VALENCIA. Vinz Feel Free ha marcado escuela. El artista urbano sorprendió a más de uno cuando el pasado mes de diciembre entró con sus botes de spray dentro de lo que parecía terreno sagrado: el Ayuntamiento de Valencia. Los muros del despacho del concejal de Vía Pública, Carlos Galiana, se convirtieron en el inusual lienzo del artista, que con el mural Nosaltres, el poble quiso representar al pueblo vigilando a aquellos que ejercen un cargo público. Eso sí, con sus inconfundibles figuras humanas con cabeza de animal. Es ahora en Aldaia donde el Street Art ha dejado de estar en la calle para ocupar un inmueble de la administración pública.
El Centre Matilde Salvador ha sido el objeto de la intervención artística de La Nena Wapa Wapa, que ha convertido la tabula rasa de una oficina en otra historia. La artista urbana ha desarrollado durante dos días la obra ante la atenta mirada de los trabajadores y visitantes del espacio, una pieza que ha creado sin límites temáticos ni creativos impuestos por la administración. "Lo único que he condicionado es el material. He usado un spray con base al agua, no disolvente, puesto que es un espacio interior y hay gente trabajando. El que uso huele bastante", explica la graffitera.
El mural consta de una cabeza femenina de cuya cabellera nacen las ramas de un árbol que deja volar a decenas de aves que se posan sobre el mismo. Aunque prefiere no explicar el significado de ninguna de sus obras para que el público pueda hacer una libre interpretación de la pintura, sí confiesa ser consciente de lo extraño de que una de sus piezas, que históricamente ocupan muros callejeros, entre por las puertas de un edificio de propiedad municipal. "Lamentablemente antes se entendía por cultura solo aquello enmarcado en el arte tradicional, la pintura en un cuadro, no estaban abiertos a nuevas tendencias".
Pocos ejemplos similares hay pues, generalmente, los encargos a artistas urbanos suelen situarse en el exterior, pero no dentro de las salas y oficinas de un edificio. Ella pertenece a una generación rica y que ha logrado ser reconocida fuera de la Comunitat Valenciana, aunque todavía quede un largo camino por recorrer. "El IVAM es el museo de arte moderno, pero no acoge la cantera de arte urbano que ahora mismo hay en Valencia. Es una ciudad muy rica pero pasa muy desapercibido a nivel institucional", explica La Nena, cuyas obras se pueden encontrar, en otros lugares, en la calle de las Monjas.
"Es capaz de generar cambios en la sociedad. Un ejemplo claro es Fanzara, antes no lo conocía nadie y ahora se hacen excursiones. Es importante que la gente lo vea, se interese y el mundo del graffiti pueda evolucionar", explica la creadora. Parte de esa evolución pasa, en este caso, porque su pieza se olvide de una de las condiciones que se suponían básicas del arte urbano: ser efímero. Pasen y vean.
Mural 'Nosaltres, el poble, obra de Vinz Feel Free, en el despacho del concejal Carlos Galiana.
