El Govern del Botànic incrementa 'otro' 12% el presupuesto de Cultura que ya es un 26% superior al último presentado por el Gobierno del Partido Popular hace apenas tres ejercicios
VALÈNCIA. Hay una fórmula exacta para saber cuál es la voluntad de un Gobierno con respecto a las instituciones que gestiona: los presupuestos. En el último día del mes de octubre, en esa fiesta de fin de curso que supone la presentación del Proyecto de Ley de Presupuestos de la Generalitat, el Consell de Ximo Puig volvió a reeditar su posición con respecto a los servicios culturales con el tercer espaldarazo económico consecutivo desde conselleria que comanda Vicent Marzà. Porque mientras esa macrocartera que incluye a Educación –sobre todo–, Investigación, Cultura y Deporte aumenta un 3,5%, mientras que los totales aumentan para los valencianos un 6,7% (sin refinanciaciones), el estirón para 2018 en lo que afecta a servicios y sectores culturales es del 12%.
El presupuesto ya es un 26% superior al último proyectado por el Gobierno de Alberto Fabra para 2015. No obstante, bajando al detalle, en los incrementos generalizados, el Consorci de Museus de la Generalitat Valenciana, CulturArts, el Institut Valencià d'Art Modern y el Museu de Belles Arts de València son las cuatro entidades más beneficiadas por la subida. Por 'programas' son las Artes Plásticas y Escénicas las más agraciadas, mientras que, a partir una primera lectura y por el contrario, los estamentos que no se han subido a la ola del crecimiento en este ejercicio son el Palau de les Arts Reina Sofía (decrece un 0,72%) y las ahora extintas Ciudad de la Luz y Fundació Jaume II El Just. El obituario de estas últimas estaba programado y se certifica con los presupuestos de 2018: 0 euros.
En términos generales, cabe relacionar todas las cifras aportadas este martes desde la Conselleria de Cultura con el Plan Estratégico Cultural Valenciano 2016/2020: Fes Cultura. El objetivo marcado por Marzà es el de alcanzar en los presupuestos de 2020 "el 1% de gasto en materia cultural por parte de la Generalitat". Haciendo el porcentaje a partir del presupuesto actual –excluyendo las operaciones financieras– el dato para 2018 ya es del 0,71%. El año pasado fue del 0,67% si se excluían también los gastos financieros. El ritmo de crecimiento al que está obligado a crecer el actual Consell para alcanzar el Fes Cultura es todavía más alto en los dos próximos ejercicios, entre el 15 y el 20%. No obstante, fuentes de la propia Conselleria recuerdan que Fes Cultura se proyectó a partir de la solución de la desigualdad valenciana en la financiación autonómica. El estadio más próximo a esa solución es la convocatoria del comité técnico sobre financiación autonómica por parte del minsitro Cristóbal Montoro. Precisamente, mañana.
Además de las cifras totales y los porcentajes, lo cierto es que el constante incremento por encima de la media del resto de las áreas de la Generalitat –por encima del doble– tiene relación con el programa Fes Cultura. Desde la Conselleria también apuntan que la justificación de todas las subidas tiene que ver "con el Plan Estratégico Cultural Valenciano, con lo que supone invertir en Cultura por lo que respecta al proyecto formativo, social y de empuje económico". El segundo de esos aspectos, el social, tiene mucho que ver con el caso más destacado de los presupuestos de 2018:
Más allá de las cifras y del suma y sigue, el análisis de los movimientos presupuestarios durante los últimos años sirve para interpretar la política cultural del Consell. La idea más actual es la que tiene que ver con el Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana cuyo presupuesto ha crecido de 2017 a 2018 un 76,66%. Una cifra astronómica que prácticamente le cambia la cámara al conglomerado de espacios del que es responsable José Luis Pérez Pont. De 2017 a 2018, la situación de estrechez por la actividad y los gastos fijos a partir de 2.436.740 euros pasa a una nueva realidad de 4.304.800 euros.
La resituación del Consorci de Museus ha llevado a que, hace apenas unos días, la Conselleria de Cultura haya comunicado la creación de una comisión de compra de obras coordinada por el propio director (con 624.609 euros de presupuesto anual). En suma, la entidad se sobredimensiona y con ella sus posibilidades. Cabe destacar que, con especial atención al Centre del Carme que ocupa y coordina buena parte de sus recursos, la actividad cultural del Consell de Marzà parece relacionarse especialmente bien con la dirección de Pérez Pont. El Centre del Carme se ha convertido en espacio para una visión del Consorci mucho más plural en la disciplinas y tipología de eventos incluidos, pero también mucho más social.
El Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana ha optado por una estrategia de exposiciones que van sumando cada vez más sensibilidad a aspectos de impacto social y a la posibilidad de dar voz a asociaciones y grupos a reivindicarse. Es decir, a un sentido más próximo a los valores de inclusión y participación y no siempre conectados con los mercados de las artes. Esa idea expansiva parece ir logrando cada vez más acomodo en los presupuestos y el Consorci acaba de duplicar sus posibilidades económicas. Por relaciones y por presupuesto, el organismo que gestiona hoy Pérez Pont ya es muy distinto al que abandonó Felipe Garín.
Es relevante que el incremento "no tiene relación" con los gastos para la rehabilitación del citado Centre del Carme. El presupuesto de la obra prevista quedará al margen de estas cifras.
