sopa Tom Kha Kai con leche de coco.
12. ¿Cómo es tu restaurante perfecto?
El que disfrutas lo que comes, pero dándole mucha importancia al “cómo”. Le doy prioridad a lo que hay detrás de cada proyecto, y a su factor humano. ¡Por eso me enamoré de Casa Montaña!
13. Tu momento más feliz asociado a la gastronomía.
Hay uno recurrente y es cada vez que abrimos las puertas de Casa Montaña y entran los primeros clientes, es una sensación mezcla de alegría y nerviosismo. Puntualmente, y por su cercanía en el tiempo, el otro día en la gala de los 100 jóvenes talentos de la Gastronomía del Basque Culinary Center en Donosti. Me sentí feliz y abrumada al lado de tantos y tan buenos profesionales. ¡Por cierto, un 10 a la organización!
14. ¿A qué cocinero/a o persona vinculada al sector admiras?
No puedo contestar esta pregunta con una sola respuesta. La fuerza y el amor de la familia García es lo que está formando mi criterio gastronómico indudablemente. Particularmente, debo decir que admiro a mi suegro, Emiliano, por su implicación y honestidad hacia el sector y todo lo que hace. Pero del que aprendo MUCHO, todos los días (y todas horas) es de mi marido. Alejandro es mi mentor, mi maestro y mi compañero.
15. ¿En qué país del mundo se come mejor? (No vale España)
No me atrevería a decir que es el mejor porque me falta mucho por conocer, pero definitivamente las experiencias gastronómicas más inolvidables que he tenido fuera de España han sido en México. Mi infancia está totalmente arraigada a su gastronomía y aunque la última vez que estuve allí fue hace más de una década, recuerdo sus sabores a la perfección.
16. Un placer culpable a la hora de comer.
Siempre he sido muy fanática de lo dulce, es mi debilidad. La pastelería y la bollería (de calidad, por supuesto) también es algo que los argentinos sabemos hacer muy bien, y la verdad es que, no puedo ir a la cama sin un pequeño dulce para terminar y alegrarme el día.
17. ¿Qué haces para desconectar del trabajo?
Muy fácil, y muy difícil a la vez. Últimamente me he dado cuenta de que cuando más estoy disfrutando es cuando comparto lo que me apasiona, así que termino hablando de trabajo en mis días libres y en mis vacaciones. No lo puedo evitar. Pero la clave es estar con la gente que quiero y compartir mis ratitos libres con ellos. Eso sí, viajando suelo desconectar bastante más rápido.
18. ¿Has conquistado a alguien por el estómago?
Esta respuesta la he tenido que pensar bastante ya que he cocinado muy pocas veces en mi vida jajaja. Pero sí que recuerdo preparar postres cuando era adolescente únicamente con este objetivo, aunque la verdad es que contaba con ayuda todas las veces.
19. ¿Crees en los influencers foodies como herramienta de visibilidad para tu negocio?
Por supuesto, el rol que tienen se está volviendo cada vez más relevante y creo que puede ser muy positivo si se colabora con cariño y con criterio. Creo que en este caso es importante mantenerse fiel a uno mismo y conectar realmente con la filosofía o la identidad del negocio al que se le quiere dar visibilidad.
20. Un plato o producto que pienses que está sobrevalorado.
Pues no lo tengo tan claro, me parece algo muy personal. Lo que sé es que siempre me baso en el concepto de “qué tanta felicidad” puede provocarme, y si no entra en mi escala de felicidad entonces tiendo a considerarlo sobrevalorado…