Digestivos, diuréticos, vigorizantes, estimulantes. Desarrollan el apetito, dan calor, ánimo, vigor y fuerza. Vinos de la Atlántida.
No soy médico. Soy empírico.
Antiguamente, eran usados en sanatorios y clínicas de fama, considerados indispensables para los enfermos durante el periodo de convalecencia. No existía medicamento reconstituyente que no llevase vino de Jerez* en alguna proporción.
Ya no estás y es mi dolor
No rozarte: mi condena
Sevilla. Año 1882. Congreso Médico Internacional. Durante la celebración del mismo, se llegaron a las siguientes conclusiones:
- Que los vinos genuinamente criados en Jerez* no son nocivos a la salud, si de ellos se hace uso moderado en estado fisiológico.
- Que no solo contiene elementos termógenos, sino también principios nutritivos.
- Que constituyen un agente terapéutico importante y con las fórmulas medicinales más adecuadas para emplear el alcohol en las enfermedades en que su uso está indicado, según acredita la experiencia en nuestra práctica.
Un grupo de doctores en medicina, que formaban parte de la academia Médico-Quirúrgica Jerezana, publicaron en 1883 un informe sobre el vino de Jerez*, en el que proclamaban que "la acción de este vino sobre el organismo es reparadora, despertando el apetito, facilitando la digestión y dando vigor para todos los actos, tanto físicos como intelectuales, por lo cual se recomienta su uso diario, especialmente cuando hay epidemias, pues entonando el organismo crea cierta inmunidad relativa para estos males, como pudo comprobarte en Jerez durante la epidemia de cólera en 1834".
Doctoras, doctores, enfermeros, enfermeras. Sanitarias, sanitarios. Mi respeto, mi admiración, mi jindama.
* Vinos del Marco de Jerez: Vinos de la costa suroeste española: Vinos de Sanlúcar: Vinos de Fenicios: Vinos de la Atlántida.
Soy viticultor y elaborador de vinos naturales: sin aditivos. No tengo internet. ¿Radical?