VALÈNCIA. El proyecto de pasarela de moda de la Generalitat Valenciana sigue incumpliendo los plazos fijados por la propia Conselleria de Cultura. El proyecto, que opera bajo la marca Artenblanc, ha celebrado desde su nacimiento dos ediciones, una marca que se está intentando hacer un hueco en el calendario cultural pero al que le está costando despegar, en parte por su errático camino. Y es que, si bien la tercera edición debería haberse celebrado, por el momento no hay noticias de ella. Fue en 2021 cuando la dirección general de Cultura y Patrimonio anunciaba la puesta en marcha de esta tercera edición, iniciando un proceso de licitación que meses después quedaba anulado el proceso por un error administrativo, confesaban desde la propia Conselleria. En verano se retomó, aunque no fue hasta octubre que se formalizó la adjudicación a la empresa canaria OLE QUEKAPRICHO, por un total de 174.240 euros (con impuestos).
Ya entonces se daba por hecho el incumplimiento de, al menos, dos de los tres desfiles fijados en las propias bases del proceso de contratación, que marcaba que las citas se debían llevar a cabo en Alicante el 20 de julio, en Castellón el 14 de septiembre y en València en 19 de octubre. Con todo, y a pesar de que en las bases así se reflejaba, desde Cultura apuntaban a la obvia necesidad de generar “un nuevo calendario” de actividades, un proyecto que, apuntaban preguntados por este mismo diario, podría llegar a desarrollar algunos de los desfiles antes de que acabara 2022. Sin embargo, apenas unos días antes de que suenen las doce campanadas no hay noticia del evento ni anuncios de la nueva programación.
Tras cambiar el primer calendario y afirmar que se trabajaba para lanzarlo antes de acabar el año, ahora Cultura confirma lo evidente: los desfiles y actividades relacionadas con Artenblanc se realizarán el próximo año. ¿Cuándo? “Cuando esté detallado el calendario se hará público”. Con todo, el proyecto continúa desdibujándose del mapa cultural, una apuesta que nació desde la dirección general de Cultura y Patrimonio y a la que le han salido competidores. El pasado mes de octubre –mes en el que debería haber desarrollado actividades- se llevó a cabo la tercera edición del festival de moda Clec, impulsado por la Asociación de Diseñadores de la Comunitat Valenciana (Dimova), así como la primera edición de la Mediterránea Fashion Week (MFW), que se presentó en el Hotel Las Arenas.
La convivencia entre las tres citas ha resultado en un choque de trenes que ha revuelto al sector en las últimas semanas. La coincidencia en días de Clec y la MFW les obligó a competir por público y recursos, también económicos, pues ambas citas han estado apoyadas por la Diputación de València. Pero este no es el único conflicto entre eventos. Así, en el año 2021 el presidente de Dimova e impulsor de Clec, Miquel Suay, declaraba: “Solo con media tarde del Clec es la misma actividad que tiene Artenblanc. Lo que me gustaría saber es la propuesta de valor que tiene Artenblanc, ¿cuál es la diferenciación para no alinearse con la plataforma del Clec, que lo que demuestra es un respeto hacia toda la cadena de valor de la moda? No veo por ningún lado el valor añadido o diferente que haga que esté justificado que haya dos citas”. Por su parte, la directora general de Cultura, Carmen Amoraga, defendía este mismo año: “Si no hubiéramos puesto la base en Artenblanc no hubiera habido Clec, porque desde Cultura no se hacía nada con la moda. Esto ha servido para que ahora convivamos con otras iniciativas como Clec y otras que llegarán”.