proyección
La València que (tras la 'eventitis') se quiere volver a poner en el mapa
30/12/2018 -
VALÈNCIA. Desde hace algunos años, la expresión “poner València en el mapa” ha estado vinculada a cuestiones, digamos, de carácter dudoso. La vinculación de los grandes eventos -con proyección internacional- a casos de corrupción ha hecho que en el imaginario colectivo se ancle la idea de que generar espacios de promoción más allá de nuestras fronteras o traer eventos es entrar en arenas movedizas. Sin embargo, la percepción exterior es necesaria para avanzar sin dar palos de ciego, para mirarse, aprender y proyectarse. En este reto entran tanto las instituciones públicas, organizaciones profesionales o empresas, que esperan dirigir la mirada a València a través de distintas vías. Porque, además de crear mapas, València también quiere proyectarse en el próximo año con eventos que empiezan a cocinarse en 2019 o citas que se consolidarán con sus segundas ediciones, espacios para la conexión que pasan por el diseño, la publicidad, el cómic o la arquitectura.
Uno de los nuevos eventos que aterrizarán en València en 2019 es Open House, una cita que nació en Londres en 1992 con el objetivo de divulgar el sector de la arquitectura y que hoy en día se celebra en hasta 42 ciudades de todo el mundo, entre las que se incluye Nueva York o Buenos Aires y, en España, Madrid, Barcelona y Bilbao. Organizada por la Asociación Europea del Paisaje Urbano (AEPU), la cita se celebrará en el cap i casal el fin de semana de 3 al 5 de mayo, con un programa que suma visitas guiadas, actividades y conferencias que abrirán al público espacios habitualmente no accesibles o contarán la historia desconocida de aquellos que conforman el paisaje de la ciudad. Para ello, se han generado cinco itinerarios distintos -València Republicana, el jardín del Turia, Moreno Barberá y el campus de Blasco Ibáñez, los Poblados Marítimos, la Ciudad de las Artes y las Ciencias, el arte urbano del Carmen y la Muralla Islámica-, una apuesta por divulgar la arquitectura que tiene su prueba piloto fijada el próximo mes de mayo.
Este año el festival de arte urbano Intramurs venía con un pan debajo del brazo. O, más bien, un gran fichaje. El fotógrafo americano Spencer Tunick se convertía en el ‘bombazo’ del evento, un cabeza de cartel que prometía revolucionar la ciudad el pasado mes de octubre. Conocido por sus multitudinarias fotografías de desnudos, que le han hecho conocido en todo el mundo, se encontró en València con los brazos abiertos, algo que no siempre ocurre en su caso. Tanto el Ayuntamiento de València como la propia Generalitat se reunieron con el creador e, incluso, le ofrecieron espacios para tomar la imagen, sin embargo el evento acabó por no celebrarse en octubre. Tras plantear distintas opciones, es el 30 de marzo la fecha anunciada por el festival como definitiva, momento en el que el fotógrafo regresará a la ciudad -en la que ya ha visitado distintas posibles ubicaciones- para ‘desnudarla’ al completo. València será así la tercera ciudad española en acoger una de la fotografías de Tunick, que en 2003 hizo lo propio en Barcelona y en 2006 en San Sebastián, reuniendo a cerca de 7.000 personas en cada cita.
