VALÈNCIA. “El MuVIM resulta, a estas alturas, un espacio museográfico excelente para promover y difundir el conocimiento y educar, tanto en el disfrute estético como en aspectos críticos para con nuestra sociedad”. Con estas palabras el diputado del Área de Cultura, Xavier Rius, reiteraba su apoyo al Museu Valencià de la Il·lustració i la Modernitat (MuVIM) tras varias semanas en las que se ha cuestionado su existencia, después de que el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) anunciara su intención de absorberlo y convertirlo en subsede en febrero de 2019, de cara a su treinta aniversario. Las intenciones de la pinacoteca dirigida por José Miguel G. Cortés hicieron que el diputado se pusiera como escudo protector de un MuVIM al que, un mes después de sacar los tanques, quiere seguir echando capotes.
De esta forma, Rius mantuvo ayer una reunión con el equipo directivo del MuVIM, formado por Rafael Company, director; Carmen Ninet, subdirectora, y Amador Griñó, jefe de exposiciones, un encuentro en el que el dirigente provincial dio el visto bueno a una gran parte de la programación de 2018 y de 2019, dando por asegurada la continuidad del proyecto al menos durante dos ejercicios más. Si bien, aunque la concreción en torno a los proyectos expositivos y actividades del próximo año se dará a conocer en el mes de enero, Rius aprovechó para seguir mandando mensajes de apoyo a un museo que hace menos de un mes denunciaba ser objeto de una “OPA hostil” por parte del IVAM. “El MuVIM es un escaparate ideal para continuar haciendo una tarea activa en favor de una ciudadanía, a la que debemos facilitar contenidos de calidad, necesariamente más allá del puro entretenimiento”, incidió el diputado ayer.
La reunión, indicaron desde la Diputación de Valencia, ha servido para conocer y perfilar aspectos relativos al programa de exposiciones temporales, así como a las actividades didácticas derivadas, encuentro en el que se han abordado cuestiones relativas a la colaboración con otras personas e instituciones que van a mantener vínculos con el MuVIM durante los ejercicios 2018 y 2019 (bien con la cesión de piezas, bien con la colaboración o participación en varios estudios). En este sentido, Rafa Company destacó tras el encuentro que dirige un “museo activo de las ideas”, un espacio que, por cierto, repetirá presupuesto de cara al próximo ejercicio alcanzando los 1.122.606,4 euros para actividad –partida que no incluye el salario de los trabajadores-.
La comunicación de la reunión de trabajo se intuye como un nuevo gesto de Xavi Rius después de que compareciera junto a Company ante la prensa para tratar la posible absorción por parte del IVAM. “A nadie se le escapa que todo el patrimonio y servicios de la Diputación están sometidos a un estudio para ser transferidos. Absolutamente todos, desde la banderas que cuelgan en la entrada de la Diputación [pero] en este momento no me he sentado a hablar con conselleria de Cultura, ni ninguna otra, de la transferencia de ninguno de los servicios de Cultura”, indicó el diputado para después añadir que no entendería el MuVIM como extensión del IVAM. “Y menos ahora”.
En el encuentro de ayer se abordaron los vectores de proyección para los próximos ejercicios 2018 y 2019, quedando orientados a ámbitos como son: la recuperación de la memoria de los valencianos, con estudios y presentaciones de objetos de la iconografía valenciana de los últimos siglos; la colaboración con otras entidades, con la continuación de proyectos como el de fotoperiodismo Fragments, avalado por la Unió de Periodistes; o la presencia de artistas contemporáneos en activo que abordan planteamientos que profundizan en el pensamiento y en la crítica de la sociedad actual. Precisamente es la muestra de fotografía uno de los platos fuertes –y de los primeros- que se verán en 2018 en el museo, el regreso de una exposición que salió forzosamente del MuVIM provocando entonces el desapego de gran parte del público.
“Hubo una decepción producto de todo lo que ocurrió […] aunque ya no escueza la herida, es evidente que mucha gente decidió que esas exposiciones no eran las suyas y actuó en consecuencia”, explicó durante una entrevista a Cultur Plaza el actual director del museo, conversación en la que desveló la intención de acoger de nuevo una exposición que el pasado año pisó el Centre del Carme. Fue en 2010 cuando Fragments mostró entre su selección algunas fotografías sobre el caso Gürtel, caso de corrupción vinculado al Partido Popular. La administración, entonces en manos del PP, no permitió que la muestra se alargara en el tiempo censurando su contenido, un golpe que derivó en la dimisión del entonces director y Catedrático de Estética y Teoría del Arte de la Universitat de València Román de la Calle.
Pero no solo de Fragments vivirá el MuVIM en 2018. Decididos a convertirse en el museo de referencia del cómic –título por el que también luchan con el IVAM- son tres las exposiciones en torno a esta temática sobre las que el equipo del museo trabaja. En este sentido, acogerán una muestra que es una continuidad del arte Ukiyo-e, en la línea de la estampa japonesa de Massao Okinaka, así como un homenaje a Sento Llobell. Ubicado en el movimiento de la ‘línea clara’, como uno de los integrantes de la llamada ‘Nueva Escuela Valenciana’ de los años 80, Llobell es autor de título como Romance o El Laboratorio del Dr. Arnau, Ruinas y ha publicado en medios como Bésame Mucho, El Víbora, Cairo, Madriz, TBO o El Jueves.
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