VALÈNCIA. La configuración de la comisión de investigación de la estafa en el servicio de basuras que sufrió el ayuntamiento de Algemesí el pasado mes de agosto ha provocado el choque entre el equipo de gobierno y Més Compromís, uno de los partidos de la oposición. El detonante ha sido la modificación en los miembros que forman parte de las comisiones del consistorio que ha dejado al grupo municipal Més Compromís con un representante menos que hasta el momento.
Para comprender la situación hay que remontarse al pleno en el que se configuró el ayuntamiento tras las elecciones municipales de 2019. En él se estableció que en las comisiones informativas aquellos partidos con un solo regidor, como es el caso de Vox y Ciudadanos -que posteriormente pasó al grupo de los No Adscritos- tuvieran una representación del 100% en las comisiones, es decir, de un representante, por no ser posible un número menor.
Mientras que el resto de partidos tendrían una representación del 50%. Por tanto, el PSPV-PSOE con ocho regidores tendría cuatro representantes, el PP con seis regidores tendrían tres representantes, y EU con dos regidores tendrían un representante. Sin embargo, los valencianistas tenía tres regidores y no era posible una mitad exacta. Por ello, el Secretario que había en el consistorio en aquel momento, junto a la alcaldesa, Marta Trenzano, propusieron que tuvieran una representación del 66%, es decir, dos representantes en las comisiones. "Teníamos un Secretario que no supo calcular la proporción que tenía que tener cada grupo municipal. De hecho, pidió que se la calcularan", admitió la primera edil socialista en el pleno del pasado 23 de diciembre en el que se debatió la modificación de las comisiones.
Ante este escenario en el que había seis representantes del equipo de gobierno y otros seis de la oposición, que según Trenzano no cumplía con la normativa que prevé que se mantengan las mayorías del pleno en las comisiones, decidieron que las comisiones estuvieran presididas por miembros del gobierno. Así, en caso de empate, podrían utilizar el voto de calidad. "Lo que no podemos es ganar votaciones en el pleno y perderlas en las comisiones", asegura la alcaldesa socialista.
Todo cambió cuando, a principios del mes de agosto, se detectó una estafa por valor de 135.400 euros que tuvo su origen cuando la administración ingresó en una cuenta fraudulenta una mensualidad del servicio de recogida de basuras y limpieza vial. En aquel momento, Més Compromís pidió que se formara una comisión de investigación para depurar responsabilidades. Sin embargo, los valencianistas tenían una petición: que la comisión no estuviera presidida por nadie del ejecutivo local. "No tiene mucho sentido que si se está haciendo una comisión de investigación la presida el gobierno", apunta Lorena Calatayud, portavoz la coalición valencianista. Una idea que, según insiste Trenzano, ella comparte.
Entonces, la alcaldesa propuso dos opciones: continuar como hasta el momento y que alguien del ejecutivo local presidiera la comisión, o cambiar la configuración de esta para que estuviese presente la mayoría del gobierno municipal. "Como Compromís no aceptó que nosotros presidiéramos la comisión, llevé al pleno una modificación de todas las comisiones para volver a los 11 miembros, y eso pasa por quitarle uno a Compromís", admite Trenzano.
Los valencianistas, por su parte, aseguran que trasladarán esta cuestión a los tribunales, aunque la alcaldesa reitera que "la propuesta es perfectamente legal y así lo ha determinado el Secretario". Sin embargo, a los miembros de Més Compromís no les convence: "la excusa que el actual Secretario no ha puesto pegas a sus fechorías no nos vale, puesto que la anterior propuesta también tuvo el visto bueno del Secretario de entonces y ahora nos dice que no era correcta".
Una de las críticas del grupo municipal Més Compromís hace referencia a que las leyes que regulan la formación de las comisiones instan a que se deben respetar las mayorías del pleno. En este sentido, los valencianistas entienden que no solo se refiere a la mayoría de gobierno, sino a todas las mayorías posibles. En el propio pleno en el que se debatió esta cuestión, la portavoz de la coalición valencianista puso el ejemplo de la posible mayoría que podrían formar los ocho regidores del PSPV-PSOE y los tres de su grupo, que no se vería representada en la comisión de investigación de la estafa. "El problema no era que nosotros estuvimos sobrerrepresentados, sino que otros grupos, como el suyo, estaban infrarrepresentados. Existían encima la mesa diversas propuestas para deshacer este lío", reclama Calatayud.
Trenzano, no obstante, ha rechazado esta lectura: "es imposible que se trasladen todas las mayorías posibles, porque deberíamos ser la mitad de miembros exactos que en el pleno, y con 21 regidores es no se puede. La mayoría que se debe proteger es la del gobierno".
Ante esta situación, el actual Secretario del ayuntamiento ha planteado en el informe sobre la modificación de la composición de las comisiones informativas dos posibles escenarios que contempla la ley. Por una parte, propone configurar las comisiones de acuerdo a la proporcionalidad no exacta, respetando las mayorías existentes en el pleno. O, por otra parte, utilizar el voto ponderado, es decir, que las comisiones estén formadas por un miembro de cada grupo político y que este pueda votar por todos los regidores que tiene su partido en el pleno. A la espera de ver si Més Compromís traslada a la justicia este asunto, y tras la aprobación en el pasado pleno, a partir de ahora las comisiones en Algemesí cuentan con un miembro menos.