Y, por supuesto, en este listado se incluye la candidatura de València como Capital Mundial del Diseño. Fue hace una semanas cuando sus impulsores presentaron el proyecto, un camino que tiene por objetivo el año 2022. El título, otorgado por la World Design Organization (WDO) cada dos años, busca “crear conciencia sobre el poder del diseño para hacer que las ciudades sean excelentes lugares para que la gente trabaje, viva y juegue”, explican desde el organismo, un título que actualmente ostenta México y que viajará en 2020 a Lille, en Francia. El proyecto de candidatura valenciano, explican sus impulsores, tiene como meta ganar pero, al mismo tiempo, quieren hacer uso del camino para divulgar el papel del diseño y mejorar aquellos aspectos a perfilar tanto en el sector empresarial como en su relación con la administración pública. “Me motiva la perspectiva de que esta candidatura sirva para concienciar sobre la contaminación visual que sufre el paisaje urbano de València”, explicaba Marisa Gallén, presidenta de la recién constituida Associació, esta misma semana en el reportaje de Cultur Plaza Por qué debe València ser Capital Mundial del Diseño. Con la mirada elevada hasta 2022, lo cierto es que la urgencia se sitúa en 2019, pues será en junio cuando se seleccionen las ciudades candidatas y en octubre cuando se seleccione la ganadora.
Pero este no es único evento que quiere ‘captar’ València. Fue durante la gala de entrega de premios del festival La Lluna, promovido por la Asociación de Empresas de Comunicación Publicitaria de la Comunidad Valenciana (ComunitAD), que sus impulsores anunciaron su intención de acoger el festival creatividad europeo Eurobest. El evento, considerado ‘hermano’ del Cannes Lions, premia la excelencia creativa en comunicaciones creativas, publicidad y campos relacionados, un festival que se ha propuesto traer a València ComunitAD, para lo que durante la gala de La Lluna, celebrada el pasado mes en La Rambleta, y ante el President de la Generalitat, Ximo Puig, pidieron el apoyo de las instituciones.
Del mismo modo que Open House, también la Héroes Cómic Con se vale de una marca internacional para generar un nuevo espacio con sabor local. La feria del cómic regresa en febrero a Feria València con una segunda edición que quiere revalidar el éxito de la primera y colocarse en el mapa de los eventos de cómic a los que ir, tras una primera edición que sumó 20.000 asistentes y atrajo la atención mediática con la visita del actor Gaten Matarazzo, Dustin en la serie de Netflix Stranger Things. Por lo momento poco han avanzado de su nueva edición, que, entre las novedades, contará con la presencia de Panini, que edita el Universo Marvel; una zona de videojuegos y ampliará su espacio hasta ocupar dos pabellones. De igual forma, también contará con un espacio expositivo que esté año ocuparán Ana Oncina, Laura Pérez y Eva Enríquez, en una edición que quiere mantener la presencia local.
En este sentido, también 2019 traerá la segunda edición de Baba Kamo, la feria internacional del libro ilustrado que este mismo mes tuvo lugar en el Centre del Carme, que contó con 13 editoriales, 6 librerías y 6 sellos de autoedición. Esta feria, impulsada por FULL (Fundació pel Llibre i la Lectura) y l'Associació de Professionals de la Il·lustració Valenciana (APIV) busca afianzarse, entre citas como Tenderete, la Fira del Llibre o la propio Cómic Con, como un espacio de visita obligada para los amantes de la ilustración.
También las Fallas buscan ponerse en el mapa internacional, una fiesta conocida pero que no quiere desaprovechar haber sido catalogada como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco para llegar a un mayor público. Mayor por número y, también, por perfil. Si bien desde hace años distintas comisiones trabajan mano a mano con diseñadores y artistas de renombre ajenos a la fiesta, como pueda ser el caso de Javier Jaén con la falla Mossén-Sorell Corona, este coqueteo ha tardado en llegar algo más a la plaza del Ayuntamiento. Fue el santanderino Okuda el que rompió con lo establecido firmando la falla municipal de 2018 de la mano de los artistas falleros José Latorre y Gabriel Sanz, una fórmula que parece no agotarse, pues este año repiten con el dúo de artistas urbanos PichiAvo. Aunque valencianos, sus encargos fuera del país (para marcas como Bulgari o en ferias como Art Basel Miami) les han situado en la escena internacional gracias a su particular estilo que fusiona la tradición clásica con el graffiti, un estilo que aplicarán a Procés creatiu, la falla municipal de 2019.