VALÈNCIA (EP). La playa del Faro de Cullera (Valencia) ha tenido que ser cerrada al baño este viernes después de que los análisis del agua del mar hayan reflejado un alto nivel de enterococos de origen residual. La playa ya fue cerrada el pasado 16 de julio por este mismo motivo.
Así lo ha anunciado el Ayuntamiento de Cullera en sus redes sociales tras recibir la comunicación de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica con los resultados de las analíticas.
El consistorio ha indicado que Aguas de Cullera ya se encuentra trabajando para averiguar el origen de la presencia de los enterococos y ha asegurado que, una vez se conozca el resultado, si se trata de algún tipo de negligencia, "se actuará con contundencia".
El vertido está localizado en un punto muy concreto, precisa el Ayuntamiento, que informa asimismo que en el resto de playas la calidad del agua es excelente.
Finalmente, avanza que tan pronto como se reestablezcan los niveles óptimos para el baño se procederá a la reapertura de la playa.
La playa del Faro de Cullera ya tuvo que ser cerrada el pasado 16 de julio por este mismo motivo, la presencia de alto nivel de enterococos de origen residual. El Ayuntamiento informó de su reapertura un día después.