El mejor plató

La Albufera sigue siendo ese sitio enigmático del que presumimos los valencianos, pero pocas veces lo visitamos y menos aún nos adentramos en su historia, sus casas tradicionales (barracas) y sus costumbres y tradiciones, entre las que destaca la vela latina, afición que sigue muy viva en este lugar.

La gastronomía que nos ofrece nuestro lago de agua salada es muy popular y realmente espléndida, y pese a su artesanal elaboración, también se ha sabido adaptar a los nuevos tiempos, especialmente en sus formatos. El grupo de profesionales de la sociedad valenciana que se reunió en la Barraca del Palmar pudo saborear desde una coca d’oli con titaina al buñuelo de bacalo o all i pebre de anguila y rape, todo ello en formato individual, gracias al ingenio de la cocina de Grupo El Alto que gestionan con cariño y mimo este rincón de nuestra historia.  

Los corrillos previos al almuerzo se formaron a orillas del canal, junto a las cañas y barro que dieron el título a una de las grandes obras de la literatura española del siglo XX y que escribió nuestro paisano Vicente Blasco Ibáñez. Allí departían amistosamente de temas de actualidad y también de trabajo, un gran número de comensales, donde predominan los empresarios y profesionales liberales.

Siempre atento a cualquier detalle el sastre Antonio Puebla o José Luis Palencia, uno de los amantes de la buena cocina que no quiso perderse esta cita. También estaban Ricardo Císcar de DACSA, Rafa Muñoz Bosch, Vicente García de Extrem, Fernando Álvarez o Javier Monedero de DICOVAL, grandes profesionales del sector de la hostelería y la alimentación.

Se habló mucho de restaurantes, de lugares donde comer bien en verano, especialmente en la Costa Blanca y las Islas Baleares. Y también de fútbol y la exitosa temporada del Valencia CF, con grandes aficionados como los empresarios Manolo Peris y Luis Mª Carreras, el abogado Juan Valero de Palma, el arquitecto Alfredo Burguera, el asesor financiero José de Miguel, el empresario Sergio Terol. Tampoco faltaron a esta reunión tan valenciana el director gerente de Las Naves, Francisco Potenciano o los hermanos joyeros Antonio y Pablo Jordán.

Los arroces, tanto la paella como el de carabineros deleitaron a la gran mesa que se cobijaba en la sombra albuferenca, magníficos anfitriones Nacho y Fernando Aliño; y no faltaron los vinos que animaron la jornada, novedades de la Bodega Clos de Lôm perfectamente presentados por su enólogo Pablo Ossorio. Comieron y bebieron en absoluta armonía como hacían nuestros ancestros a orillas de la Albufera.