El mismo día en el que se presentaban los presupuestos de 2018 se firmaba el acuerdo que da luz verde a una subsede del IVAM en Alcoi. Pero el CADA será más que un apéndice del museo valenciano más visitado: convivirá con la Fundación CAM y la participación del Ayuntamiento de la localidad. La suma de las tres partes dará como resultado un centro expositivo para el que ya han llegado las primeras dotaciones en forma de cifras. Como confirmó la Conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deporte a Valencia Plaza, la subida de casi un millón de euros al presupuesto del IVAM (+14,24%) servirá para dotar a su nuevo emplazamiento "en gran medida". Pero no del todo.
De hecho, antes de que el propio IVAM haga una valoración de sus cifras para 2018, lo cierto es que todavía se desconoce cuáles serán exactamente los gastos del 'local compartido' a tres. Por el momento y en lo contante y sonante, el IVAM pasa de los 6.661.410 euros a los 7.610.230 euros. Esa será la cifra a partir de la cuál trabajará José Miguel G. Cortés, cuya vigencia como director de la institución en el actual contrato coincide prácticamente con los tiempos electorales del actual Gobierno valenciano.
El Institut Valencià de Cultura –denominación que sigue sin calar jurídicamente; en los presupuestos sigue siendo CulturArts– es otro de los organismos más beneficiados por los presupuestos del conseller Marzà. El año en el que su director, Abel Guarinos, fue elegido por concurso público, la entidad gestionaba poco más de 28 millones de euros y una serie de sorpresas en el cajón que, todavía en este 2017, siguen atendiendo pagos de hasta 2001 (Las Troyanas, en La Nau de Sagunt). Para 2018, el presupuesto del IVC superará los 36,4 millones de euros, casi seis más que este año y divididos en 29,75 millones en gastos corrientes y 6,65 en inversiones.
La razón esgrimida por parte de la propia Conselleria es te nuevo incremento para el IVC es la de ser "el principal centro de producción cultural valenciano". De hecho, se pretende que el estirón, una vez nombrados los directores adjuntos de música, artes escénicas y cinematografía, tenga una especial incidencia en la llegada de más producciones y coproducciones a partir de los recursos de la Generalitat. Un incremento notable que también –como en el caso del CMCV– ha cambiado la cara a una institución que, además, este año, ha resuelto la Relación de Puestos de Trabajo que ha colapsado a una parte de sus recursos administrativos durante los últimos años.
Guarinos celebra que el incremento de 2017 á 2018 "nos permitirá afianzar todos los proyectos iniciados entre 2016 y 2017 a lo largo y ancho de la Comunitat, además de para seguir pagando alguna sorpresa en el cajón... Ahora bien, no es un aumento disparatado: es lo que necesita para tantos sectores artísticos implicados y para tanta sociedad a la que queremos dirigirnos".
El caso más singular de los presupuestos de Cultura de la Generalitat para 2018 quizá sea el de la Fundación Palau de les Arts Reina Sofía. Después de que en el primer año de Gobierno el conseller Marzà hiciera una destacada inversión para mantener los precios bajos en las entradas a la ópera, después de que el pasado año se congelara su presupuesto, para el próximo 2018 se le restan 166.620 euros. Una cifra simbólica dentro de sus 22.823.400 millones de gestión, pero que demuestra que el Consell ha alcanzado y solidificado su techo de gasto con el coliseo valenciano.
Por el momento, y como el propio conseller o el secretario autonómico de Cultura, Albert Girona, han expresado, es el momento de que otros agentes se impliquen en su financiación. El primero y por el que más se trabaja en los últimos años, el Ministerio de Cultura, que dota de más ayuda a los Amigos de la Ópera de Bilbao que a Les Arts. El segundo y todavía muy frágil por la llamada "deuda reputacional", el de la inversión privada. Queda pendiente el análisis por parte del intendente de Les Arts, Davide Livermore, que por su parte sí ha logrado aumentar el número de actividades y ha implicado a la Orquesta de la Comunitat Valenciana en el proyecto Les Arts Volant que lleva la ópera a todo el territorio.
El Museu de Belles Arts de València (Mubav), protagonista en los presupuestos de 2017 por haber logrado –nada menos– una línea de programa propia en el Presupuesto de la Generalitat, sube este año de los 5.098.460 a los 5.730.480 euros. Un incremento considerable en plena reorganización museística a partir de la aplicación del Plan Museológico del centro dirigido por José Ignacio Casar Pinazo.
En renglón aparte y con punto y final aparecen la Ciudad de la Luz y la Fundación Jaume II El Just, extintos definitivamente sin asignación para 2018.
Para analizar la siguiente tabla hay que recordar que el Mubav pasó a tener una línea programática propia en los presupuestos en 2017. A partir de esa escisión y de la nueva denominación Promoción Cultural, Patrimonio Artístico y Museos, esta ha sido la evolución de los presupuestos desde 2015 (último ejercicio del Gobierno de Fabra).
2015 | 2016 | 2017 | 2018 | |
Libros, Archivos y Bibliotecas | 11.459,76 | 12.157,36 | 13.075,32 | 14.509,81 |
Artes Plásticas y Escénicas | 48.879,84 | 53.430,6 | 57.307,23 | 64.956,89 |
Museo de Bellas Artes | 5.098,46 | 5.730,48 | ||
Patrimonio Cultural y Museos | 11.253,63 | 10.351,22 | ||
Promoción Cultural (y a partir de 2017, +:) Patrimonio Artístico y Museos | 6.453,49 | 8.019,13 | 21.695,76 | 22.754,31 |
Cifras expresados en miles.
La Conselleria de Cultura culpa del retraso en las ordinarias al anterior equipo y promete estudiar "mecanismos para reorganizar las ayudas que no hayan salido este ejercicio"